En el CREZI Plus el evento organizado por el movimiento

Activistas y abogados de la ciudad planteando la cuestión social

Por Karim El Sadi-12 de julio de 2022

Antimafia, feminismo, drogas, inmigración, trata de personas, degradación. Estos son los temas que se tocaron anoche en una sala del CREZI Plus, ubicado en el recinto cultural Zisa de Palermo, en el encuentro cultural organizado por el Movimiento Our Voice titulado "Antimafia Popular, cuestión social". "Lo llamamos revista cultural porque nos gustaría que fuera un inicio, en esta ciudad, para hablar de la política, del territorio", dijo Marta Capaccioni, integrante de Our Voice, quien moderó el encuentro. Se sumaron decenas de personas para escuchando las voces y experiencias de Gilda Sciortino, periodista, Claudia Fauzia, activista feminista de "Malafimmina", Giulia Vicari, abogada de "InfoImmigration" y Luisa Impastato, sobrina de Peppino, de "Casa Memoria Felicia y Peppino Impastato". Una mesa exclusivamente femenina, en la que se habló de Sicilia y Palermo, de sus barrios, los suburbios, donde las fragilidades, las penurias sociales, la miseria y el desempleo van en aumento. Pero también de la lucha contra las mafias como una "lucha interseccional", añadió Capaccioni. Y de la necesidad de volver a partir de la "cuestión del sur", y de Sicilia, víctima de la "marginación" y de la "estigmatización como tierra de la mafia".

La exposición fue inaugurada por Gilda Sciortino, quien recientemente siguió el proyecto "Mujeres en acción" en Borgo Vecchio, gracias al cual las chicas del barrio encontraron el coraje de alzar la voz y decidieron alfombrar las calles y la ciudad con pegatinas que decían "HÁGANNOS ESPACIO" denunciando así la falta de espacios libres y de libre proximidad que se conviertan en espacios de crecimiento y emancipación personal. "En Borgo Vecchio despertamos gracias a organizaciones sin fines de lucro y otras asociaciones", comenzó diciendo Sciortino. "Este proyecto tiene un gran valor, pero adquiere un valor aún mayor si se repite en otros lugares. Porque las iniciativas muchas veces quedan aisladas en el barrio. Se debe crear una red. Todo está desconectado", dijo Gilda Sciortino. Y hay realidades como la de Ballarò, por ejemplo, donde la degradación es muy alta, por el abandono de las instituciones y de los marginados que pagan el precio. Ballarò "es una realidad con diferentes vertientes, la de la mafia nigeriana, la del tráfico de inmigrantes, la de la droga, importada de la mafia nigeriana con el consentimiento tácito de Cosa Nostra", recordó la periodista. Ballarò, subrayó, "está completamente olvidado en el tema de la mujer. En Ballarò hay una realidad de niñas abandonadas a sí mismas (especialmente nigerianas, ndr). Se drogan, se prostituyen, quedan atrapadas en el circuito del crimen organizado. Se quedan allí". "Hay chicas -dijo Gilda Sciortino- que, por cinco euros, eso es una dosis de crack, se van con cualquiera". "¿Qué vida llevarán estas chicas? Es una realidad de la que no se habla".

Our Voice y antimafia popular 2

Del mismo tema habló la abogada Giulia Vicari, que asiste a una nigeriana que recientemente ha sido violada en varias ocasiones y solicita, como muchos compatriotas, un permiso de residencia o la condición de refugiada política. La joven abogada explicó a los asistentes a la sala cuáles son los obstáculos y peligros que corren las mujeres africanas, en este caso nigerianas, para llegar a Europa. "La mujer nigeriana es reclutada desde Nigeria con un rito vudú gracias al cual tiene la garantía de llegar a Europa sana y salva". Un ritual, que en realidad es un chantaje, "por el que tiene que pagar una deuda que suele oscilar entre los 20 y los 40 mil euros". Si no lo hace sufrirá tragedias de todo tipo. En la práctica, es un chantaje. "Vienen a Europa con la ilusión de conseguir trabajos honestos, y luego se ven obligadas a ejercer la prostitución", explica Vicari. Y una vez en Europa "es difícil que las mujeres nigerianas denuncien, porque tienen miedo de la deuda que contrajeron al partir". La deuda, sin embargo, "es imposible de pagar y por lo tanto se convierten en esclavas sexuales".

Our Voice y antimafia popular 3

Y hablando precisamente de barrios y problemas sociales, el barrio de Ballarò es el que tiene mayor densidad de la comunidad nigeriana y "está lleno de casas de conexión, dedicadas al negocio del sexo y donde también se vende droga". Es aquí donde las nigerianas son víctimas del yugo del culto nigeriano y de la clientela blanca con su "miseria sexual", como fue descripta, al final del acto, por una intervención del público. El control de la policía y de las autoridades judiciales, sin embargo, es escaso. Pero más allá de la burocracia y de la justicia a dos velocidades, "el problema es la denuncia, y si no hay arrepentidos, la verdad nunca sale a la luz", dijo con amargura la abogada. Lo que se necesitaría, además de la fuerza represiva contra la mafia nigeriana, es un levantamiento, una sensibilidad general y una acción política que arranque a los oprimidos y las oprimidas de las garras de la mafia. Un poco como lo hizo el ingreso básico de los ciudadanos, como recordó la activista feminista Claudia Fauzia, al tomar el micrófono después para hablar de las escuchas telefónicas de Giuseppe Incontrera, el tesorero del distrito de Porta Nuova, asesinado en Palermo hace dos semanas, quien en 2020 se quejaba de dicho ingreso básico porque le quitaba mano de obra a la mafia.

Our Voice y antimafia popular 4

Claudia es activista feminista antimafia y coordinadora del proyecto "Malafimmina", como la apodan en Palermo. Es un proyecto que "quiere hablar sobre el feminismo siciliano, por lo tanto, hablar sobre el feminismo desde una perspectiva del sur", dijo. "El feminismo para mí es la lucha más poderosa y eficaz que existe porque logra objetivos concretos", comenzó ilustrando su proyecto. El feminismo es una "lucha concreta porque todas las luchas pueden converger dentro del feminismo". "El feminismo se compone de intersecciones. Cuando comencé este proyecto, apliqué mi interseccionalidad según el eje de la cuestión sur, quería hablar sobre la brecha entre el norte y el sur en Italia", explicó, recordando que Sicilia y Calabria "están entre las regiones de Europa que tienen el PIB más bajo".

"Después de un año de trabajo en el área mi reflexión fue: como activista feminista necesito hablar de antimafia. No puedo hablar de derechos si no incluyo en la lucha a la antimafia", reiteró. "El feminismo es un movimiento que empuja a toda la sociedad a la equidad y por eso, para mí, era necesario hablar de la mafia que es una gran fuerza de empobrecimiento, la mafia nos masacra y nos priva de muchos recursos", agregó.

"Nuestra lucha debe ser antisistema y debemos entender que es el sistema el que es mafioso y el feminismo -concluyó- puede imaginar nuevos mundos y nuevas formas de lucha".

Our Voice y antimafia popular 5

Otra mujer, Lisa Impastato, también ponente del encuentro, habló de feminismo y de antimafia, pero intervino a través de un enlace de vídeo.

"La experiencia feminista fue fundamental para mí, a partir de la experiencia de mi abuela Felicia (madre de Peppino Impastato, ndr). Fue ella quien obtuvo verdad y justicia, junto con Giovanni Impastato y algunas asociaciones, por la muerte de su hijo, asesinado el 9 de mayo de 1978 por Cosa Nostra".

"Me gusta reivindicar el papel de la mujer en la lucha contra la mafia ya presente en la época de las bandas sicilianas y las luchas campesinas del siglo XIX. También me gusta recordar las asociaciones feministas de Palermo de los años '80 que fueron fundamentales", dijo. Luisa Impastato recordó también la figura de su abuela.

"Mi abuela no era fundamentalmente feminista porque no tenía una ideología que la sustentara, pero sin embargo a través de su experiencia había demostrado y llevado a cabo reivindicaciones y luchas fundamentales. Y es la persona que más contribuyó a la redención de la figura de Peppino. Mi abuela logró transformar su dolor individual en acción política en lo que ahora se ha convertido en una historia colectiva. Han pasado 44 años desde la muerte de Peppino y me gusta recordar que sigue siendo un referente para mucha gente, no solo en la lucha antimafia, sino en un activismo que abarca muchos temas. Mi abuela, sin saberlo, hizo un puente entre la tradición y la revolución", explicó Luisa Impastato, quien luego habló sobre la cuestión social y la antimafia popular.

"A partir de la experiencia de las pasadas elecciones, una gran responsabilidad de la sociedad civil es que la política abandone cualquier tipo de ambigüedad. Es muy grave lo que pasó en las elecciones administrativas pasadas", dijo. "Lo que estamos viviendo hoy es un reflejo de los problemas de la sociedad en general, en mi opinión combatir la mafia es tratar de construir condiciones sociales favorables. La antimafia social, de práctica cotidiana, la asunción de la responsabilidad individual está muy bien. Pero debe ir de la mano de la voluntad política de lucha contra la mafia, no abandonar la prioridad de la lucha contra la mafia y también la prevención de alguna manera. Se deben seguir actitudes coherentes en los programas antimafia. Hay que fortalecer el problema social -concluyó-. Hay que evitar recurrir a la mafia".

-------------------------

*Foto de portada y restantes: © Pietro Calligaris

*Foto 2: La abogada Giulia Vicari

*Foto 3: Claudia Fauzia, activista feminista

*Foto 4: Periodista Gilda Sciortino