en su edición del jueves 10.
Mientras tanto, los miembros de la comisión de Defensa del Senado acordaron ayer citar al ministro de la cartera, Luis Rosadilla, para conocer el manejo político que hizo el gobierno con el episodio del video de los militares.
"Esto puede afectar la imagen de las Fuerzas Armadas como institución, y por eso queremos que el ministro traiga el video a la comisión y explique su contenido. También pedimos que venga a comisión el director de Inteligencia, Augusto Gregori, que sabe de nuestras vidas pero nosotros no sabemos quién es", aseveró a El País el senador nacionalista Sergio Abreu.
Una vez conocida la existencia del video los dirigentes de los distintos partidos y los jerarcas del Poder Judicial rechazaron las amenazas.
Fuentes castrenses señalaron a El País que los mandos de las tres fuerzas no han tenido acceso al video. No obstante, se espera que surjan novedades en la recepción que esta tarde se dará con motivo de la visita de Frank Mora, subsecretario adjunto de Defensa para el hemisferio occidental de EE.UU., en la que participarán los comandantes de las tres fuerzas y el jefe del Esmade junto al ministro Rosadilla.
Distintos jerarcas militares en actividad se han venido reuniendo para analizar los efectos de las noticias sobre el video, mencionó un alto oficial. Según la fuente, concluyeron que se podría tratar de un operativo de contrainteligencia con el objetivo de afectar la imagen de la defensa de los militares procesados por delitos cometidos en dictadura.
El vocero advirtió que los servicios de inteligencia de las FF.AA. están "desarticulados" y que no tiene capacidad de operar a ese nivel.
En ese sentido, dijo que en una conversación entre oficiales del más alto rango y a modo de ejercicio se preguntaron si alguien conocía el domicilio de las figuras del Poder Judicial. La respuesta fue unánime: no conocían direcciones o vinculaciones de jueces y fiscales.
Fuente: El País digital