Miércoles 15 Mayo 2024

Entrevista exclusiva

Nadya Rasheed: “Para nosotros no es una guerra; el pueblo palestino es un pueblo ocupado”

Mientras día a día las cifras de muertos y desplazados aumentan pavorosamente, en la franja de Gaza, como resultado del asedio militar -que se materializa ferozmente con tono genocida- dispuesto por el Estado de Israel, en particular por el primer ministro Benjamín Netanyahú, en Montevideo, fuimos recibidos por la embajadora de Palestina, en Uruguay, Nadya Rasheed. Sus apreciaciones, sobre todo lo que está sucediendo en el Medio Oriente, y en particular en Palestina, fueron más que eso, fueron una flagrante denuncia pública, de lo que se está viviendo (ahora mismo que escribimos éstas líneas) en su tierra, de ahí que en algunos tramos de la entrevista, su sensibilidad de mujer y de madre, se visibilizó sin diplomacias, dejando entrever -inequívocamente- que ella, aún a distancia de la zona de la diaria masacre, vive profundamente el sufrimiento de sus coterráneos. De un pueblo que sufre un genocidio de alcances inimaginables, y lo más grave, a la vista de toda una comunidad internacional, que se encuentra dividida: en la asamblea de la ONU, hay países que se alinearon a la urgente exigencia de un alto el fuego, y hay otros que se ubicaron en la vereda opuesta, y hay otros que se abstuvieron (entre ellos, desafortunadamente, el Uruguay), pero en definitiva la mayoría votó una tregua humanitaria, pero en los hechos, esa resolución, aún sigue sin darse cumplimiento.

La embajadora Rasheed nos hizo una muy completa reseña histórica de lo que en realidad ocurre allá en el Medio Oriente: “Nosotros no creemos que se trate de un conflicto. Porque un conflicto significaría que hay dos lados iguales. Acá tenemos un poder ocupador, que es Israel, una potencia nuclear, una superpotencia regional con uno de los ejércitos más fuertes del mundo. Y también tenemos al pueblo palestino, que sufre la ocupación. Es un pueblo indefenso, sin un ejército, sin policía que los proteja, y sin su propia independencia”.

La presencia de una muy marcada ideología sionista en toda esta violencia ha sido igualmente mencionada por la diplomática. En términos muy precisos lo explica: “El problema del sionismo ha estado detrás de la historia entera de la creación de Israel. Porque está basado en el hecho de que tienes que remover a los indígenas palestinos para tener una tierra para los judíos que huían de la persecución desde Europa. Y el problema de eso es que ya había gente ahí”.

No ha habido punto que no haya quedado en el tintero, en torno a todo este tema que tiene en vilo al mundo entero: habló sin mordazas del grupo Hamás, y también de las movilizaciones en diferentes países del planeta, apoyando la lucha palestina y exigiendo un cese al fuego; de la posición de (“inentendible”) abstención del gobierno uruguayo a la hora de votar la tregua en la ONU; y de los hechos del 7 de octubre pasado: "Bueno, no creo que fue con el suceso que empezó todo el conflicto. Porque como mencioné anteriormente y como un secretario general mencionó antes del Consejo de Seguridad, antes de su reunión, hay un contexto para todo. Esto no sucedió de la nada. 75 años de limpieza étnica, 56 años de ocupación, apartheid, 17 años de un bloqueo militar que ha sido considerado legal por la Comunidad Internacional”.

Fue una entrevista, sin cortapisas, y las respuestas de la embajadora, fueron de igual tenor, y en tono valiente, en tono sincero y en tono de testimonio. Un testimonio que echa aguas claras sobre lo que se dice a través de los medios de comunicación que distorsionan realidades y hasta verdades históricas sobre la lucha del pueblo palestino.

"Esto es un problema central del Medio Oriente, del problema palestino. Evoca un montón de emociones en las calles árabes, un montón de emociones en el mundo. Es un problema de paz internacional y seguridad, como lo hemos visto. Y pienso que, si algo sale de esto, tenemos que saber que no podemos volver, solo podemos ir hacia adelante”.

En uno de los tramos, la muy dramática realidad de los niños palestinos quedó en evidencia, como una contundente denuncia: “Cada 10 minutos un niño palestino muere en Palestina. Esto no es una guerra contra Hamas. Esto no es una guerra contra militantes. Esto es una guerra contra civiles, contra Palestina”.

Al final, un mensaje directo a la comunidad humana internacional fue dado por la embajadora. Un mensaje cargado de sentimiento, de fuerza, de emoción y de identidad palestina: “Nosotros como padres sólo queremos darles a nuestros hijos un futuro mejor, lejos de la violencia. Queremos ser libres, no es complicado. En el año 2023 estamos hablando de gente viviendo bajo una ocupación militar, una ocupación que sólo ha sido sostenida a través de la violencia. Y no sólo la ocupación que estamos sufriendo por un ejército, sino también por colonos, colonos armados que creen que tienen el derecho divino de Dios de vivir en esta tierra y de hacer lo que sea por remover a los palestinos. Sólo estamos pidiendo vivir en nuestro Estado”.

Edición de video: Nicolás Pereiro