Por Margherita Furlan-21 de agosto de 2022

Militia est vita hominis super terram (La vida del hombre sobre la Tierra es lucha). Con estas palabras del Libro de Job, Darya Platonova Dugina abrió su canal de información en Telegram. Nacida para luchar, la hija del conocido filósofo Aleksander Guélievich Dugin, analista política, graduada en filosofía en Moscú en 2015, de 30 años, murió el sábado 20 de agosto, alrededor de las 22:00 hora local, al borde de una carretera cerca de Moscú, cuando a causa de un atentado explotó el coche en el que regresaba del Festival 'Tradición', cerca de Zakharovo. Entre los nombres de los oradores figuraba el de su padre, quien debía regresar a Moscú en ese mismo auto, pero que a último momento decidió, por una trágica voluntad del destino, viajar por otro medio.

"Si la pista ucraniana" detrás del asesinato de la periodista rusa Darya Dugina "es confirmada por los investigadores, entonces será terrorismo de Estado por parte de Kiev". Así lo afirmó la portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia, Maria Zakharova, pero invitó a "esperar los resultados de la investigación". El líder de la República de Donetsk, Denis Pushilin, en cambio, acusó abiertamente a Kiev: "¡Infames cobardes! Los terroristas del régimen ucraniano volaron a su hija en un intento de eliminar a Aleksander Dugin. ¡Era una verdadera chica rusa!", escribió Pushilin en su propio canal de Telegram.

Mientras tanto, Aleksander Dugin, quien llegó al lugar de la masacre inmediatamente después del incidente, fue hospitalizado. Las imágenes hablan con claridad y, para un ojo italiano atento, recuerdan a los hechos de Palermo de hace treinta años, a las masacres de Giovanni Falcone, Paolo Borsellino y sus escoltas, hechos que cambiaron el destino de Italia y del mundo.

Probablemente nunca se sabrá quién puso esa bomba en el Land Cruiser de Aleksander Dugin, pero el método es reconocible. Lo más probable es que sea un mensaje de estilo mafioso, que se lanza a todo el mundo, a Europa, y a Italia, que ahora se prepara para elecciones anticipadas.

La masacre de Moscú indica que nadie está a salvo, pero sobre todo que quien se acerca demasiado a Rusia corre el riesgo de sufrir una nueva temporada subversiva. Por otro lado, ahora se sabe, por haberse comprobado, que "Stay Behind ha estado operando durante algún tiempo en Ucrania. Es una operación paramilitar nacida de la OTAN y financiada por la CIA que, en la posguerra, mediante actividades secretas de sabotaje militar, se convirtió en autora de masacres, estragos, asesinatos, atentados, desestabilizaciones de todo tipo e índole en toda Europa. En Italia, su nombre en clave era Gladio y fue revelado por primera vez a la opinión pública por Giulio Andreotti recién en 1990, para evitar que los magistrados que investigaban a terroristas negros lo sacaran a la luz. La organización incluye francotiradores, mercenarios, militares, todos presentes en Ucrania, que en 2014 – mientras gran parte de la prensa aclamaba los disturbios de Kiev como 'revolucionarios' – lincharon a ejecutivos, quemaron vivos a activistas en la Cámara del Trabajo de Odessa, masacraron a civiles en Mariupol y bombardearon las ciudades de Slaviansk, Lugansk y Donetsk con fósforo blanco".

Similares son las modalidades homicidas. Similares son las estructuras subversivas en acción. Malditamente peligrosas las amenazas que estamos presenciando. Porque, considerando también las relaciones externas a Rusia que Dugin siempre ha cultivado, se trata de una operación internacional, evidentemente encaminada a mantener equilibrios geopolíticos que ya dejaron de ser precarios y fueron destruidos por décadas de opresión y por un sistema financiero inhumano.

Ayer por la mañana Aleksander Dugin escribió estas palabras: "Es la gran fiesta de la Transfiguración del Señor. Popularmente llamada festival de la manzana, tiene un gran significado para la estructura misma del tiempo ortodoxo. No es solo el final del verano, es la dimensión espiritual más alta de lo que se puede llamar la cosecha".

La lucha por la supervivencia del género humano, sostenida en ideologías estériles que ya no tienen sentido de existir, se ha elevado a un nivel superior. Moscú no responderá, no en términos militares. Ya sabe que el antiguo Imperio Rothschild está a punto de desaparecer, y que estos son los últimos golpes de la cola de una bestia moribunda y sangrante. Tenemos la tarea más difícil: resistir en la batalla final.

La redacción de LA CASA DEL SOLE TV ofrece a Aleksander Dugin y a su familia su más sentido pésame, unidos en el dolor del fallecimiento y la batalla por la vida.

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*Foto de portada: Antimafia Duemila