Quienes estuvieron en el Salón de los Pasos Perdidos, en el Palacio Legislativo de Montevideo, en un día histórico para la democracia en Uruguay, fueron parte de un momento de grandes emociones. El acto de reconocimiento del Estado sobre su responsabilidad en la desaparición de Luis Eduardo González y Óscar Tassino, y en los asesinatos de las Muchachas de abril, tuvo repercusiones en cada persona que estuvo allí. Lo que no cabe duda es que, aunque haya sido un paso fundamental, no es, ni fue, suficiente. “La información está”, se han cansado de repetir familiares, y también otras figuras que han estado involucradas a lo largo de estos años en la búsqueda directa de los detenidos desaparecidos. El pasado jueves 15 de junio, luego del magro reconocimiento estatal -que llevó adelante la vicepresidenta Beatriz Argimón, pues el presidente no quiso estar-, y de las palabras de Karina Tassino -hija de Óscar y representante de los familiares de las cinco víctimas a las que se aludió, de acuerdo a la sentencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos- los abrazos, llantos, agradecimientos y reconocimientos continuaron después del final de los discursos. En esas instancias, conversamos con la exdirectora de la Institución Nacional de Derechos Humanos, Mariana Mota, y con Javier Tassino -hermano de Óscar- y Elena Zaffaroni –exesposa de Luis Eduardo y referente de Madres y Familiares-, que estaban visiblemente emocionados, y también se mostraron críticos con el Estado y con quienes “de forma cruel” siguen ocultando la información sobre el paradero de los familiares desaparecidos. Zaffaroni agradeció a la vicepresidenta Argimón, por “que estuviera y concretara este acto”, y agregó: “La lucha sigue. Este es un paso. Queda mucho por hacer para que se cumpla esta sentencia. Necesitamos de ustedes, de todos, para seguir adelante, con esa fuerza”, fueron sus palabras. Javier Tassino: “Hoy hubiera sido un buen momento para reclamarle a las Fuerzas Armadas, que den información” -¿Te conforma este acto de reconocimiento? Sí, es un acto que lo tienen que hacer. Es parte de la condena de la Corte Interamericana. Este era el primer paso para cumplir todo lo demás. Después tendrán que seguir con todo esto. Este me parece que es el más fácil de hacer, el reconocimiento. Ya lo hicieron una vez con Macarena también, el reconocimiento. Ahí hay dos aspectos que son fundamentales, que tienen que ver con esa presión que tiene ahora el Estado de buscar los cuerpos, y para buscar los cuerpos hay que hacer investigación; hay que rascar y rascar, dónde desaparecieron, cómo fue, quiénes estaban. Habrá algunos muertos, pero otros no. Por lo tanto, hay que seguir, eso es muy importante: el hecho de la búsqueda, es lo más significativo. Y lo otro es lo que tiene que ver con educación de las Fuerzas Armadas en relación a los derechos humanos. Eso también, fruto de lo que pasó en la dictadura, es fruto de una educación contraria a los intereses del pueblo. Y por lo tanto hay que educarlas como hay que educarlas, más allá de la política de género, la asistencia y todo lo demás. Pero bueno, vamos en camino. Es bueno hacerlo, que no hacerlo. Es bueno que los condenen, a que no los condenen. -¿Qué te hace sentir que hablen de tu hermano así, en este lugar, que lo reconozcan? Con mi hermano tengo una afinidad muy grande. Casi no puedo hablar, casi no puedo hablar.Él se lo merecía, mucho. Luchamos para eso.Ellos no pueden hacer nada porque están desaparecidos, están muertos. Nosotros sí, por lo tanto, hacemos para que realmente demos un paso más en todo esto. -Respecto a los restos que encontraron hace unos días en el batallón 14, ¿ustedes creen que hay información en las instituciones, en el Estado, sobre dónde están? Sí, ni qué hablar que hay información entre los militares, algunos los tendrán en su casa, que es lo que hacen, guardan la información. Si vos rascas la información que hay o que se levanta, ves que falta información. Por lo general en ninguna información que hay dice nada. Los desaparecidos no son desaparecidos. No hay información de ellos. Sí, la tienen, la tienen los militares, la tienen los civiles, porque esto fue un golpe cívico militar. -¿De quién evalúan que podría ser el cuerpo? Eso es difícil. Cada uno, y es una cosa lógica, piensa en el familiar de uno. Sino nos ponemos más ansiosos. Eso dentro de 20 días, 25 días, se va a saber. Vamos a dejar trabajar a los antropólogos tranquilos, que es lo que tienen que hacer. Lo vamos a saber. Primero lo encontramos, que eso ya es buenísimo. Está este reconocimiento, aparte. Hay una aceptación, si bien es hacia dos desaparecidos, refleja para todos los desaparecidos. -Pero el presidente no estuvo… No estuvo, y bueno. El presidente no vivió, estaría en otra, no sabe, no entiende lo que es la dictadura, qué pasamos, estaba en otra. Estaba en su juventud, jugando al fútbol –no sé si juega al fútbol-. Estaba en otra. Y acá bueno, no le llega. Porque si vos tenés voluntad en un acto de estos, si te llega… por eso las palabras está bien que se digan, pero no alcanza con las palabras. Las palabras se tienen que transformar en hechos, y es lo que tiene que hacer. Pero bueno, su conciencia le dirá qué es lo que hace. Hoy hubiera sido un buen momento para reclamarle, por lo menos protocolarmente a las Fuerzas Armadas, que den información. No lo ha dado, no vino, se lo perdió. Él se lo perdió. Mariana Mota: “No dar la información es absolutamente cruel” -¿Cómo considerás este reconocimiento del Estado frente a la sentencia, que llega tarde? ¿Qué evaluación tenés? Este acto debió haberse hecho hace un año, porque era un año de plazo. Es un acto que, ya lo dijeron antes, tendría que haber sido en forma pública, abierta, debería haber estado el presidente, deberían haber estado los jerarcas máximos de cada una de las armas. Le faltaron cosas para que fuera efectivamente como debía ser. Y luego, más allá de un reconocimiento de una responsabilidad, yo creo que debería haberse explayado más la vicepresidenta en los errores del Estado y en asegurar que esas cosas no vuelvan a ocurrir. Todo eso quedó de manos de Karina que fue muy conmovedor todo lo que dijo. A partir de lo que ellos, familiares, han comentado, después que apareció este cuerpo en el batallón 14, han manifestado que es razonable pensar que hay información que sigue estando, es un discurso que se sigue repitiendo. Ante el silencio continuo de los responsables, la búsqueda que es como la búsqueda de una aguja en un pajar porque es enorme, son muchas extensiones de tierra, son varios lugares. Es una búsqueda muy lenta porque es muy dificultosa, más allá que es de todos los días. Es lenta en relación a lo que se busca y a la extensión. El tiempo que lleva es enorme. Es muy cruel lo que hacen; muy cruel de no dar la información, es absolutamente cruel. -¿La información está en las instituciones? La información está, hay quienes la tienen. Hay quienes tal vez no sean los que sepan directamente dónde, pero supieron cómo, en qué momento, hacia qué lugar. Es ir rearmando un rompecabezas pero que se puede hacer si hubiera gente que colaborara y que contara. Ese silencio es muy cruel, es lo único que puedo decir porque realmente es terrible que ante el dolor y ante la conmoción que genera encontrar cuerpos, encontrar restos en las condiciones en que se encuentran, no haya nada del otro lado, no se conmuevan para nada. Ni siquiera que recapaciten en el daño que han hecho y que siguen haciendo, porque es como decía Karina, esto sigue ocurriendo y sigue dañando a la sociedad. Y además la sociedad tiene derecho a saber qué es lo que ha pasado en este país. Todos estamos esperando que surja la verdad. -¿Y sobre el acto en sí? Es un acto que trató de cumplir de alguna manera formalmente, pero no con el alma y con el corazón como debería ser. El reconocimiento tiene que venir por varios lados, no solamente por lo formal, sino también por sentir que realmente el Estado estuvo mal y que el Estado hizo mucho daño, y que debe cambiar actitudes para no seguir profundizando el daño. Esas cosas tendrían que haber estado. Fotos: Antimafia Dos Mil |
EXJUEZA PENAL MARIANA MOTA, SOBRE LOS DESAPARECIDOS URUGUAYOS: “NO DAR INFORMACIÓN ES ABSOLUTAMENTE CRUEL”
- Antimafia Dos Mil
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