Fueron imputados tres policías de la Guardia Republicana por abuso sexual agravado, a quienes se les aplicó como medida preventiva 180 días de cárcel. Se trata de una nueva violación grupal. La denuncia fue presentada en la Justicia por dos mujeres que dijeron ser víctimas de abuso sexual, y que el delito se cometió dentro de un patrullero. El caso está en manos de la Fiscalía de Delitos Sexuales de 5° turno, a cargo de la fiscal Mariana Alfaro.

La acusación, a la que dio lugar el juez penal de 38° turno, Alejandro Asteggiante, tuvo un cúmulo de evidencias, desde las pericias forenses a las jóvenes y a la ropa que llevaban, y el recorrido que hizo el patrullero -que se evidenció en el GPS- entre otras.

Dos jóvenes mujeres denunciaron haber sido llevadas en un patrullero hasta un asentamiento desde Nuevo París, en donde caminaban juntas en la noche. Al llegar a Luis Battle Berres, un patrullero -camioneta JAC- que recorría la jurisdicción de la seccional 19, les ofreció llevarlas a su hogar, pero tomaron otro rumbo. En el viaje -agregaron las denunciantes- los hombres pararon en un comercio a comprar cervezas y las habrían obligado a consumirlas. Cuando llegaron a un asentamiento, habrían abusado sexualmente de ellas. Luego las habrían dejado en una zona del barrio que desconocían. Las jóvenes se acercaron a una estación de servicio, donde narraron lo sucedido. Luego fueron trasladadas al Hospital Pereira Rossell para realizar pericias.

Los tres presuntos atacantes fueron identificados fácilmente por sus características: uno de ellos usaba brackets, otro era de baja estatura y el otro tenía una camiseta con una calcomanía a la altura del pecho.

Las jóvenes y sus familiares están siendo atendidas por la Unidad de Víctimas y Testigos de Fiscalía y el Consultorio Jurídico. Juan Raúl Williman, su abogado, dijo a la prensa que las informaciones son reservadas.

“Se trata de preservar la intimidad y la integridad de todas las partes”, explicó.

La presidenta del sindicato policial, Patricia Rodríguez, dijo a Subrayado que “si es que pasó, no se puede dejar sólo en un repudio. Se debe hacer algo a nivel ministerial con estos compañeros para que nunca más se dé un caso así”. “es gravísimo”, “porque la Policía nos tiene que cuidar, es el servicio que dan los funcionarios”, agregó.

Desde el Frente Amplio, el senador Enrique Rubio expresó su preocupación. “Se está manifestando un hecho de extrema gravedad” desde la policía, que se suma “a otros que tienen que ver con otro tipo de desencuentros con los ciudadanos”.

Los dichos del ministro del Interior

El ministro del Interior Luis Alberto Heber, realizó declaraciones públicas sobre el caso, que generaron repudio entre diversos colectivos y movimientos.

“De ser cierto, es muy grave, porque no solamente enchastra el uniforme policial, sino que el ministerio, y en este caso yo mismo, me siento traicionado”, fueron las palabras de Heber ante la violación grupal por parte de personal a su cargo.

Como es habitual en campaña política, esta no fue la excepción. Heber trajo a colación la Ley de Urgente Consideración (LUC), que se llevará parcialmente a referéndum el próximo 27 de marzo, para votar a favor o en contra de la derogación de 135 de sus artículos.

“Si es el caso de que efectivamente violaron a las chicas, no tienen ni pueden redimir penas, y tendrán que cumplir toda la pena que establece el Código Penal, porque así lo establece la nueva ley si no se deroga”, aseguró el ministro.

Rubio dijo que las declaraciones de Heber fueron “tristes”, “porque dice que se siente traicionado, cuando hay que colocarse en el lugar de la víctima, que no es el ministro sino estas mujeres”. Además, manifestó que es “preocupante lo que viene sucediendo en la cúpula policial y el Ministerio del Interior, por las directivas, el discurso, un conjunto de cuestiones que rodean estos insucesos”.

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*Foto de portada: Subrayado Com