También fueron invitados al debate en Cinisi Luisa Impastato y Nino Morana
"La presencia de jóvenes hoy aquí es fundamental, porque son ellos los que tienen que llevar adelante los postulados de Peppino dándole continuidad. Estos días representan momentos de análisis y reflexión que de alguna manera retoman temas que eran de Peppino". Así se expresó Luisa Impastato, sobrina del militante comunista asesinado por la mafia el 9 de mayo de 1978 y presidenta de la Asociación Casa Memoria Felicia y Peppino Impastato, quienes intervinieron el lunes por la tarde durante el evento organizado por la Asociación Our Voice junto con algunos colectivos estudiantiles.
Abrió el debate junto a Luisa, Nino Morana, nieto de Vincenzo y sobrino de Nino Agostino. "Estoy muy feliz de que Nino esté a mi lado en esta ocasión -agregó Luisa Impastato- por el profundo cariño que siempre he tenido hacia su familia, en particular hacia su abuelo Vincenzo, a quien extrañaremos mucho durante el evento. Pero también porque compartimos este sentido de responsabilidad por las historias que nos fueron transmitidas y que tenemos la tarea de llevar adelante".
No fue fácil para Nino hablar. El reciente fallecimiento de su abuelo Vincenzo ha puesto en sus manos el testigo de la búsqueda de la verdad y la justicia para su tío: un policía asesinado por la mafia junto con su esposa Ida Castelluccio el 5 de agosto de 1989 en Villagrazia di Carini.
"Imagino que en cualquier momento mi abuelo podría aparecer aquí como solía hacerlo -dijo el joven Morana-. Cada año mi abuelo venía aquí para escuchar los distintos debates que luego terminaban en la marcha del 9 de mayo. Creo que los jóvenes tenemos la tarea de escuchar historias como la de Peppino de quienes todavía hoy lo han vivido en carne propia. Y llevar adelante estos recuerdos, adelante en el tiempo. Sólo activando esta memoria nos convertiremos en herederos de Vincenzo, Nino, Peppino y las demás víctimas inocentes de la mafia. Y éstas son oportunidades preciosas para llevar a cabo esta tarea".
Peppino Impastato era un comunista convencido, pero también un militante antimafia, un activista de derechos humanos, un periodista y mucho más. Pero ante todo era joven. "Nosotros, en la coordinación de estudiantes en lucha, a partir del sindicato que represento, llevamos años realizando actividades sociales antimafia siguiendo los pasos de Peppino y por lo tanto es una forma de antimafia entendida no sólo como memoria sino también como lucha", dijo Marta Napoli del grupo Margherita. "La lucha contra la mafia es importante para nosotros porque, al tener uno de nuestros complejos (el Cascino, ndr) en el barrio de Albergheria, vemos de primera mano el problema de la drogadicción y el tráfico de drogas. Y por tanto el control del territorio por parte de las organizaciones mafiosas".
Sin embargo, necesitamos renovar la antimafia. De ahí la necesidad de interpretarlo en clave interseccional, "es decir, analizando las distintas facetas para hacer que un fenómeno complejo como el del crimen organizado tenga también, en la medida de lo posible, relaciones con las instituciones", añadió. "Y es importante que los estudiantes estén informados, especialmente en un período en el que la idea de que la mafia ha sido derrotada es cada vez más fuerte", añadió Ludovico Palmeri, del sindicato Parlatore-Kiyohara.
Para hacer esta labor cultural es necesario contar con lugares de encuentro y debate fuera de la escuela. He aquí, por tanto, la utilidad de herramientas como la autogestión.
"Las jornadas de autogestión en el colegio son uno de los momentos más importantes con los que los estudiantes pueden demostrar su autodeterminación. Esta forma de organización permite examinar temas que muchas veces quedan excluidos de los programas escolares -afirmó Andrea La Torre del Colectivo Rutelli-. La autogestión también representa un proceso de formación innovador. La escuela es la representación política del proyecto de futuro del país".
"Y nosotros hoy en las escuelas no acordamos con la idea de futuro de la actual clase dirigente, en la que se da importancia a la forma y no al fondo. Una idea de escuela en la que la lucha contra la mafia debe hacerse con proyectos de legalidad que, sin embargo, no llevan a los estudiantes a tener sed de justicia y, por tanto, al deseo de rebelarse contra una educación estéril que no cuenta la historia de la Italia de las masacres fascistas, de las mafias y de los crímenes excelentes".
En sus intervenciones, los estudiantes transmitieron la necesidad de volver a poner la cuestión social en el centro del debate, rechazando cualquier forma de complicidad y cercanía entre mafia y política. Todo inspirado en la figura de Peppino, que sigue viviendo en las luchas sociales y sigue representando un modelo antimafia único incluso 46 años después de su asesinato.
*Foto de Portada y restantes: © Our Voice
*Foto 2: Nino Morana
*Foto 3: Luisa Impastato
*Foto 4: Andrea La Torre