El asesinato a sangre fría del malabarista, artista callejero, Francisco Martínez Romero, es la enésima manifestación de un gobierno asesino que debe renunciar y entregarse a la justicia, por cada delito y cada crimen institucional cometido durante su gobierno, por dignidad y respeto a todas las víctimas de su mandato.

Lo dijimos y lo gritamos de diferentes formas, como movimiento activista artístico internacional, y hoy, con dolor e impotencia en nuestros pechos, lo decimos de nuevo: Chile vive bajo un Estado fascista, pinochetista, que se sostiene solo y exclusivamente en la represión violenta y sanguinaria del pueblo.

No es sólo un carabinero incompetente y cobarde, que decide disparar como primera opción frente a un pobre, un migrante, un artista, un indígena, un excluido social por la feroz economía neoliberal al servicio de las mismas familias mafiosas de siempre. Las instituciones, las fuerzas de seguridad y el Estado de Chile se sostienen en los principios dictatoriales que hoy siguen disparando a miles de jóvenes, cansados de la violencia, el hambre y los inexistentes derechos humanos en todo el país. Territorio en el cual el presidente Sebastián Piñera, con arrogancia y cinismo, sigue imponiéndose en el poder con un 4 % de aprobación en toda la nación.

No es gatillo fácil, no es un “paco”. La muerte del artista Francisco es el Estado opresor al que los movimientos feministas, migrantes, indìgenas y sociales, resistimos en Chile. Y vamos a seguir señalando, denunciando, con el arte y nuestra voz, en nombre de todos los caídos y las caídas, hasta que se haga justicia con cada genocida. Hasta que sepamos la verdad por cada injusticia y el Chile de Salvador Allende, de Victor Jara, de Violeta Parra, de Macarena Valdez, de Camilo Catrillanca y de todos los mártires. Hasta que se alce en una democracia verdadera, en la victoria que ya es del pueblo.

¡No olvidamos! Exigimos justicia por Francisco y todos los perseguidos, torturados y asesinados de Chile. ¡Exigimos la libertad de todos los presos políticos!

¡Libertad a los presos políticos!

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*Foto de portada: captura de YouTube