La vergüenza del Parlamento recogida por los medios de prensa internacionales, incluida la CNN
Empujones, patadas, puñetazos, empleados heridos y un diputado trasladado al hospital.
El resultado de la trifulca ocurrida ayer en la Cámara de Diputados no deja lugar a interpretaciones.
Como se desprende de los numerosos vídeos que han circulado por Internet, el diputado del M5S, Leonardo Donno, intentó entregar la bandera tricolor (la bandera palestina, ndt) al ministro Roberto Calderoli.
Ningún atisbo de agresión, hay que decirlo, pero el presidente de la Cámara, Lorenzo Fontana, decidió sancionarlo con la expulsión.
En un momento dado, Igor Iezzi, miembro de la Liga Norte, intentó superar la barrera formada por empleados y parlamentarios, para intentar golpear repetidamente en la cabeza al diputado del M5S.
Segundos después, Donno cayó al suelo y los paramédicos se lo llevaron en silla de ruedas. El diputado explicó entonces que había recibido un puñetazo "directo en el esternón", pero que no sabía quién era el agresor. "No sé si Mollicone o los demás que me rodean. En la confusión, no lo entendí. En cualquier caso, es una locura. Un ataque de miembros de un escuadrón", dijo Donno anticipando su intención de denunciar a sus atacantes.
Iezzi aún lo admite todo, pero está seguro de una cosa: "Donno no le pegó -dijo-. Sí, intenté atacarlo varias veces, pero realmente no le lancé el puñetazo". Y no habría sido así. "Ni siquiera hace falta el VAR, que suele ayudar a reconstruir la acción cuando se trata de centímetros, aquí estamos hablando de metros, yo -como se ve- estoy lejos de Donno, hay otros diputados que intervienen, lo dice incluso él". El grillino, de hecho, indicó que entre la multitud también estaban el miembro de la Liga Norte, Stefano Candiani, y también Gerolamo Cangiano y Enzo Amich de la FdI, quienes rechazan las acusaciones: "Se ha equivocado de persona", dijo Cangiano.
Cualesquiera que sean las responsabilidades concretas, no hay duda de que el episodio dice mucho de la hipocresía de las fuerzas mayoritarias y de sus abiertos aplausos cuando ayer recordaron a Silvio Berlusconi y sus enseñanzas sobre el "respeto a la persona y al oponente".
Ayer? Sólo 'desórdenes'
Pero hay que guardar las apariencias: en el informe que resume los acontecimientos de ayer, el episodio fue catalogado solo con la palabra "desórdenes".
"Evidentemente lo ocurrido ayer no se puede resumir en el acta con la palabra desorden: la combinación, sobre todo en lo que respecta a la última fase de la sesión, es un ataque. Es una cuestión de claridad entre nosotros", dijo el diputado del Partido Democrático, Federico Fornaro. "Está claro -añadió- lo que pasó fue un atentado. Luego habrá cuestiones disciplinarias, pero los disturbios no se pueden dejar en la mesa, hubo un atentado a un diputado. Es una cuestión de claridad entre nosotros, no puede ser que lo que pasó no quede certificado en el acta". "No hubo pelea en la Cámara, estamos ante un ataque premeditado de la derecha a las prerrogativas de la oposición, no todos son iguales en esta noche de la democracia", agregó Arturo Scotto.
El vicepresidente de turno, Sergio Costa, recordó que en las actas no figuran las partes en las que se suspende la sesión. "No fueron desórdenes sino un ataque de escuadrón", dijo Marco Pellegrini del M5S. "Hubo un corto paso desde la exhibición de la bandera hasta los ataques y no se puede decir que el diputado Donno haya atacado a Calderoli. Las imágenes dirán quién atacó a un diputado desarmado que había sido bloqueado por los secretarios", añadió. Se refiere al gesto del miembro de la Liga Norte, Domenico Furgiuele, que ayer hizo el gesto de la Décima (o X), dirigido a la oposición. "Corría el año 1993 cuando la Liga mostró una cuerda de horca en la Cámara, pensábamos que era el punto más bajo, pero ayer fue superado. No aceptamos ese informe", afirmó Gianni Cuperlo. "También mostramos nuestra solidaridad con los asistentes parlamentarios y con el asistente parlamentario herido durante estos enfrentamientos".
Por otro lado, los 'hijos de la cachiporra' y los admiradores de la 'X' no se avergüenzan, al contrario, quizás para ellos sea un motivo de orgullo volver a proponer los métodos de aquellos veinte años.
El miembro de la Liga Norte, Andrea Crippa, intervino para defender el gesto de la Décima hecho por su colega, afirmando que "peor es cantar 'Bella Ciao'".
Ascari: "Página vergonzosa en la historia del Parlamento"
"En las actas que resumen los acontecimientos ocurridos en la Cámara, el ataque sufrido por el colega Leonardo Donno fue descripto solo con la palabra 'desórdenes'. Esto es inaceptable". Así lo afirmó la diputada del Movimiento 5 Estrellas, Stefania Ascari.
"Ayer se escribió una página vergonzosa en la historia del Parlamento y hoy los periódicos de todo el mundo hablan de ello. No se trató de 'desórdenes' sino de un verdadero ataque de escuadrón por parte de algunos de la mayoría parlamentaria contra un colega del Movimiento 5 Estrellas: un hecho de gravedad sin precedentes que se produjo después de que otro diputado de la Liga hiciera repetidamente el signo de la Décima. En el lugar que es símbolo de la democracia tenemos el deber de dar el mejor ejemplo y, en cambio, se envió el mensaje de que atacar físicamente a un oponente político es aceptable. Éste es el método utilizado por la mayoría para reprimir la disidencia. Estoy profundamente avergonzado y las primeras disculpas deberían dirigirse a los ciudadanos a quienes se les ha ofrecido un espectáculo indigno. En el proceso verbal se debe informar la verdad sobre lo sucedido y tomar medidas contra quienes ejecutaron estos actos vergonzosos. Quienes recurren a la violencia no tienen cabida en las instituciones democráticas. Mi solidaridad con Leonardo Donno, con los asistentes parlamentarios afectados y con la democracia que se ve manchada cada día".
*Foto de Portada: Antimafia Dos Mil