El investigador Jair Krischke, presidente del Movimiento de Justicia y Derechos Humanos de Brasil, junto al nobel, Adolfo Pérez Esquivel, denunciarán ante el Tribunal Federal de Lomas de Zamora, en la provincia de Buenos Aires, el secuestro y posterior desaparición de Edmur Pericles Camargo, ocurrido el 16 de junio de 1971, en el aeropuerto de Ezeiza, en la República Argentina.
Esta denuncia, de corroborarse los hechos, se consolidaría como uno de los primeros crímenes políticos del Plan Cóndor, donde las fuerzas armadas latinoamericanas, en conjunto con los servicios secretos de varios países, en sintonía con la política imperialista del gobierno de los Estados Unidos, asestaron un letal golpe a la cultura latinoamericana, para imponer un sistema capitalista salvaje.
Camargo, se encontraba exiliado en Chile, bajo protección del gobierno de Allende. Había sido deportado de su tierra natal, junto a otros 68 activistas, en una negociación por liberación del embajador suizo Giovanni Enrico Bucher, quien había sido secuestrado por la guerrilla comandada por el excapitán del Ejército, Carlos Lamarca. Camargo, viajaba con destino a Montevideo, donde habría de “entregar tres cartas a Goulart enviadas por opositores a la dictadura que se encontraban en Chile, que querían estar articulados con lo que pasaba en Uruguay", narró Krischke, al periódico Página/12.
El expresidente Joao Goulart, luego del golpe de Estado contra su gobierno, se refugió en Montevideo, junto con sus principales colaboradores. Desde allí, continúo operando políticamente, en virtud de la resistencia. En 1976, murió en la localidad correntina de Mercedes, en el norte argentino. Pese a que su muerte oficialmente se debió a una falla cardiaca, distintas evidencias sugieren que podría haber sido víctima de los escuadrones de la muerte del Plan Cóndor.
Al aterrizar en Ezeiza, ‘Gauchau’, como era apodado Camargo, fue detenido dentro del avión de LAN Chile en el que viajaba, por cuatro agentes de la policía federal: “Lo metieron en un vehículo y se lo llevaron hasta Aeroparque adonde ese 16 de junio llegó un avión de la Fuerza Aérea Brasileña, que el 17 de junio muy temprano, antes de las seis de la mañana, lo trasladó clandestinamente hasta la base aérea militar del Galeao, en Río de Janeiro", relata Krischke.
Según el investigador: “El Cóndor surgió formalmente en 1975 en Chile, pero tenemos este caso de Edmur en 1971, y otros más o menos contemporáneos, que nos muestran que la red ya estaba funcionando desde antes”, y agregó, “estoy convencido de que el Cóndor fue una idea surgida en Brasil, pero como nada se investigó en mi país, el Cóndor brasileño es Cóndor menos conocido".
El sistema judicial brasileño, ha sido históricamente reticente a investigar los crímenes de lesa humanidad ocurridos durante la etapa militar de la dictadura, desde el inicio de los 70, siendo la figura emblemática Emilio Garraztazú Médici. Actualmente, durante el gobierno del Brasil, incluso se ha hecho propaganda de Garraztazú, dentro de discursos de neto corte fascista, dichos por el propio Bolsonaro y las cúpulas militares, que rigen sobre el país. Por esto, ambos querellantes confían en que el sistema judicial argentino sea más benigno en lo que respecta a esta causa. Incluso, sea quizás una vía para acceder a la Corte Interamericana de Derechos Humanos, además de servir como precedente para reabrir el diálogo, para derogar la ley de amnistía, que aun rige sobre el Brasil. Ley, que impide el juicio y castigo de la casta militar.
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*Foto de portada: memoriasdedictadura.com / Edmur Pericles Camargo
*Página 12 / Imagen de Joaquín Salguero: Jair Krischke, investigador