Desde hace una semana José Peirano Basso está bajo la custodia de Interpol esperando su extradición a Paraguay donde enfrentara dos causas, una por maniobras fraudulentas en el Banco Alemán, la otra por delitos de lesión de confianza y conducta indebida contra los ahorristas del Fondo Mutuo Benaleman.

El pedido de extradición lo solicito el Banco Central de Paraguay en el 2003, y en 2004 la extradición fue concedida en primera instancia, tanto José como su hermano Jorge habían huido del Paraguay en el 2002. En el 2013 fueron condenados en Uruguay por la quiebra del Banco de Montevideo durante la crisis del 2002. Y como se pretende demostrar en las reiterativas causas judiciales, las operaciones a uno y otro lado de la frontera formaban parte de un mismo sistema fraudulento.

Fue la jueza en lo penal Ana Salterain, quien dictaminó la detención de Peirano por considerar que existía riesgo de fuga, mientras la extradición se hace efectiva.

Según publicó el diario ABC Color, el abogado Guillermo Duarte Cacavelos que representa los intereses de Peirano, estaría negociando una fianza de dos millones de dólares para que a su defendido se le conceda el privilegio de prisión domiciliaria, la cual transcurriría en un hotel. El abogado declaró: “Tenemos informes del Banco Central de que el Banco Alemán ya pagó a todos los ahorristas, este perjuicio patrimonial hoy ya no existe y tenemos acuerdos firmados con los querellantes”.

Sería entonces el próximo día 30 de octubre, el día en que finalmente, funcionarios de Interpol de Paraguay llegarían a Montevideo para custodiar a José Peirano Basso y derivarlo, se estima bajo fuertes medidas de seguridad, a la justicia de aquel país.

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*Foto de portada: abc.com.py