La ministra del Interior admite: "Hay más de 500 miembros activos"
La noticia de ayer fue que la ministra del Interior alemana, Nancy Faeser, declaró, en respuesta a una pregunta parlamentaria, que la 'Ndrangheta está firmemente arraigada en Alemania con una fuerza laboral de más de quinientos miembros activos. Además, el ministerio anunció que, según datos de la Oficina Federal de Policía Criminal (BKA), en 2022 se identificaron "1.003 presuntos miembros del crimen organizado italiano con residencia permanente". Del total, 519 presuntos mafiosos pertenecían a la 'Ndrangheta, 134 a la Cosa Nostra y 118 a la Camorra. Respecto a 2021, hubo un aumento de 87 sujetos. Aunque el Bundestag conoce estas cifras alarmantes, nunca ha tomado medidas regulatorias adecuadas. Basta decir que en Alemania todavía no existe una legislación equivalente al artículo 416 bis que tipifica como delito la pertenencia a una asociación de tipo mafioso.
La indiferencia de la clase política alemana acompaña este fenómeno desde hace años, a pesar de las numerosas alarmas lanzadas por las autoridades italianas.
Ya en el 2017, el fiscal adjunto de Reggio Calabria, Giuseppe Lombardo, durante una conferencia celebrada en Berlín, ilustró el grado de infiltración alcanzado por la 'Ndrangheta en el estado alemán: compra de propiedades, empresas y acerías, tráfico de inmigrantes, falsificación de marcas alemanas, extorsión, narcotráfico, tráfico de armas, blanqueo de capitales y secuestro de personas.
Sin embargo, Alemania debería ser consciente de este tipo de fenómeno: muchos tal vez recuerden la masacre de Duisburg en el 2007, pero la mafia, recordemos, estaba presente en territorio alemán mucho antes del actual milenio. En una entrevista concedida al director de ANTIMAFIADuemila, Giorgio Bongiovanni, el colaborador de justicia Gaspare Mutolo afirmó que ya en los años '80 había una orden de invertir capital en suelo alemán porque habían sido informados de que pronto caería el Muro de Berlín.
A lo largo de los años, las bandas, fortalecidas por la importante subestimación de la clase dirigente alemana, han evolucionado hasta el punto de interactuar, como había explicado Lombardo, con sujetos "infieles" situados en los "principales ámbitos estratégicos: político, institucional, profesional, informativo, financiero, empresarial, sanitario, bancario y económico".
Todo esto requiere, como revelan también las investigaciones de la dirección distrital antimafia de Reggio Calabria, una "cadena de mando muy sofisticada" articulada sobre una "estructura vertical de arriba hacia abajo" capaz de coordinar (como explica la operación "Eureka") diferentes asociaciones criminales.
Por lo tanto, la dirección de la 'Ndrangheta, explicó Lombardo, no se detiene en esa estructura, sino que se expande para formar parte de "un sistema criminal ampliado que también incluye a Cosa Nostra, la Camorra y otras estructuras criminales que operan siguiendo métodos y fines típicamente mafiosos. He aquí la verdadera esencia de la dirección estratégica, que ya no es exclusiva de un único componente criminal, sino que existe en relación con todas las mafias históricas".
En otras palabras, "la 'Ndrangheta ya no existe como organización criminal de origen calabrés, Cosa Nostra ya no existe como organización criminal típicamente siciliana, la Camorra ya no existe como organización de Campania. El sistema criminal de tipo mafioso, en sus componentes ultrasecretos, se convierte en algo diferente, considerablemente más peligroso e infiltrado en el tejido legal".
Pero ¿cuál es el motivo por el que la 'Ndrangheta eligió países como Alemania para realizar operaciones como blanqueo de capitales o inversiones? "Porque la organización criminal -explicó Giuseppe Lombardo en el 2017- siempre ha tenido dentro de sí el llamado 'componente de diálogo'. Que no se presenta de manera típicamente mafiosa y que está obligado, en una especie de camino de camuflaje muy evolucionado, a intervenir en todos los sectores estratégicos de relevancia nacional y exterior, con especial predilección por los de carácter político, institucional, profesional, informativo, financiero, empresarial, sanitario, bancario y económico. Hay que decir claramente que las mafias no son tales sólo cuando cometen crímenes sensacionales, sino también cuando adquieren la dirección y el control de las actividades económicas; las mafias no son sólo las que obtienen ganancias o ventajas injustas", reiteró Lombardo.
Flujos de dinero capaces de alterar una democracia y mantener bajo chantaje a todo un sistema económico dado que, como informa Istat, los ingresos del tráfico de drogas también se incluyen en el cálculo del PIB.
La política alemana siempre ha intentado ignorar todo esto, pero afortunadamente una parte de Alemania quiere conocer y denunciar: Marcel Emmerich, diputado por los Verdes del Parlamento Federal, declaró que los beneficios ilícitos del crimen organizado italiano incautados en los últimos años por las autoridades alemanas "son sólo la punta de un gigantesco iceberg" y que en Alemania fueron lavados más de 100 mil millones de euros. Una evaluación triste pero veraz de la situación del Estado alemán: de "locomotora económica" a "lavadora de los criminales de Europa".
Foto: diseño gráfico de Paolo Bassani