El epicentro del primer sismo, en la estimación preliminar, fue localizado a 21 kilómetros, en tanto el segundo, si bien se produjo en la misma zona, se detectó a 12 kilómetros.
El Centro de Control de Tsunamis para el Pacífico no declaró en principio la alerta, pero puso en evidencia que terremotos de esta intensidad pueden provocar olas anómalas destructivas antes de una hora del hecho. DFB
29/09/2010