La extracción de madera, la pesca y la caza, son prohibidas por ley en todo territorio indígena, pero el gobierno de Brasil no está cumpliendo con lo que determina su constitución de frenar estos crímenes, dejando las comunidades indígenas completamente vulnerables.

Los Guajajaras es uno de los pueblos más numerosos del país que vive en más de 10 tierras, todas ubicadas en el centro de Maranhão.

Lamentablemente, en diversos discursos, vimos el actual presidente, Jair Bolsonaro, afirmar que no iría a demarcar ningún centímetro demás de tierra indígena y que ya había demasiada tierra para pocos indígenas.

Esas afirmaciones, revelan la postura anti indígena del actual gobierno que fomenta y facilita la actuación de grupos ilegales, para invadir y explorar territorios ya demarcados.

La APIB (Articulación de los Pueblos Indígenas de Brasil) está en circulación por 12 países de Europa, reuniéndose con jefes de estado, artistas y activistas para denunciar la realidad del pueblo indígena y los recurrentes ataques que vienen sufriendo, como el de Paulino Guajajara.

La jornada Sangre Indígena: Ninguna gota más, empezó el 17 de octubre y termina el 20 de noviembre.

En una nota divulgada por la APIB, Sonia Guajajara, coordinadora ejecutiva y líder del pueblo Guajajara, declaró que hace mucho tiempo ellos vienen denunciando la situación de ausencia del poder público en la protección de los territorios indígenas, así como la invasión del territorio de Araribóia, para extracción de madera.

“Ya no queremos ser más estadísticas, queremos medidas de las autoridades públicas, de los organismos que están cada vez más abandonados, exactamente para evitar proteger al pueblo que está pagando con sus propias vidas, por hacer el trabajo que es responsabilidad del estado. ¡Exigimos justicia urgente!”

Jair Bolsonaro y sus aliados son deprimentes y es notoria la carencia de noción básica de historia y geopolítica de su propio país. Es vergonzoso ver la postura de un presidente al intentar desmoralizar la lucha de líderes como la del cacique Raoni.

Durante su discurso en la ONU, Bolsonaro atacó directamente a Raoni, diciendo que él es usado como una pieza de maniobra para que gobiernos extranjeros avancen en sus intereses en la Amazonia. Caique Raoni, que defiende la madre tierra en el ámbito nacional e internacional, dejo claro que su pueblo quiere seguir viviendo como siempre vivieron y que están cada vez más bajo la amenaza de invasiones de madereros ilegales, desde cuando Bolsonaro asumió su cargo en enero de 2019.

Esperamos que las organizaciones no se intimiden con este gobierno y que sigan en la lucha por la defensa de sus derechos fundamentales, principalmente el de los territorios que tradicionalmente ya ocupan.

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Foto de portada: www.apib.info