El principal obstáculo, la supresión del doble arancel externo, se superó gracias a un acuerdo con Paraguay. La presidenta argentina, Cristina Fernández de Kirchner, se felicitó del esfuerzo: "Apostamos desde el primer día en que esto iba a salir adelante y ahora damos testimonio de que no se trata de retórica sino de hechos", aseguró.
Mercosur, la unión aduanera creada en 1991, supone el mayor productor de alimentos del mundo y cuenta con otros cuatro países asociados (Chile, Colombia, Perú y Ecuador) y dos más en proceso de integración (Venezuela y Bolivia). La organización ha tenido hasta ahora una vida azarosa, con grandes parones y enfrentamientos comerciales. Se espera que el nuevo Código, con más de 200 artículos, le dé un nuevo impulso y facilite también las difíciles negociaciones con la Unión Europea.
El brasileño Lula da Silva, que abandonará en pocas semanas la presidencia de su país, resaltó también la importancia del acuerdo: "Esta es la mejor reunión desde hace mucho tiempo". Para Lula, es importante que Mercosur se abra a nuevos miembros y que se consolide como "la vía para aumentar el flujo comercial y la interacción política entre los gobernantes y el pueblo en general de la región". El uruguayo José Mujica, que facilitó mucho el buen ambiente, entre otras cosas gracias a su empeño por lograr un acuerdo con Argentina respecto a la papelera Botnia, que ensombreció otras cumbres, afirmó: "La integración es el desafío de los Gobiernos progresistas".
El acuerdo comercial no logró, sin embargo, ocultar otros problemas, especialmente el enfrentamiento entre Colombia y Venezuela, que ocupó parte de los contactos, tanto a nivel presidencial como de ministros de Exteriores. La gran sorpresa de la cumbre fue la ausencia de Hugo Chávez. El presidente venezolano se vio "retenido", según su canciller, Nicolás Maduro, "por razones de salud y de Estado". Chávez, que presiona a Paraguay para que levante su veto a la integración de Caracas en Mercosur, es un habitual de estas cumbres y su negativa a acudir en esta ocasión ha sido interpretada como una muestra de desagrado por el escaso apoyo que está recibiendo de sus "amigos argentinos".
Fuentes venezolanas sugirieron que Chávez está molesto por la ausencia de Néstor Kirchner en la reunión de ministros de Asuntos Exteriores de países miembros de Unasur, celebrada el pasado 29 de julio en Quito (Ecuador) para tratar precisamente ese conflicto.
Se supone que Unasur fue creada como el organismo exclusivamente sudamericano en el que solventar problemas políticos entre los países miembros y que su secretario general era la persona indicada para propiciar las negociaciones entre Caracas y Bogotá. Sin embargo, Néstor Kirchner, que fue elegido como el primer secretario general de esa organización hace escasamente dos meses, está manteniendo un perfil sorprendentemente bajo, absorbido quizás por sus múltiples cometidos en la política interna argentina. En cualquier caso, su presencia en la primera crisis a la que debe hacer frente en razón de su cargo internacional está siendo muy discreta.
SOLEDAD GALLEGO-DÍAZ | Buenos Aires 04/08/2010
ANSA