"Los últimos acontecimientos en la península coreana subrayan la necesidad de que la república popular (en referencia a Corea del Norte) refuerce su disuasión atómica por una nueva vía", afirma el portavoz sin dar detalles de los planes norcoreanos. Pyongyang debe adaptarse a las amenazas militares, explica.
En los últimos meses el país ya había amenazado con reforzar su disuasión nuclear. En septiembre dijo que había terminado con éxito la fase de experimentos de enriquecimiento de uranio, material que puede utilizarse para la fabricación de bombas atómicas.
Estados Unidos sospecha desde hace años que el Estado comunista además de su programa de plutonio lleva a cabo uno de enriquecimiento de uranio. Pyongyang ya probó dos bombas atómicas basadas en plutonio.
Con las últimas declaraciones, Pyongyang reacciona también a la reciente desclasificación de documentos secretos del año 1969 según los cuales en entonces gobierno estadounidense estudió planes para utilizar armas atómicas "tácticas" contra Corea del Norte como represalia a provocaciones anteriores.
Ello muestra que Estados Unidos siempre espera una ocasión para hacer uso de armas nucleares contra Corea del Norte, añade el portavoz.
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