Con las cuatro de toneladas de cocaína incautadas el 26 de junio pasado, en el puerto de Barcelona, España, por la Guardia Civil, ya son 63 las toneladas de drogas enviadas desde Paraguay y que fueron requisadas en Europa o camino a ese continente en los últimos cinco años. Sin contar, que en el mismo período de tiempo fueron decomisadas otras 32 toneladas que no llegaron a ser sacadas de Paraguay. Bélgica sigue siendo el destino preferido para los narcotraficantes.
Las incautaciones de cocaína paraguaya se elevaron a partir de un decomiso de 3.264 kilos de cocaína, ocurrido el 20 de noviembre de 2019, en un puerto de la República Oriental del Uruguay.
Según el diario ABC color de Asunción “en ese entonces el estupefaciente fue enviado desde el Puerto Seguro Fluvial de Villeta entre granos de arroz. La carga ilegal iba a quedar probablemente en el puerto de Tenerife, España, aunque supuestamente el destino final declarado del arroz era Benín, un país de África.”
“A escaso un mes después, el 20 de diciembre de 2019, cayeron 474 kilos de cocaína en un depósito de Madrid, España, donde fue escondido tras ser retirado del puerto de Algeciras, correspondiente al mismo país.” La sustancia blanca salió del Puerto Seguro Fluvial de Villeta disuelto entre aceite vegetal.
El 26 de abril de 2020, según el diario capitalino “fueron requisados 495 kilos de cocaína en el puerto de Barcelona, España. La droga salió del puerto Caacupemí de Asunción mimetizada entre carbón en briquetas. “
El 18 de junio de 2020, fueron incautados 1.131 kilos de cocaína escondidos entre harina de soja, que salieron del Puerto Seguro Fluvial de Villeta.
Esa fue la primera vez que había caído droga paraguaya en el puerto de Amberes, Bélgica, que luego sería la más utilizada por los narcos que exportan desde el Paraguay.
El 26 de junio de 2020, se informó el decomiso de 3400 kilos de cocaína que salieron del puerto Terport de Villeta entre carbón vegetal. Esta vez, de nuevo la incautación se realizó en el puerto de Amberes, Bélgica.
El 11 de noviembre de 2020, de nuevo entre carbón vegetal, fueron incautados 2.065 kilos de cocaína, pero ya en el puerto de Algeciras, España. El envió de nuevo partió del Puerto Seguro Fluvial de Villeta.
El 12 de febrero de 2021, en lo que hasta ahora sigue siendo la mayor incautación de cocaína de Alemania de su historia, cayeron 16. 174 kilos en el puerto de Hamburgo.
El gigantesco cargamento salió de Puerto Seguro Fluvial de Villeta y estaba acondicionado en latas de pintura acrílica.
El 2 de abril de 2021, de nuevo Paraguay fue noticia a nivel internacional por la caída de 10.964 kilos de cocaína, de nuevo en el puerto de Amberes, Bélgica. La droga salió del Puerto Seguro Fluvial de Villeta y fue ocultada entre planchas de cuero.
El 29 de octubre de 2021, se incautaron 697 kilos de cocaína que salieron del Puerto Seguro Fluvial de Villeta entre maíz en granos. El operativo se realizó en el puerto de Leixoes, Portugal.
El 31 de octubre de 2021, en el puerto de Rotterdam, Países Bajos(Holanda), cayeron 4178 kilos de cocaína que salieron del Puerto Seguro Fluvial de Villeta. La droga estaba escondida entre soja en granos.
El 12 de junio de 2022, fueron capturados 5.170 kilos de cocaína, de nuevo, en el puerto de Amberes, Bélgica. Las cinco toneladas habían salido del puerto Caacupemí de Asunción entre arroz en granos.
El 16 de noviembre de 2022, apareció un alijo de 648 kilos de cocaína en el puerto de Amberes, Bélgica, entre una carga de carne refrigerada. El punto de partida fue el puerto Caacupemí de Asunción.
A escasos 5 días después, el 21 de noviembre de 2022, fueron interceptados otros 653 kilos de cocaína que también iban entre carne refrigerada y que salieron del Puerto Seguro Fluvial de Villeta. En ese caso, el procedimiento se hizo ya en el puerto de Montevideo, Uruguay, cuando la carga estaba en tránsito.
El 14 de julio de 2023 se informó de la incautación de 10.000 kilos de cocaína en el puerto de Hamburgo, Alemania. Esa enorme carga estaba disimulada entre sésamo en granos y salió de puerto Fénix de Asunción.
Y la última gran carga de cocaína exportada desde Paraguay fue la de 4.020 kilos de incautada ya el 26 de junio pasado en el puerto de Barcelona, España. El contenedor de arroz en grano que estaba contaminado con la droga salió del Puerto Seguro Fluvial de Villeta. Las autoridades españolas informaron de este procedimiento, recién un mes después, que fue el viernes pasado, 26 de julio.
Los cargamentos que no llegaron a salir
Así como en los últimos cinco años fueron incautadas 63 toneladas de cocaína en Europa, en el mismo período de tiempo se reportó el decomiso de 32 toneladas de la mencionada droga que no llegaron a salir de Paraguay, pero que en su gran mayoría también tenía destino europeo.
El último caso es del cargamento de 4.013 kilos de cocaína, que es el nuevo récord en Paraguay.
Este alijo fue incautado el 15 de julio pasado, en el puerto Caacupemi de Asunción, justo antes de que saliera con destino al puerto de Amberes, Bélgica.
La droga iba a salir en formato de polvo, ya no en panes, y estaba cargada en bolsas de plástico de 25 kilos, que ya estaban escondidas en otras bolsas arpilleras de 35 kilos, rellenadas a su vez con 10 kilos de azúcar. Por eso el nombre de Operación Dulzura.
Varias de las cargas de cocaína incautadas en Europa tienen vínculos directos con otros alijos que después fueron requisados en Paraguay.
Este auge del tráfico de cocaína en los puertos europeos en los últimos años no es una casualidad. Según reporte elaborado por Insight Crime y la Iniciativa Global contra el Crimen Organizado Transnacional 2021, la Cocaína hacia Europa ha sido una amenaza subestimada.
Sin embargo “desde una perspectiva comercial el tráfico de cocaína hacia Europa es mucho más atractivo que hacia Estados Unidos. Los precios son mucho más altos y los riesgos de incautación, extradición y decomiso de activos es sustancialmente menor. Un kilo de cocaína en Estados Unidos puede valer hasta US$28.000 al por mayor. Este mismo kilo vale alrededor de US$40.000 en promedio y puede acercarse incluso a los US$80.000 en diferentes lugares de Europa.”
“Estados Unidos ha desplegado masivos recursos en Latinoamérica para combatir el tráfico de narcóticos, con un ejército de agentes de la Administración para el Control de Drogas (Drug Enforcement Administration, DEA), además del trabajo conjunto con otros organismos, como Seguridad Interna y Control Estadounidense de Inmigración y Aduanas (ICE) y el Comando Sur del ejército estadounidense. Europa, por otro lado, solo cuenta con un puñado de agregados policiales o agentes de enlace designados a América Latina y algunos escasos puestos navales en el Caribe. La presencia europea y la capacidad en Latinoamérica son mínimas. “
“La afluencia récord de estupefacientes genera miles de millones de euros para las redes criminales europeas y se ha convertido en un pilar de los grupos mafiosos tradicionales y nuevos. Las mafias criminales latinoamericanas y europeas han aumentado su poder más allá de toda medida “.
“La historia del ascenso de la ‘Ndrangheta en Italia (y el resto del mundo) tiene estrecha relación con el tráfico de cocaína, mientras que la expansión del poder de las mafias de los Balcanes está ligada igualmente a la cocaína. La amenaza de seguridad nacional que estas estructuras criminales suponen es palpable y va en aumento”
Así mismo, este auge del tráfico de cocaína tanto en Latinoamérica como en Europa, ha corrompido a las más altas autoridades de los diversos países, constituyéndose en un cáncer para las democracias y las instituciones de los estados, muy difícil de combatir.
Paraguay, es uno de los países latinoamericanos más corruptos del mundo, el dinero sucio proveniente del narcotráfico ha contaminado los tres poderes del Estado, y los órganos extra poderes, desde el 89, ha causado varios magnicidios de periodistas, jefe anti drogas, fiscal antimafia y de muchos otros que han luchado contra el crimen organizado y las mafias.
Si continúa ésta dinámica del tráfico de drogas, en especial de la cocaína, pronto el país se convertirá en un Estado-mafia similar al estado italiano y colombiano de los 80’.
*Foto de Portada: Diario Última Hora