Autos de las ONG que ayudan con alimentos fueron atacados en Gaza: siete trabajadores extranjeros muertos
Condena internacional a Israel, desde EE.UU. hasta la ONU y la UE
Siete voluntarios de World Central Kitchen, la ONG famosa por distribuir ayuda alimentaria en muchos de los teatros de guerra del mundo, fueron asesinados el pasado domingo por un dron israelí en Deir el-Balah, en la zona central de Gaza. Eran casi todos extranjeros: tres británicos (John Chapman, James Henderson y James Kirby), un australiano (Lalzawmi Frankcom), un polaco (Damian Sobol), un ciudadano con doble nacionalidad canadiense y estadounidense (Jacob Flickinger) y un palestino (Saifeddin Issam Ayad Abu Taha).
Según la reconstrucción, el convoy compuesto por tres autos con voluntarios de la organización estadounidense había salido de un depósito donde después de escoltar a camiones que habían depositado unas 100 toneladas de alimentos y platos preparados para la población local. Al salir, fue alcanzado directamente por tres disparos muy seguidos, a pesar de que los techos de los coches en los que viajaban los operadores estaban claramente marcados con el logo oficial de World Central Kitchen y a pesar de que los movimientos habían sido, como siempre, coordinados con el ejército israelí. Según el diario Haaretz, el ataque se produjo porque la unidad militar israelí que controla esa ruta había visto a un hombre armado a bordo de los camiones que entraban al depósito y sospechaba que se trataba de un terrorista.
"Fue un error resultante de una identificación equivocada durante la noche, durante una guerra, en condiciones muy complejas. Esto no debería haber sucedido", se defendió el portavoz militar Daniel Hagari. "Desafortunadamente -afirmó el primer ministro israelí Benjamín Netanyahu- ayer se produjo un trágico incidente en el que nuestras fuerzas alcanzaron accidentalmente a personas inocentes en la Franja de Gaza. Esto sucede en la guerra. Estamos investigando a fondo, estamos en contacto con las partes pertinentes y haremos todo lo posible para garantizar que este tipo de cosas no vuelva a suceder".
El mundo entero condena lo sucedido. Estados Unidos ha pidió una investigación "rápida" en el asesinato de los trabajadores humanitarios. El ministro de Asuntos Exteriores británico, David Cameron, al anunciar, al igual que su homólogo polaco, la convocatoria del embajador israelí, se mostró profundamente angustiado y pidió protección para los trabajadores humanitarios. También hubo condena por parte de Canadá.
El jefe de política exterior de la UE (Unión Europea), Josep Borrell, condenó el ataque, pidió una investigación y destacó que el incidente refuerza aún más la necesidad de un alto el fuego inmediato. A este respecto, los distintos países del Consejo de la ONU discuten un proyecto de resolución que Francia pretende presentar, que pide un alto el fuego inmediato entre Israel y Hamás en Gaza y la liberación inmediata e incondicional de todos los rehenes todavía retenidos en la Franja. La primera lectura disgustó a Israel, que pidió a Estados Unidos que la vetara.
Mientras tanto, World Central Kitchen anunció que ha suspendido sus operaciones en la Franja de Gaza. Decisión tomada por otras ONG como Anera, la organización estadounidense que ocupa el segundo lugar, segunda después de UNRWA, en su compromiso con Gaza. El segundo barco de ayuda que salió de Chipre y llegaba a Gaza con más de 200 toneladas de ayuda ha regresado.
Según Jamie McGoldrick, alto funcionario de la ONU para la coordinación de la ayuda humanitaria en Gaza, el asesinato de los siete voluntarios de Wck "no es un incidente aislado". Más de 200 trabajadores humanitarios han sido asesinados en Gaza desde el inicio de la guerra, casi todos ellos pertenecientes a UNRWA.
De la misma opinión es también Nebal Farsakh, portavoz de la Media Luna Roja Palestina, quien le dijo al diario La Stampa que "es inaceptable que los trabajadores humanitarios que prestan su servicio para llevar un poco de ayuda a la población de Gaza, que se enfrenta al hambre y la carestía, sean perseguidos, asesinados, incluso si estaban claramente identificados por sus uniformes. Las fuerzas israelíes abren fuego, matan y lastiman. La comunidad internacional debería alzar su voz para proteger a los civiles y a los trabajadores humanitarios. Israel lo hace gracias al silencio de la comunidad internacional".
Mientras tanto, el Ministerio de Salud de Gaza, dirigido por Hamás, informó que desde el inicio de la guerra se han producido al menos 32.916 muertos y 75.494 heridos en la Franja. En las últimas 24 horas al menos 71 personas han perdido la vida. Mientras que, en lo referente a las conversaciones, la delegación israelí regresó de El Cairo. El comunicado de prensa de la oficina del primer ministro afirma que se ha presentado una nueva propuesta a Hamás y ahora se espera la respuesta del grupo de Gaza. "Israel espera que los mediadores actúen con más fuerza contra Hamas para avanzar en las negociaciones hacia un acuerdo", dice el comunicado escrito por el Mossad.
Mientras tanto, continúan las protestas contra Netanyahu, con cientos de manifestantes que han instalado tiendas de campaña frente a la Knesset, hay controversia sobre la ley, aprobada el lunes por el parlamento israelí, que permite al gobierno cerrar emisoras extranjeras si cree que podría causar daños a la seguridad del Estado. En el punto de mira de Israel está en particular la emisora árabe Al Jazeera que, según Netanyahu, ofrece una narrativa distorsionada y sesgada de lo que sucede en Gaza, acusándola de fomentar el odio contra Israel. Estados Unidos calificó a la noticia como "preocupante" y añadió que el Departamento de Estado estadounidense siempre apoya la libertad y la independencia de la prensa. Para Hamás es una prueba de que Israel quiere impedir que el mundo conozca los crímenes que comete en la Franja.
Foto de portada: Antimafia Duemila
Foto 2: Benjamin Netanyahu