Domingo 28 Abril 2024

El sábado pasado en Messina, cientos de ciudadanos y jóvenes participaron de la marcha para decirle "No" a la construcción del puente sobre el Estrecho de Messina. Una obra inútil, dañina para el territorio, que se impone desde arriba por razones económicas, políticas y geopolíticas. El acto con el que los participantes pretendían "rechazar las opciones coloniales impuestas por las instituciones centrales" fue relatado en nuestra revista por Jamil El Sadi.

El debate sobre el tema permanece abierto desde hace algún tiempo, pero la aceleración de la construcción se decidió sobre todo en los últimos meses, según los dichos del ministro de Infraestructura Matteo Salvini.

"Estamos desbloqueando cientos de obras" y entre estas "hay un puente que unirá Palermo, Roma, Milán y Berlín. Un puente que molesta a muchos pero yo creo que va a molestar a la mafia porque traerá desarrollo y trabajos verdaderos en tierras que la misma pretende manejar", dijo en la escuela de formación política de la Liga en Milán, pocos días después de la aprobación en el Senado del llamado "decreto puente" (103 a favor, 49 en contra, 3 abstenciones), que contiene las provisiones que se necesitan con urgencia para la construcción del puente sobre el Estrecho de Messina, una conexión estable entre Sicilia y Calabria.

Un ministro que habla y habla, apoyándose en clichés, de cosas que evidentemente no sabe, a pesar de haber sido también ministro del Interior en el pasado, cuando llegó incluso a afirmar que la realización de esta gran obra será inmune a los ataques mafiosos y, por el contrario, constituirá en sí misma un arma contra el poder mafioso.

Más allá de la cuestionable viabilidad del proyecto, que prevé un puente colgante con una longitud de vano central de 3.300 metros, hacer ciertas afirmaciones escapa a toda lógica, por no decir que es una locura.

Como si históricamente Cosa Nostra y la 'Ndrangheta nunca hubieran obtenido contratos públicos para la construcción de infraestructuras, hospitales, la planificación urbana, etc.

Incluso si quisiéramos estar de acuerdo con la construcción del puente (y no lo estamos), esta ciertamente no sería la primera infraestructura que se completa en una tierra (Sicilia) donde actualmente hay ferrocarriles de vía única y los tiempos de viaje de las conexiones en caucho son indecentes, tanto en el tramo Palermo-Messina como en el de Catania-Palermo. Por no hablar de los enormes problemas señalados por geólogos y expertos acerca de la inviabilidad de la obra.

La "gran obra" que le interesa a la mafia

Lo hemos explicado varias veces en nuestra revista. El puente sobre el Estrecho de Messina es una de esas obras a las que nuestras mafias tienen en la mira desde hace tiempo.

Así lo dicen varias investigaciones y los informes de la DIA (Dirección de Investigaciones Antimafia) que se han sucedido a lo largo de los años. Basta con leerlos para entender el papel que podría jugar el crimen organizado en la construcción de esta gran obra.

En 1998, la DIA declaró que estaba "preocupada por la gran atención de la 'Ndrangheta y Cosa Nostra en el proyecto relativo a la construcción del puente sobre el Estrecho". "Parece claro -agrega el informe- que se trata de intereses que justifican un esfuerzo destinado a sustraer lo más posible el área de la provincia de Messina a la atención de los organismos judiciales y a los investigadores".

Unos años más tarde, en el 2000, la DIA volvió a señalar que "las principales familias de la 'Ndrangheta ya estarían activas desde hace algún tiempo para llegar a un acuerdo de intereses encontrados que, superando las rivalidades tradicionales, les permita enfrentar la enorme capacidad de gasto que las administraciones calabresas manejarán en los próximos años".

El gobierno de Meloni le hace un favor a la mafia se aprobo la ley del puente de Messina 2

Aún más, al observar las enormes sumas proporcionadas por los fondos europeos, los investigadores plantearon la hipótesis de la existencia de verdaderos "acuerdos entre Cosa Nostra y 'Ndrangheta con el propósito de una división más efectiva de las ganancias potenciales".

Otro informe de la DIA, del 2005, afirmaba que "la mafia está dispuesta a invertir el dinero del narcotráfico en la construcción del puente sobre el Estrecho de Messina".

Y es gracias al narcotráfico, del que la 'Ndrangheta es líder, que las organizaciones criminales poseen ingentes cantidades de dinero. Ese informe se basó particularmente en lo que demostró la investigación "Brooklyn" en la que se identificó una operación concebida por Cosa Nostra para lavar 5.000 millones de euros provenientes del narcotráfico precisamente en la construcción de la infraestructura.

En esa investigación apareció el nombre del ingeniero ítalo-canadiense Zappia. Un personaje con una larga experiencia en el campo de las grandes obras que en una escucha afirmó que si lograba hacer el puente haría volver a don Vito Rizzuto (hoy fallecido), en aquel tiempo figura clave de la internacionalización de Cosa Nostra.

Las prácticas mafiosas

Cuando se habla de la construcción de grandes obras, el problema va más allá de la práctica del "arreglo", de acaparar subcontratos, suministrar materiales, contratar mano de obra o similares.

El nivel alcanzado hoy por las organizaciones criminales, de hecho, demuestra la evolución de la mafia que apunta cada vez más al universo financiero y que es capaz de insinuarse dentro de los grandes grupos empresariales.

Las investigaciones más recientes sobre grandes obras, como la de la autopista Salerno-Reggio Calabria, a menudo pusieron de manifiesto una fuerte interrelación de intereses entre grandes empresas, familias mafiosas históricas y emergentes, tanto políticos como administradores.

En 2016, la operación "Sansone", que desmanteló al clan Condello de Archi, mostró el interés de los jefes por los taladros necesarios para los trabajos preparatorios del puente que, precisamente, debería conectar Calabria y Sicilia.

En otra investigación en la que se acusó a Impregilo de falsedad contable, falsedad en las comunicaciones empresariales y manipulación del mercado (investigaciones que luego fueron archivadas), se obtuvo una escucha telefónica en la que el economista Carlo Pelanda, justo en la víspera de la apertura de los sobres de la licitación del puente, anunció al entonces presidente de Impregilo, Paolo Savona, la inminente victoria de la empresa ("Impregilo ganará la licitación del puente sobre el Estrecho").

Y en esa misma llamada Pelanda explicó que había recibido garantías al respecto del senador de Forza Italia, Marcello Dell'Utri, expresidente de Publitalia y administrador delegado de Mediaset, luego condenado en forma definitiva por concurso externo en asociación mafiosa (hoy también investigado por las masacres de 1993).

Lo cierto es que el negocio que gira en torno al puente sobre el estrecho es gigantesco.

Basta recordar que desde la firma del contrato se había puesto por escrito que en caso de que el proyecto se paralizara por problemas económicos o judiciales, el Estado tendría que pagar una sanción del 10% equivalente a 460 millones de euros.

Cifras impresionantes.

El gobierno de Meloni le hace un favor a la mafia se aprobo la ley del puente de Messina 3

La cuestión medioambiental

Queremos recordar a quienes defienden la construcción del puente el terrible impacto ambiental que una obra de este tipo tendría sobre el territorio.

Poca gente sabe que en el 2003 el Municipio de Messina redactó un informe técnico-urbanístico para describir los impactos en el territorio de las obras de construcción del puente del estrecho.

Un documento del que habló varias veces el colega Antonio Mazzeo y que hace referencia a "una grave inestabilidad medioambiental, la transformación de zonas habitadas en canteras y vertederos y el sometimiento de municipios enteros en el este de Sicilia a obras de construcción". Y no solo eso. También se habla de "cerros enteros eviscerados, bosques que se transforman en enormes vertederos de áridos, viaductos y torres levantadas sobre conjuntos edificatorios e instalaciones deportivas, incluso un cementerio arrollado por coladas de hormigón armado. Un territorio lacerado por decenas de canteras a cielo abierto, pueblos muy antiguos devastados por postes y cables de acero, las arterias centrales de una ciudad, ya rehén de vehículos pesados, rotos por túneles y redes ferroviarias".

¿El sí al puente es fruto de un nuevo diálogo Estado-mafia?

¿Por qué se llegó hoy al fatídico "sí" a esta gran e inútil obra? ¿Cuáles son las verdaderas razones?

La fuerte sospecha, digámoslo sin rodeos, es que forma parte de nuevos diálogos y tratativas.

Y hay motivos para la tensión. Los antiguos padrinos siguen esperando el final del juego de la cadena perpetua obstativa y el 41 bis, con la esperanza nunca perdida de salir de la cárcel.

Y la muerte de Berlusconi puede conducir a una intensificación de las tensiones. Basta leer entre líneas los mensajes que Cosa Nostra transmite desde detrás y desde fuera de las rejas.

Primero fue Giuseppe Graviano directamente. El jefe de Brancaccio, al responder a las preguntas del fiscal Giuseppe Lombardo en el juicio 'Ndrangheta Stragista, realizó una serie de declaraciones sobre Berlusconi, relatando las relaciones económicas que supuestamente tenía su familia con el ex primer ministro, refiriéndose a la existencia de una carta escrita y al menos tres encuentros durante su ausencia. Todos hechos que siempre fueron negados categóricamente por Berlusconi y sus abogados, aunque el exprimer ministro nunca demandó al jefe mafioso.

Luego Graviano decidió no hablar más. Y en su lugar llegó Salvatore Baiardo, el heladero de Omegna que protegió la fuga de los jefes de Brancaccio en los años '90. Baiardo, que se hizo famoso por el profético anuncio en noviembre pasado del inminente arresto de Matteo Messina Denaro, aquejado por una grave enfermedad, realizado a dos periodistas como Massimo Giletti y Paolo Mondani habló de la existencia de una fotografía de Berlusconi junto a dos personas: el general de carabineros Francesco Delfino y, precisamente, Giuseppe Graviano.

La hipótesis de que a través de la voz de Baiardo se estaba gestando un nuevo intento de Cosa Nostra de influir en la actividad del Gobierno no es descabellada.

Y todo esto no sucedió de manera secreta u oculta, sino, entre decir y no decir, fue hecho en directo por televisión. Y está claro que Graviano, a través de su "portavoz", apuntaba alto.

De hecho, una de las fuerzas mayoritarias en el Gobierno es Forza Italia, fundada por un mafioso como Marcello Dell'Utri y por el mismo Silvio Berlusconi que, como demuestran las sentencias, entregó grandes sumas de dinero a las arcas de Cosa Nostra.

Por eso, Cosa Nostra dialoga buscando respuestas concretas de "su" partido de referencia.

Y el gobierno empieza a responder. Un primer acto podría ser la reforma de la justicia de Nordio que, si se aprueba en el Parlamento, con la presión sobre las escuchas puede ser un favor a las mafias y sistemas criminales conexos. Un segundo acto podría ser precisamente la aprobación del decreto referido al puente, con una lluvia de contratos listos para ser explotados tanto en Sicilia como en Calabria. Ganancias tan útiles como las que se obtienen del gran tráfico de drogas. Y las mafias, como bien saben hacer, están dispuestas a lanzarse de cabeza con sus "servicios". Por eso el puente sobre el estrecho de Messina no es solo una cuestión de Estado, sino de Estado-mafia.

Imagen de portada: Paolo Bassani

Foto 2: manifestación en contra de la construcción del puente sobre el estrecho ACFB

Foto 3: maqueta del puente sobre el estrecho de Messina-Reggio Calabria / Imagoeconomica