El abogado Guarnera denuncia: "La Russa habría presionado al CSM contra la candidatura de Ardita, si así fuera sería gravísimo"
Los ciudadanos de Catania se reunieron ayer por la mañana en la plaza Verga para protestar contra las injerencias del ejecutivo en el nombramiento del nuevo jefe de la fiscalía del Etna, una de las más importantes de Italia. El cargo está vacante desde octubre pasado, cuando el exfiscal Carmelo Zuccaro asumió el cargo en la fiscalía general de Catania. Y en el CSM (Consejo Superior de la Magistratura) hay un impasse en el nombramiento de su sucesor. Un punto muerto que estaría dictado por el "habitual juego de las corrientes internas" con "mentalidad divisoria", como denunció el ponente de la práctica, el independiente Andrea Mirenda, que ayer decidió abandonar el trabajo precisamente por este motivo.
En la carrera para dirigir la fiscalía están el fiscal jefe de Potenza, Francesco Curcio, los fiscales generales de Reggio Calabria y Lecce, Gerardo Dominijanni y Antonio Maruccia, los fiscales adjuntos de Palermo, Marzia Sabella y Paolo Guido, y los fiscales adjuntos de Catania, Ignazio Fonzo, Francesco Puleio y Sebastiano Ardita. La candidatura de este último es la que más molesta a las corrientes internas de la magistratura, que lamentablemente no han desaparecido desde que estalló el caso Palamara. Ardita, debido a sus importantes investigaciones sobre la mafia y los funcionarios conocidos como 'cuellos blancos' y debido a su corrección moral, es considerado una amenaza por el consorcio interno del CSM y también, al parecer, por el presidente del Senado, Ignazio La Russa, que presionó al CSM para que no sea elegido fiscal de la República de Catania.
"Si la noticia fuera cierta sería un hecho de una gravedad sin precedentes. Es una práctica éticamente indigna", afirmó el abogado Enzo Guarnera, presente en la manifestación realizada ante el Tribunal de Catania. "Esta es una práctica contraria al art. 104 de la Constitución", afirmó Luana Ilardo, hija del arrepentido de la mafia, Luigi Ilardo, que estaba entre los manifestantes en la sentada. "Organizamos esta protesta porque no podemos tolerar que los políticos puedan obstruir los nombramientos. Estamos aquí porque la magistratura debe seguir siendo un organismo independiente y libre y no debe verse comprometido por cuestiones políticas vinculadas al favoritismo político", añadió.
"Nosotros, los familiares de las víctimas de la mafia, no queremos que grandes magistrados como Ardita, Nino Di Matteo, Giuseppe Lombardo, Nicola Gratteri y otros sean atacados. Estamos cansados de que los únicos que han demostrado que tienen la espalda recta y no temen las represalias sean atacados y que cuando tienen que llegar a posiciones importantes nunca logran alcanzarlas".
Entre los presentes en la sentada en Piazza Verga, y bajo el título "Fuera la política del poder judicial" también se encontraban jóvenes universitarios del grupo Libera que reiteraron la importancia de defender "una democracia sustancial, puesta en riesgo por estos torpes intentos de los políticos de interferir en los nombramientos del CSM".
*Foto de Portada: © ACFB