"La mafia existe en Roma: las mafias tradicionales y las indígenas coexisten. A menudo, las mafias se reconocen y establecen pactos"
Lo dijo el Prefecto de Roma, Lamberto Giannini, durante una audiencia en la Comisión Antimafia, enfatizando que la coexistencia entre grupos criminales suele estar regulada por acuerdos para evitar conflictos abiertos. "Lo importante para hacer negocios en el mundo criminal es no entrar en guerra", añadió, destacando una estrategia de no beligerancia que permite a los clanes repartirse el territorio y las ganancias.
Pero ¿por qué todos los clanes vienen a la capital?
"Roma es el centro del poder político; se crean las leyes, pero también los contratos y los negocios. Por lo tanto, existe un constante intento de contaminación. Además, tiene una ubicación estratégica, un importante aeropuerto con conexiones con Sudamérica para el narcotráfico; el puerto de Civitavecchia recibe contenedores; pero, sobre todo, Roma es enorme. La provincia abarca los territorios de las otras nueve ciudades más grandes de Italia. Hay una enorme base de clientes, una enorme demanda potencial que satisfacer, y para ello, es importante llevarse bien con todos".
Se prestó especial atención al narcotráfico, que representa una importante fuente de ingresos para los delincuentes romanos. "Un lugar de venta de drogas genera hasta 30.000 euros al día, pero esta cifra asciende a 70.000 euros los fines de semana", reveló el prefecto. Hasta 300 personas pueden trabajar en un centro cerrado de tráfico de drogas en Roma. El volumen de negocios es enorme. Un kilo de cocaína puede valer 40.000 euros, un gramo oscila entre 80 y 100 euros, dependiendo de su pureza. La cocaína más pura se vende por la mañana y la menos pura, más tarde.
Giannini describió una organización estructurada y jerárquica: "Hay distribuidores minoristas, catadores, custodios, cobradores de efectivo y camellos. Luego está el jefe". Añadió que "las investigaciones han descubierto evidencia de una relación laboral entre los jefes del centro y los traficantes comunes, con contratos laborales, despidos y sanciones", destacando un sistema que imita la dinámica de un negocio, pero con "turnos y sanciones, o incluso severas represalias físicas". Esta situación tiene consecuencias dramáticas: "La dramática situación está determinada por el atractivo que este blanqueo de capitales tiene para personas en circunstancias difíciles, y además está la difícil situación de los residentes, que están prácticamente secuestrados".
De la Camorra a la 'Ndrangheta
El prefecto trazó un mapa de las organizaciones criminales activas en la capital. "Cosa Nostra parece estar debilitada, mientras que la 'Ndrangheta tiene una fuerte presencia, especialmente en la costa, con muchos locales. En Anzio y Nettuno, y en algunas investigaciones, han surgido vínculos con las autoridades locales", declaró Giannini. A continuación, especificó: "Cosa Nostra parece algo debilitada en comparación con las demás, pero debe tenerse en cuenta su capacidad de camuflaje e infiltración. La 'Ndrangheta, en cambio, es fuerte, presente en Roma con sus propios grupos locales, verdaderas filiales, especialmente en la costa, en las zonas de Anzio y Nettuno".
Entre los grupos nativos, Giannini citó a "la Casamonica en el sur de Roma, que, a su vez, está vinculada a la Spada", así como a los Fasciani y otras organizaciones que "prefieren tener conexiones entre sí y contar con figuras de autoridad capaces de resolver disputas mediante acuerdos de no agresión y ayuda mutua". Sin embargo, "a pesar de todas estas organizaciones, la Camorra domina, vinculada a la llamada alianza Secondigliano, es decir, a Mallardo, Contini y Licciardi".
Se atribuye un papel destacado al jefe de la Camorra, Michele Senese: "En cuanto a la presencia de una cúpula mafiosa en Roma, podemos hablar de una figura de preeminencia y autoridad, el jefe de la Camorra, Michele Senese; los demás se consideran sus vástagos. No hablaría de órdenes, sino de la capacidad de resolver conflictos. Cada uno tiene su propia libertad para gestionar los asuntos, y cuando surgen conflictos, hay quienes intervienen para resolverlos. Esto ha evitado guerras horrendas por el control territorial".
Mafias extranjeras, chinas y nigerianas
Giannini también abordó el problema de las mafias extranjeras que operan en Roma. "En Roma, los delincuentes chinos operan principalmente en transferencias de efectivo, mientras que los nigerianos se han forjado un negocio ilícito con la trata de personas", explicó. Los delincuentes chinos se basan en un sistema extremadamente cerrado, casi familiar, caracterizado por una conspiración generalizada de silencio. Otros grupos también utilizan a delincuentes chinos, especialmente para transferir dinero de un país a otro; el efectivo suele estar fácilmente disponible. El intermediario chino se lleva un porcentaje del dinero transferido y ordena el pago de la suma a otro intermediario en el país anfitrión. De esta manera, no hay intercambio de dinero entre personas. En cuanto a la mafia nigeriana, "tiene una presencia significativa; varias operaciones la han tenido en la mira en toda Italia. Opera principalmente en la trata de personas, y también en la trata de mujeres, que implica rituales vudú y chantaje familiar, y termina en servicios de prostitución".
*Foto de Portada: © Imagoeconomica