Viernes 17 Mayo 2024

El fiscal jefe de Catanzaro fue entrevistado para "Le Iene" por Luigi Pelazza

"En círculos muy altos, en el Olimpo de la 'Ndrangheta, se discutía sobre mí, si debían eliminarme y cómo hacerlo. Siempre pienso en eso (en el peligro de ser asesinado, ndr) pero el miedo debe ser vencido. No sé si moriré a manos de la 'Ndrangheta... Claro, sería una derrota desde cierto punto de vista, pero desde otro podría ser el principio del fin de la 'Ndrangheta". Quien así se expresa es el fiscal jefe de la República de Catanzaro, Nicola Gratteri, ante los micrófonos del programa Le Iene. El enviado, Luigi Pelazza, pasó un día en la vida blindada del fiscal, el hombre más temido y amenazado por los clanes calabreses, dentro de los 5 autos blindados de la custodia de primer nivel (Gratteri también tiene el bomb jummer, un bloqueador de radiofrecuencia, Gsm y Gps) y 10 hombres de escolta. Una entrevista en la que el magistrado habló de los sacrificios en su vida privada, de sus domingos en el tractor, pero también de política, de escuchas telefónicas y de la 'Ndrangheta.

"Hay algunas familias ('Ndranghetistas, ndr) en particular, para las que soy una obsesión". En este momento "hay un par de fugitivos calabreses", dijo Gratteri, quien probablemente entre jefes y subordinados arrestó a entre 2000/3000 hombres. "Cuando estaba en Reggio Calabria en 5 años debo haber capturado a unos 350". Gratteri es un magistrado incómodo y obstaculizado. Y no solo por los jefes mafiosos. Quienes lo critican lo consideran un "sheriff" o "un esposador". Ataques y deslegitimaciones que recuerdan a los que sufrió Giovanni Falcone antes de ser asesinado en la masacre de Capaci el 23 de mayo de 1992. "Seguramente he cometido errores en mi vida, no puedo decir que todo lo que he hecho está bien. Lo importante es haber trabajado siempre de buena fe y no hacer tonterías. Se equivoca el cirujano, se equivoca el albañil y también se puede equivocar el magistrado", dijo el fiscal. Por otro lado, sin embargo, es un magistrado querido y respetado por mucha gente. "En esta fiscalía todas las semanas hay entre 100 y 200 personas que piden hablar conmigo –dijo–. A veces hemos llegado a 300. Cada persona tiene 10 minutos para contarme su drama. Me dicen que están bajo usura, bajo extorsión, que sufren hostigamiento e injusticia".

Finalmente, Pelazza le pidió una opinión sobre la política y sobre qué debería cambiar en Italia. "Se necesita gente más competente en puestos de responsabilidad. En la maquinaria burocrática hay personas verdaderamente incompetentes y vergonzosas. Para cambiar hay que ser audaz. no para tu amigo, tu compadre o tu comadre", respondió Gratteri. "El drama es cuando hay políticos ignorantes y analfabetos que dicen tonterías y tienen el poder de legislar. El problema no es si ganan 15.000 euros, el problema es lo que hacen", añadió. Sobre este punto, abrió un paréntesis sobre el caso de las escuchas telefónicas, largamente debatido en los pasillos del Parlamento, especialmente por el ministro de Justicia Nordio. "Sin escuchas no se va a ninguna parte –dijo Gratteri–. Aunque un colaborador de justicia nos informe de un asesinato se necesita una confirmación objetiva. El ministro Nordio dijo que las intercepciones telefónicas son inútiles, que hay que abolirlas. Luego le explicaron que él estaba equivocado y entonces corrigió el tiro. Ahora dice que no se refiere a limitar las escuchas telefónicas para delitos mafiosos o para el terrorismo. Pero no dice nada sobre las escuchas telefónicas que conciernen a la administración pública. A menudo, la unión entre la política y las organizaciones mafiosas como la 'Ndrangheta, la Camorra y la Cosa Nostra, pasa por la administración pública. Queremos saber qué pretende hacer con esto, si quiere limitarlos o no. Porque el daño allí sería terrible". Al final de la entrevista, Pelazza le pregunta a Gratteri sobre su sueño. La respuesta no se hizo esperar: "Mi sueño es liberar esta tierra y darle esperanza y confianza a la gente".

Foto: © Imagoeconomica