Nos llega la información desde el Brasil y nos resulta esperanzadora, de que el crimen de marzo de 2018 (de hace ya cinco años), de la activista única e irrepetible de Latinoamérica: Marielle Franco, definitivamente podría no quedar impune. La policía informó que dos de los partícipes del letal atentado -uno detenido desde el 2019, y el otro detenido recientemente- darían importantes datos que podrían llevar a identificar fehacientemente a los autores intelectuales del hecho criminal que impactó al mundo.

Precisamente, según lo dicho a la prensa brasileña e internacional en los últimos días por voceros del Ministerio de Justicia y Seguridad, el detenido Élcio de Queiroz -quien fue acusado oportunamente por conducir el vehículo desde el cual otro sicario Ronnie Lessa efectuó los disparos contra la concejala Franco- a cambio de beneficios penitenciarios aportaría valiosas informaciones para que los investigadores lleguen a los mandantes del homicidio.

Hay que consignar, además, según despachos que llegaron a nuestra mesa de redacción, que la Policía Federal también detuvo a un ex bombero, Maxwell Simoes Correa (conocido como Suel) , quien según el ya mencionado Queiroz tuvo la tarea de hacer vigilancias a Marielle Franco para finalmente concretar la acción de emboscada que terminaría con su vida, señalando el bombero que más tarde, él mismo lo sustituiría en esa fase del operativo contra la concejala.

Todo este nuevo empuje en las investigaciones en el caso Franco sería el resultado de la intervención, meses atrás, del ministro Flávio Dino quien anunció al periodismo que nuevas líneas de trabajo en torno al episodio arrojarían resultados altamente favorables, especialmente en torno al círculo de autores intelectuales.

De todo este contexto de investigaciones que han tenido altas y bajas, podríamos estar frente a una convincente posibilidad de que puedan irse definiendo pistas para llegar a los verdaderos responsables del crimen, en el que estarían vinculados grupos parapoliciales que controlan y viven constantes disputas por el dominio de territorios de Río de Janeiro, donde particularmente se llevan a cabo actividades ilícitas, preferentemente dentro del narcotráfico.

El mismísimo ministro Flávio Dino aseguró a la prensa internacional que el plan del crimen de Franco se relaciona estrechamente con el rol que ella cumplía en ese momento, siendo un indiscutible símbolo de la lucha contra el racismo y la discriminación de género, defendiendo la causa LGTBI+.

En esa línea Dino dijo, además: “Hoy asistimos a un cambio en el nivel de la investigación. La investigación concluye en el nivel de la ejecución y ahora hay elementos para ir a un nuevo nivel, que es el de identificar a los autores intelectuales”.

Foto: Folha de Sao Paulo