
Todos los inmigrantes menos 11 murieron de sed y hambre durante la travesía, según el diario británico. "Cada mañana nos levantamos y encontrábamos más cuerpos, que tirábamos al mar", relata a The Guardian Abu Kurke, uno de los supervivientes.
A las 18 horas de partir, el barco empezó a tener problemas y se quedó sin combustible, a unos 110 kilómetros de la costa libia. Después de 16 días a

Kurke relata al diario británico que en un momento de la travesía, el mar acercó la barca a un portaaviones tanto que era imposible que no les divisaran. Dos aviones despegaron del buque y sobrevolaron la barcaza a poca altura, mientras los inmigrantes les hacían señales desesperadas y levantaban a los dos niños para que les vieran. Pero el superviviente asegura que no se hizo ningún intento de rescate.
Por su parte, según informa el diario El País de Madrid hoy, la OTAN niega que un portaaviones aliado ignorara las peticiones de auxilio de la barca.

Según la investigación de The Guardian, el único portaaviones que operaba en la zona en esas fechas era el francés Charles de Gaulle, que participa en las operaciones para imponer la zona de exclusión en Libia, pero no está bajo las órdenes del mando conjunto en Nápoles. Fuentes aliadas indican que París les ha asegurado que su buque insignia tampoco se encontraba en la zona.
Fuente: El País de Madrid /El País