Domingo 8 Diciembre 2024
El Consejo de Derechos Humanos de la ONU (Organización de las Naciones Unidas), designó una comisión de tres miembros, encabezada por el juez Richard Goldstone para investigar la ofensiva militar israelí contra el territorio palestino de Gaza, de fines de 2008 a principios de 2009, que dejó más de 1.400 personas muertas y 5.000 heridas.
La comisión concluyó que Israel y el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) cometieron crímenes de guerra.
A las autoridades israelíes les preocupó que el llamado informe Goldstone complicara las posibilidades del estado judío de lanzar otro ataque, dijo a IPS el politólogo Norman Finkelstein.
"Lamentablemente, Ban Ki-moon no implementó las recomendaciones del informe Goldstone, de investigar los crímenes de guerra, sino que prolongó el proceso", apuntó. "Ahora demora la creación de una comisión que investigue los delitos cometidos contra el Mavi Marmara", el buque de la flotilla humanitaria abordado por las fuerzas israelíes en alta mar.
El resultado es previsible, señaló Finkelstein, también autor de varios libros, entre ellos "This Time We Went Too Far: Truth and Consequences of the Gaza Invasion" (Está vez fuimos muy lejos: verdad y consecuencias de la invasión a Gaza).
Además advirtió que Israel se prepara para atacar el Líbano.
"La ofensiva hará que las anteriores parezcan nimias. El estado judío podrá lanzar un ataque monstruoso porque Ban Ki-moon no cumplió con su responsabilidad", pronosticó.
Cuando la muerte y la destrucción se abatan sobre el Líbano habrá que culpar a Ban, sostuvo Finkelstein.
Por su parte, un diplomático que pidió reserva de su identidad señaló que "es obvio que el secretario general está presionado por Estados Unidos y otros países occidentales para que no haya una investigación internacional sin la anuencia de Israel".
"Si los israelíes aceptan, lo que dudo mucho, será una investigación ligera, no una completa como la que aprobó el Consejo de Seguridad", añadió.
Un equipo de investigación israelí absolvió en junio a las fuerzas militares israelíes de delitos en el ataque contra la flotilla humanitaria.
"Es claro que el gobierno de Israel repudia las críticas y los intentos de la ONU de analizar su cuestionable comportamiento", señaló Richard Falk, profesor emérito de derecho internacional de la estadounidense Universidad de Princeton.
Israel no quiso colaborar con Goldstone, lo difamó y luego repudió el informe, pese al escrupuloso esfuerzo de realizar un análisis equilibrado de las denuncias contra las fuerzas israelíes por violaciones de derechos humanos, pero también palestinas, señaló Falk.
"La demora de Ban Ki-moon para designar un equipo de investigación contrasta con la actitud que asumió frente a un caso similar, el de Sri Lanka contra los insurgentes tamiles", recordó Falk, relator especial de la ONU para los territorios palestinos.
"Debería ser obvio que sólo un equipo internacional puede realizar una investigación completa, objetiva y creíble sobre el incidente, en el que Israel recurrió a un cuestionable y desmedido uso de la fuerza contra la flotilla humanitaria en aguas internacionales", añadió.
Ban trabaja mucho para llevar adelante su propuesta, respondió el portavoz de la ONU Martin Nesirky, al ser consultado sobre si el secretario general seguía esperando el "permiso" de Israel para designar una comisión investigadora.
"Como saben, se reunió con el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, y habló con él por teléfono", apuntó. También trató el asunto con el canciller de Turquía, Ahmet Davutoglu, añadió.
"No se trata de dar largas al asunto, sino de estar seguros de que todo el mundo está en la misma sintonía", respondió Nesirky cuando le preguntaron qué país, Turquía o Israel, demoraba el proceso.
La comisión internacional "nunca verá la luz a juzgar por las últimas experiencias", sostuvo, por su parte, Naseer H. Aruri, rector de la Universidad de Massachusetts.
Israel, Estados Unidos y sus aliados occidentales lograron en octubre de 2009 "posponer" de forma indefinida el envío del informe Goldstone al Consejo de Derechos Humanos, con sede en Ginebra.
Israel amenazó a funcionarios palestinos de tomar represalias e infligir un daño aun mayor a la economía de los territorios ocupados, según el periódico israelí Haaretz.
El mismo tipo de acusaciones habrían caído sobre la Autoridad Nacional Palestina si no hubiera accedido a posponer la discusión sobre el informe Goldstone en el Consejo de Derecho Humanos.
Las flagrantes violaciones al derecho internacional cometidas por las fuerzas armadas de Israel contra la población civil recibieron la misma respuesta del anterior presidente de Estados Unidos, George W. Bush (2001-2009) que del actual, Barack Obama.
"Los dos excusan y protegen a Israel de investigaciones internacionales y le permiten seguir actuando con impunidad", señaló Aruri.
(FIN/2010)