Lunes 17 Noviembre 2025
Caso Sebastián Marset, Caso Fiscal Pecci y el narcotrático, hacen parte del contexto
“No dejar los casos en el ‘oparei’”
Cobertura especial en Paraguay

“Pablo era amigo, mi compañero. Pablo era un gran periodista, de hecho las publicaciones que lo llevaron a la muerte nosotros la hacíamos juntos, él desde allá y yo le transcribía acá; nosotros componíamos los materiales. Pablo vivió qué es la crónica de una muerte anunciada. !Pablo sabía que le iban a matar! No sabía cuándo le iban a matar pero además la muerte de Pablo vino a marcar, como explicar, su muerte fue un golpe tan duro para todos nosotros, porque era algo que sabíamos que podía ocurrir, pero no nos imaginamos cuaándo. Pablo tenía una personalidad un tanto paranoica, el en todo momento denunciaba que le seguían, y había sido cierto. Lo que él creía después claramente se consumó. El recuerdo que nos queda es que a él le mataron por hacer su trabajo. Las cosas de la vida, después de que él murió, recién todas las cosas que denunciaba se comprobaron”.

Así nos habló el periodista de investigación del diario ABC Color, Iván Leguizamón. Lo encontramos en la redacción del matutino paraguayo de la ciudad de Asunción, porque precisamente este 16 de octubre se cumplen once años del asesinato a balazos del periodista -y que fue también colaborador de nuestra revista- Pablo Medina y de su asistente Antonia Almada, de 19 años de edad, a manos de dos sicarios que los emboscaron dentro de un vehículo, empuñando armas de fuego grueso calibre -una pistola y una escopeta- en horas del mediodía del 16 de octubre de 2014, en un apartado camino rural de tierra colorada, de Villa Igatimí, en el departamento de Canindeyú, en zona de la triple frontera; zona por otra parte, de gran influencia del crimen organizado dedicado al cultivo y el tráfico de marihuana. En ese contexto trabajaba Medina desde hace 16 años para el diario ABC Color; dos hermanos suyos -periodistas como él- Salvador y Salomón ,fueron igualmente víctimas de la narco política imperante en la región, imponiéndose a puro plomo, dentro de un marco de terror narco, que desde la caída del régimen dictatorial de Alfredo Stroesner a la fecha ha dado muerte a más de una veintena de trabajadores de la prensa, en la zona de Curuguaty, y en ciudades como Pedro Juan Caballero y Ciudad del Este.

La muerte de Medina y de Almada fue un hecho que causó gran impacto en la familia periodística paraguaya, y en las redacciónes de Antimafia Dos Mil de Italia y de Sudamérica, dado que Pablo era un redactor colaborador de ambas publicaciones; le sobrevivieron su esposa Olga Vianconi y sus hijos Virgilio y Marianela, en aquel momento menores de edad, quienes vivían en la ciudad de Curuguaty. Los padres de Pablo Medina, que fallecieron a los pocos años del hecho, debieron ser testigos de todo un contexto dramático dentro del grupo familiar dado que los tres hermanos Medina, por ser comunicadores de la zona y que se caracterizaban por denunciar a la narco política regional , fueron objeto sensible de la mafia local la que finalmente acabó con sus vidas. El autor intelectual Vilmar “Neneco” Acosta -quien era además el Alcalde de la localidad de Ypehjú por el Partido Colorado- fue finalmente detenido y condenado a 39 años de prisión, cumpliendo su encierro en la actualidad, en la cárcel de Itacumbú, de Asunción; los sicarios, parientes de Acosta, fueron detenidos en el Brasil. Se estima, aunque no hay certeza absoluta, de que detrás del ideólogo del doble crimen además de “Neneco”, podría haber una o más personas (se estima del poder mafioso en el Paraguay) igualmente involucradas como mandantes del mortal ataque.

A once años de este atentado contra Pablo y Antonia- vaya además nuestro sentido homenaje a su profesión y a la de todos los demás periodistas asesinados en territorio paraguayo, en el marco de una más que voraz presencia e infiltración de la narco mafia en el Paraguay, la que ya ha cobrado numerosas vidas, la última por ejemplo, la del teniente coronel Guillermo Moral, asesinado a balazos por narco sicarios en los últimos días frente a la Facultad de Derecho de Asunción donde además era estudiante; desde las sombras de la narco mafia instalada en el Paraguay, se habría ordenado esa ejecución por haberse negado el militar a ingresar un celular a la prisión en la que está recluído el narco conocido como “Tío Rico”, estrechamente relacionado con el narco uruguayo Sebastián Marset, hoy prófugo.

A once años del crimen de Pablo Medina y de Antonia Almada -cuya hermana Rut salvó su vida milagrosamente -ya que ese 16 de octubre también se encontraba en el asiento posterior de la camioneta de Medina que fue emboscada, dado que los sicarios no la detectaron al momento del ataque- en la entrevista que hicimos al periodista Iván Leguizamón (quien realizó un documental para ABC Color en el formato “Expediente Abierto” reconstruyendo el atentado a Medina-Almada, con importantes testimonios) el colega se explayó no solo sobre este caso sino que además hizo un muy interesante balance sobre la presencia de la narco mafia en la región, sin dejar en el tintero el contexto que incluye el caso del fiscal paraguayo Marcelo Pecci, asesinado en Colombia; el caso Sebastián Marset y todo lo relativo a su historial criminal, aludiendo además al atentado fallido del que fue objeto, el pasado 28 de setiembre pasado en Montevideo, la Fiscal de Corte de Uruguay Monica Ferrero.

“El narcotráfico y la política están cada vez más sólidos en Paraguay”

“Para nosotros aquí en Paraguay lo peligroso en el caso Pablo Medina es que ha representado una especie de “cese”; en realidad, desgraciadamente, es cómo que muy por el contrario, se incrementaron los hechos. El caso Pablo no fue escarmiento para la narco – política porque aunque se consiguieron condenas, el caso Pablo tiene a los autores directos presos, uno incluso ya cumplió una condena, pero eso no afectó, no incidió, es lo que vemos aquí en Paraguay. Muy por el contrario, desde ese momento a esta parte, el Paraguay es el principal trampolín del crimen organizado para Sudamérica, le desplazamos a Uruguay; Uruguay era el último puerto de partida, ahora se usa Paraguay como una escala previa; Uruguay pasó a ser una escala secundaria, la mayor parte de la cocaína que vemos que sale o que llega a Europa sale de Paraguay. Están los otros países como Colombia, Venezuela, Ecuador, pero por su ubicación geográfica es mucho más fácil enviar desde allí. Pero de esta parte del continente, Paraguay le desplazó a Uruguay en ese sentido. Esta evolución de Paraguay se debe en gran parte a la alianza con la política. El narcotráfico y la política están cada vez más sólidos en Paraguay, esa alianza es la que peligrosamente está ganando todo”

-¿Y eso, por ejemplo, ha fortalecido al narco uruguayo prófugo Sebastián Marsset?

“Marset es uno de ellos, no podemos desconocer la envergadura de Marsset y de su grupo. Su grupo fue identificado, luego desmantelado parcialmente, lo que es en Paraguay, la investigación contra el narco tráfico y el crimen organizado más importante en la historia del país. O sea, la magnitud del caso A Ultranza, para Paraguay es sin precedentes, no hay una investigación semejante. No obstante, él era uno de los grupos, en simultáneo, cayeron otros grupos como por ejemplo un dirigente deportivo Diego Benitez, él utilizaba aparentemente nada menos que al equipo de futbol más glorioso del Paraguay, el Olimpia que vendría a ser igual al nacional o Peñarol. La evolución de Diego Benitez, por ejemplo económicamente hablando, coincide en el tiempo que comenzó como dirigente en el Guaraní, que es un club importante uno de los grandes, y después paso al Club Olimpia, el más grande, y es en el mismo período en el que habían sido enviados los cargamentos de cocaína. No es un solo grupo, Marset tal vez es el más importante, pero en Paraguay nos sorprendimos cuando empezamos a detectar que había varios grupos, que trabajaban en simultáneo, y ahora esta serie de chats que fueron revelados y que forma parte de lo que extrajo la Europol, demuestra que todos trabajaban a su vez en cooperativas o sea que se ayudaban entre todos básicamente y eso da la pauta que Paraguay había sido el escenario de organizaciones criminales impensadas en nuestro país”.

-¿Con la injerencia por ejemplo de organizaciones como la ‘Ndrangheta italiana?

“Acá se detectó la única vez presencia real de elementos de la ‘Ndrangheta fue cuando cayeron en el departamento de San Pedro dos integrantes activos y que ellos aparentemente vinieron como a negociar, pero esa parte nunca quedó bien clara porque se les entregó enseguida. Un indicio concreto de la injerencia de la mafia italiana en Paraguay no hay todavía. Sí, hay, alianzas con el PCC en Brasil y consecuente se puede entender que esa alianza de la ’Ndrangheta con el PCC tal vez tiene lazos en Paraguay. No hay un nexo comprobado con la mafia de Paraguay y de Italia”

Caso Pecci: “En ningún nivel hay dato fehaciente de los autores intelectuales”

“En el caso Pecci el que diga hoy fulano le mandó a matar a Pecci, va a estar equivocado. Porque en ningún nivel hay ningún dato fehaciente”

-Siempre es difícil esa parte...

“Creo que es ese el mayor enigma en los últimos tiempos en Sudamérica, porque se le acusaba inicialmente por el caso Ultranza, caso Marsset y vamos a referirnos al caso Marsset por ejemplo. ¡Porque Marset sí y porque Marset no!, Marset sí porque dijo el Presidente de Colombia Gustavo Petro, el primero que lo acusó directamente. En Paraguay, tenemos que desmenuzar , porque el Presidente de Colombia acusó a Marset. El presidente de Colombia tiene a un hijo procesado en Colombia ¿y quien es el Fiscal que le proceso el hijo? El mismo que investigó el caso Pecci. Y que cuando subió este Presidente le dejó de lado el fiscal que logró las condenas, que se llama Mario Andres Burgos Patiño o sea, el Presidente de Colombia responde a intereses políticos y personales en Colombia. Entonces “usa” , invoca el caso Pecci con fines políticos, para atacar al fiscal que le procesó a su hijo. Es tomar como cierto lo que dice el presidente de Colombia es muy...”

-...¿Entre comillas?.

“¡Correcto, eso es porque sí!, y porque no!? Pecci nunca estuvo involucrado en el caso A Ultranza, ese en un mito, se robusteció de manera inexplicable; Pecci no investigó, él no tenía nada que ver. No era suya la causa; Pecci era fiscal del crimen organizado, el caso A Ultranza lo hicieron fiscales del narcotráfico. Ahora recién las dos unidades están fusionadas. Pecci era fiscal delegado del crimen organizado y había un fiscal adjunto de narcotráfico”

-La acusación que sobre la esposa de Marset, que está detenida acá en espera ¿Se la puede involucrar como una mujer que está avanzada en su ingreso, en las actividades del narco tráfico

“En lo que la imputación está, podría ser hasta endeble. Se la acusa de haber abierto una empresa a través de la cual se usó plata y entre los elementos fácticos atribuidos dice que ella inscribió un camión en el que ella declaraba ganar u$S7.000 a 7.500 por mes y la fiscalía le atribuye que esa plata que ella simulaba era producto de la cocaína. La porción fáctica que se le atribuye tampoco es muy sustanciosa ni es muy grave. Va a ser trabajo de la fiscalía demostrar y sostener eso. Pero en cuanto a otros actores del caso, por ejemplo, otros supuestos lavadores hay indicio más sólido”

-¿Dónde podría estar alojado o escondido Marset, se habla que puede estar en Venezuela, en Uruguay, se habla que puede estar en Paraguay, Bolivia, tu impresión?

“¿Nosotros nos vamos a guiar por la palabra santa de los EE.UU ? Dicen Venezuela, dicen Venezuela porque el teléfono de donde se comunica tiene el prefijo venezolano. Es imposible, quien va a salir a decir “estoy acá”. En Paraguay se tiene mucho miedo que el reaparezca porque Marset es un tipo predecible. Cuando le agarraron la mujer nosotros públicamente vaticinamos, que va a hacer ahora con base en su patrón de conducta habitual, hicimos un perfilado, él en estos días tiene que salir a hablar públicamente porque él es de un perfil de exponerse. Tres días después esa carta. Entonces es muy difícil que estando por acá cerca se atreva a hacer ese tipo de pronunciamiento”.

-¿Qué impresión te cayó el episodio de Mónica Ferrero en Montevideo?

“Y.. nos asustó acá, en el sentido que si es Marsset, entonces está activo. La política y la Justicia de Uruguay son cosas que nosotros tal vez no conocemos muy en profundidad, pero nos esperamos lo que dijeron los colegas, el único que la amenazó era Marsset o el principal. Esta activo. Y si se atrevió en su país a hacer esto con la fiscala general, evidentemente en Paraguay estamos todos vulnerables. Esa es la lectura que nosotros podemos hacer. Así como uds en Uruguay, nosotros en Paraguay, si hay un episodio que sucede allá vinculado con Paraguay nos llama la atención. Y si se atrevió a hacerlo allá, quiere decir que lo va a poder hacer acá. Pero ese elemento es donde se debilita; acá en Paraguay desgraciadamente causó un tanto de descrédito la periodista uruguaya que vino a entrevistar a Marset , digo que vino porque no sabemos a dónde fue; esta periodista uruguaya instaló que ella le entrevistó a Marset en Paraguay, que se bajó en el aeropuerto y que la buscaron y se la llevaron a una finca y lo entrevisto. Las autoridades nacionales con muy buen tino dijeron ella bajó, esperó que limpiaran el avión y en el mismo vuelo se fue hacia la frontera. O sea, ella mintió abiertamente tratando de instalar una versión, que no era. A partir de esa mentira es muy difícil creer lo que ella pretendió instalar, que Marset está en Paraguay. Por eso tenemos que chequear”.PABLOMEDINAYSUESPOSA

No dejar los casos en el “oparei”

-¿Cuál es tu análisis final, con todo este contexto que me has descripto con el trabajo de Medina quizás, desde aquella época hasta el hoy? ¿Cómo combatimos el narcotráfico?

“¡Con justicia y no impunidad, con condenas!”

-Pero ¿cómo se llega a esas condenas?

¡Ahí está! En Paraguay tenemos serios déficits en cuanto a la aplicación de la Justicia. El caso Pablo Medina es un hecho aislado, sí el autor moral el narco- político cumple 39 años de condena, él está en la cárcel

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-¿Neneco… y los otros dos sicarios?

“Flavio Acosta Riveros, el que disparó la pistola, está en Brasil, cumple 36 años de condena”

-Allá en Brasil....

“¡Sí! …El tío, Wilson Acosta Márquez, el hermano de “Neneco” está preso desde el 2020 pero hay una batalla judicial, Brasil no le quiere extraditar a Paraguay, no le puede entregar de hecho, entonces Paraguay debía hacer la transferencia de proceso para que se le condene también allá, pero eso quedó estancado. Es más, nosotros no tenemos la certeza de él siga preso en Brasil. Sabemos que cayó hace cinco años en un trabajo de la policía civil muy bueno en el Estado de Mato Groso”

-¿Volviendo al tema de cómo se combate al narcotráfico?

“No dejándolo impune y este país es especialista en dejar los casos en la impunidad; acá decimos “en el oparei” … qué es el “oparei”: ¡que queda en la nada! Y eso estimula la formación y la solidificación de estos grupos criminales con raíz en la narco-política y acá para colmo, en todos los estamentos judiciales vemos que ellos tienen representantes, en Paraguay tenemos el descaro de ponerle “algo” Presidente del jurado de Enjuiciamiento de Magistrados, que es el órgano rector de materia judicial, los jueces de jueces! ¡Y el Presidente de los “Jueces de Jueces” no tiene título de abogado! ¡Es un Senador que ahora está para afrontar juicio porque mintió con respecto a su título! ¡Nunca paso por una facultad de Derecho!”

-¿Un cargo político?

“¡Y él era el Presidente del Jurado de Enjuiciamiento, entonces cuál es el mensaje que nosotros damos allí! Y a partir de ese tipo de maniobras que gozan de impunidad de hace tres años, en Paraguay no vemos viso de solución con relación a eso”

-¿Ves a Uruguay en ese camino?

“Y la realidad interna de Uruguay para nosotros, te soy sincero, me cuesta opinar sobre ella porque no la conocemos en profundidad aquí. Para nosotros Uruguay es un país moderno, para nosotros. Un país de civilización, un país con más educación cívica, nos parece a nosotros muy alta, le envidiamos en muchos de los aspectos, pero también vemos que últimamente el crimen organizado igualmente está empezando a infiltrase en todos los sectores allá. Pero una opinión formada sería irresponsable porque no conozco en profundidad la realidad”

*Foto de Portada: Antimafia Dos Mil

*Foto 2: Gentileza Olga Vianconi