Domingo 28 Abril 2024

Antimafia Dos Mil y Our Voice convocan a movilizarse a nueve años del asesinato de Pablo Medina y Antonia Almada

Octubre, un mes de tensiones y resistencias en Paraguay. A nueve años del asesinato del periodista Pablo Medina y su asistente Antonia Almada -un crimen que develo las conexiones entre los clanes narcotraficantes y la política-, la ciudadanía vuelve a ser interpelada por periodistas y activistas sociales que alertan sobre la infiltración del crimen organizado dentro de las instituciones del Estado.

En esta ocasión la cita tuvo lugar en los estudios de la Radio Nacional del Paraguay (AM 920), en el programa Espacio Compartido, conducido por Alejandro González, que tuvo, casualmente su primer episodio al aire. Los invitados fueron el abogado Jorge Figueredo, corresponsal de Antimafia Dos Mil en Paraguay; el director de esta revista Jean Georges Almendras; y la joven activista Nathalia Pereira, quien en representación del movimiento cultural Our Voice, realizó la convocatoria para la movilización que tendrá lugar el próximo 16 de octubre, fecha en que tuvo lugar el asesinato del periodista.

“Pablo Medina hacía parte de la redacción de nuestra revista. Era nuestro compañero”, dijo al inicio de la entrevista Almendras, quien llegó a Paraguay horas antes de que iniciara el motín en la cárcel de Tacumbú: uno de los centros neurálgicos desde donde opera el crimen organizado, cada vez más transnacional.

Nathalia brevemente narra el recorrido que ha hecho esta instancia de pedido de justicia, desde aquella primera convocatoria que realizara la revista Antimafia Duemila, al cumplirse el primer mes del asesinato. “Desde el crimen de Pablo y Antonia Almada, con Our Voice hemos hecho esta convocatoria año tras año en colaboración con la revista Antimafia Dos Mil. Pero este año elegimos hacer algo más colectivo, convocando a otras organizaciones bajo el lema: ‘En marcha contra la desigualdad y la corrupción’. Participan, además, Hoya Popular Solidaria Bañado Sur, OPAMA, Plataforma Social Derechos Humanos, Memoria y Democracia, Juventud Comunista Paraguaya, Heñoi, la Coordinadora Contra la Guerra Nuclear y Conamuri”.

“La convocatoria tendrá lugar en Plaza Italia a las 16:30. Luego, a las 18:30 se marchará hacía la Fiscalía, donde se leerá el manifiesto. Habrá intervenciones artísticas y micrófono abierto”.

“Hace 9 años que salimos a las calles a denunciar al narco Estado“, dice Figueredo. Y agrega: “Este es un país que después del 89, en lugar de que se vaya institucionalizando ha ocurrido lo contrario. Lo que paso en Tacumbú hace unas pocas horas demuestra la debilidad del Estado”. El abogado, recuerda que desde el fin de la dictadura de Stroessner “han sido asesinados 21 periodistas. Iniciando con el crimen contra Santiago Leguizamón. Entre los mártires también recordamos a Salvador Medina (hermano de Pablo, ndr), que denunciaba al crimen organizado, pero que también difundía la cultura y el idioma guaraní”.

Por su parte Almendras destaca la actividad periodística de la revista que dirige, que se apoya en la labor “de todo un grupo de personas, como los jóvenes del movimiento Our Voice y otros, que junto a Antimafia Duemila de Italia, que es nuestro mascarón de proa en la lucha contra la criminalidad organizada”. Almendras le da contexto a la situación paraguaya, y alerta sobre la condición global que tiene el crimen organizado, una “ideología mafiosa” muy por encima de las rencillas criminales locales. Esta transnacionalizado se ve “en el caso de Marcelo Pecci, el fiscal paraguayo asesinado en Colombia. Hecho que involucra también a narco criminales como el uruguayo Sebastián Marset, quien también hace parte de la criminalidad paraguaya, y también de la boliviana”. Y en esta línea de pensamiento, Almendras pone los puntos sobre las íes y dice, “la denuncia que viene de Colombia contra Horacio Cartes no es banal, ni esta traída de los pelos.” Hay un contexto, hay un bosque alrededor del árbol. “Los actos de corrupción de la función pública son una pieza inevitable de una criminalidad que se transforma en una metodología mafiosa”.

El panorama parece ensordecedor, “si no conocemos como afecta el fenómeno mafioso a nuestras sociedades no vamos a poder detenerlo”, aporta Figueredo. "Hay una cultura de la violencia -agrega-. Donde hay mafia hay siempre corrupción”, sentencia.

“Basta mirar como esta Ecuador en estos momentos. Está dominado de cabo a rabo por la narco criminalidad. Se están matando candidatos presidenciales, se están matando fiscales. Perdónenme los oyentes, pero si creen que estamos relatando ficciones novelescas, no es así. Debemos frenar este temporal. Cada persona tiene la posibilidad de ser indiferente o ser protagonista en esta lucha. Aunque sea debe salir a luchar egoístamente por la propia familia”.

González sigue atentamente cada palabra, y comprende los riesgos que hay al decirlas. “Un periodista mexicano diría que es la profesión más peligrosa del mundo”, dice el director. “Estamos expuestos, cada palabra puede ser un evento provocador”. Es por esto que la resistencia ante estas lógicas criminales “no pueden estar acotadas solo a los jueces y fiscales. El pueblo no puede ser ignorante, no puede ser indiferente. Tenemos que construir una antimafia popular. Debemos participar, debemos involucrarnos”.

“Este año sentimos que va a ser algo primerizo”, dice la joven activista. "La revolución está en las calles, debemos enfrentarnos a estas cosas. Siempre desde la colectividad es que se va a poder llegar a un objetivo”.

“La lucha recién empieza”, afirma tenazmente Jorge, que lleva más de 30 años en las calles. Y recuerda, “como decía Giovanni Falcone, la mafia es un fenómeno humano, y como todo fenómeno humano tiene un principio y también tendrá su final”.

“Estos espacios hacen parte de una antimafia popular”, insiste sobre el cierre Almendras, quitándole todo mito a la lucha y a la resistencia, y llevando aquellas batallas heroicas a las posibilidades cotidianas de un pueblo y sus condiciones humanas. “Con los años se darán cuenta de que estos espacios hacen su granito de arena, hacen la diferencia. No debemos tener miedo, que es un mal peor, que el que nosotros denunciamos”.

Foto: Our Voice / Victoria Pereira