La droga estaba oculta en un cargamento de alfajores
Grosera falta de controles contra el narcotráfico y el lavado de activos en Uruguay
La fiscalía de Estupefacientes del primer turno, bajo órbita de la doctora Mónica Ferraro, imputó a dos personas por delitos vinculados al narcotráfico por el cargamento de más de dos toneladas de cocaína interceptado en el puerto de Amberes en Bélgica, los últimos días del año pasado. La droga estaba entreverada en un cargamento de alfajores y budines de una popular marca.
Hasta el momento las autoridades lograron establecer que el cargamento, que llegó a Bélgica el 27 de diciembre, partió desde Montevideo el 21 de noviembre, en el barco San Lorenzo Maersk, bajo bandera danesa. El contenedor donde estaba oculta la droga llegó a la Terminal Cuenca del Plata luego de un paso por la Zonamerica, donde fue revisada por Aduanas en tres ocasiones.
El cargamento había sido enviado por la firma Liderking Sociedad Anonima, que según distintos medios de prensa, se dedicaba -hasta ese momento-, a la importación de perfumes y lociones procedentes de Francia y con destino en el mercado paraguayo. Uno de los imputados es el propietario de la firma acusado por tráfico de estupefacientes. El segundo imputado es un transportista, acusado de asistencia al narcotráfico. Ambos permanecen detenidos de manera preventiva esperando el desarrollo del juicio.
Hubo una tercera persona detenida, vinculado a la firma importadora, pero hasta el momento no se le han levantado cargos. También fue identificada la firma que realizó la logística del traslado en Montevideo, Dositar SA, que en estas horas está siendo auscultada por la Fiscalía.
Las golosinas, que fueron compradas en un supermercado de cadena comercial reconocida, eran más de 22 mil unidades, una cifra que debió llamar la atención desde el primer momento. Lo lógico sería comprar directamente de fábrica. Pero la flaqueza de los controles en materia de lavado de activos en Uruguay, son lamentablemente una constante. En esta línea también hay que destacar que a partir de la última Rendición de Cuentas, las empresas de logística que operan en Zonas Francas fueron excluidas de la lista de sujetos obligados de controles por la ley de lavados de activos, otra clara muestra de incompetencia o de connivencia. Los alfajores llegaron a Zonamerica el 13 de noviembre donde permanecieron durante tres días.
Los investigadores creen que en este momento es cuando el cargamento fue contaminado con la droga. Luego fue revisado por el escáner de Aduanas que no detecto nada. La embarcación partió desde Montevideo y realizó escalas en Rio Grande, Paranagua y Santos en Brasil. Un mes después la droga era detectada por los escáneres europeos, con los resultados conocidos.
Foto: Aduana de Bélgica