Jueves 9 Mayo 2024

Cesare Sirignano fue "rehabilitado", pero sus palabras sobre Di Matteo siguen siendo vergonzosas

En los últimos días, el Consejo de Estado intervino sobre la medida disciplinaria que condujo al traslado del magistrado napolitano Cesare Sirignano, de la Dirección Nacional Antimafia a la Fiscalía del Norte de Nápoles, en Aversa, anulando la decisión del CSM (Consejo Superior de la Magistratura) y del TAR del Lazio (Tribunal Administrativo Regional) que había confirmado la sanción.

Una sentencia llena de tecnicismos que reconoce un "vicio motivacional" debido al cual el acto "debe ser anulado, junto con todos los actos consiguientes, incluida la resolución de 15 de julio del 2020 por la cual el CSM trasladó a la parte recurrente (el fiscal adjunto Sirignano) a la Fiscalía de la República de Nápoles Norte".

Ya en diciembre pasado, el Consejo Superior de la Magistratura había puesto en marcha su propio "giro" al aprobar una resolución que "si bien no produjo efectos" de hecho reincorporó a Sirignano como fiscal adjunto de la Dirección Nacional Antimafia y Antiterrorismo. 

En esa ocasión el CSM se escindió y no faltaron posiciones críticas como la del entonces consejero togado Sebastiano Ardita, quien subrayó la posición "diametralmente opuesta" del CSM respecto a la adoptada en el 2020: "Hay un cambio estructural en las decisiones tomadas. Este cambio "debe tener una explicación porque este es un organismo que también tiene una responsabilidad político-gerencial". "Este Consejo -prosiguió- logra revertir la realidad, revertirse a sí mismo. Aquí estamos tratando de volver atrás algo, porque obviamente algo ha cambiado. Porque obviamente no hay coherencia. No hay ni un ápice de coherencia en las decisiones de este Consejo y esto es una prueba más de lo que, lamentablemente, nos ha tocado ver en los últimos meses".

El Consejo de Estado, en su nueva resolución, puso de manifiesto que aquella decisión del CSM "si bien no era directamente relevante, también fue un elemento objetivamente idóneo para descomponer la trascendencia de la incompatibilidad prevista".

Una de los tantos "tecnicismos" utilizados en la sentencia con la que se llegó a la nueva decisión.

Las conversaciones interceptadas entre Luca Palamara y Cesare Sirignano, en el centro del asunto en el que había intervenido el CSM, fueron banalizadas y reducidas a conversaciones de "carácter sindical" ya que ambos pertenecen al mismo grupo asociativo, al tiempo que se admite que "en varios momentos, ambos han superado los límites de la continencia (formal) y de la corrección (sustancial)".

El Consejo de Estado de los tecnicismos 2

Al igual que el CSM, atendiendo a los tecnicismos y no a los hechos, también el Consejo de Estado se convierte en el Sanedrín.

Más allá de las llamadas "cosas en su lugar", de los tecnicismos y de las formas, es evidente que, por enésima vez y de un plumazo, se demuestra que ética y la moral son valores que pueden ser fácilmente pisoteados.

¿De qué estamos hablando? Ya lo hemos dicho en otras ocasiones al hacer referencia a los intercambios telefónicos habidos entre el entonces líder de Unicost, Palamara, y el magistrado Sirignano.

El primero ocurrió en la noche del 6 de mayo. Gracias a un troyano se capturó una conversación de whatsapp. "Este grupo para investigar las masacres de que todo el mundo habla ¿era necesario?", dijo Palamara. La respuesta del colega magistrado no se hizo esperar: "Sí, pero no es para investigar las masacres, es para verificar cualquier conexión entre las investigaciones que pudo haber sido pasada por alto o no adquirida. Luca, nos vemos mañana a última hora de la tarde".

El intercambio continuó muy de cerca. "Te digo que no es una gran movida", reiteró Palamara. Y Sirignano respondió: "Luca, pero no entendiste que Federico (Cafiero de Raho, también Unicost, ndr) representa a nuestra fuerza". "Lo sé. Pero no debe cometer errores", concluyó Palamara.

Al día siguiente hubo una conversación con fuertes consideraciones sobre Nino Di Matteo, en ese momento fiscal nacional adjunto antimafia, pero también sobre Federico Cafiero de Raho y precisamente sobre el nacimiento del grupo que debía investigar a los autores intelectuales externos de las masacres. Ante las críticas de Palamara a la decisión del fiscal Cafiero de Raho de "armar el grupo con Di Matteo adentro", es decir, el grupo para investigar las masacres, Sirignano soltó: "Y lo incluyeron como si fuera el Padre Eterno en la cruz, es una estupidez". Y al mismo tiempo agregó: "Tenemos que hablar con Federico".

Lo curioso es que, unas semanas después, esa esperanza de alguna manera se hizo realidad con el alejamiento de Di Matteo del grupo de las masacres, luego del famoso episodio del programa de televisión "Atlantide", en el que Di Matteo, al ser entrevistado, repasó todas las anomalías que ya habían surgido durante el transcurso de varios procesos respecto a la masacre de Capaci. El caso terminó poco más de un año después cuando De Raho revocó la decisión. 

Con respecto a estos hechos también habíamos recibido una carta de Sirignano, cuyo compromiso en la lucha contra la mafia nunca hemos cuestionado, que publicamos con transparencia y sin censura. Carta que reproducimos en los artículos adjuntos.

En esa carta, se informaba de una reunión que tuvo con el magistrado Nino Di Matteo, a los fines de aclarar el significado de sus palabras.

Si realmente se aclaró todo, ¿por qué en los fundamentos de la apelación de Sirignano se objeta la composición del Pleno del CSM, en su opinión ilegítima, debido a la participación del consejero Di Matteo que, a su criterio, estaba en "conflicto de intereses"? Un punto que el propio Consejo de Estado consideró "infundado".

El doctor Sirignano podrá no estar de acuerdo, pero más allá de las explicaciones ofrecidas, esos pasajes de las conversaciones que tuvo con Palamara siguen siendo graves y ofensivos.

Foto de portada: © Imagoeconomica

Foto 2: El magistrado Cesare Sirignano