Los daños colaterales del rechazo a la nueva constitución
Chile se vio envuelto en las últimas jornadas, en una marea de cambiantes convulsiones sociales como consecuencia de los cambios constitucionales que se llevan y pueden llevarse adelante en los próximos meses. No es para menos, la Constitución Pinochetista aún respira gracias al “imprevisto” resultado del referendo.
Uno de los resonantes cambios políticos que surgieron, tras el masivo rechazo a la nueva Constitución, se conoció por parte del presidente Gabriel Boric cuando anunció este martes, una reforma en su gabinete, dando espacio a la centroizquierda tradicional en su gobierno.
"Este es uno de los momentos más difíciles que me ha tocado enfrentar políticamente. Y lo sacaremos adelante por los chilenos y chilenas y por Chile", dijo el primer mandatario chileno, que vio menguada su popularidad en estos días, tras la crisis económica que está enfrentando el país trasandino y las continuas represiones de los carabineros a estudiantes y líderes sociales.
Mientras Boric anunciaba el cambio de gabinete, miles de estudiantes, en su mayoría procedentes de institutos de secundaria, se manifestaban este martes en la gran alameda de Santiago, en los alrededores del Palacio de La Moneda. Pasadas las 18 horas andinas, aún continuaban llegando estudiantes de distintos establecimientos educacionales de la Plaza Dignidad.
La marcha, que comenzó de forma pacífica, rápidamente desembocó pasado el mediodía en enfrentamientos con las fuerzas de Seguridad y efectivos antidisturbios, que utilizaron gases lacrimógenos y camiones con mangueras de agua a presión para dispersar la manifestación. Parece que la tan anunciada refundación de Carabineros todavía está al pendiente, o nunca se hará, por lo visto las fuerzas del orden en el país trasandino siguen y reflotan las viejas tácticas represivas. La congregación de jóvenes promete ser insistente en los próximos días, ya que los ánimos y los resultados en los reclamos populares todavía no han sido escuchados.
“Ante violentas detenciones registradas en manifestación estudiantil en Santiago Centro, informamos que estamos en coordinación con @inddhh y levantando antecedentes para evaluar acciones institucionales”. Posteaba en su cuenta de Twitter la defensoría de la niñez. Apelando al manual del represor, constantemente y sin pausa, las futuras generaciones, son blanco de las represiones.
Lo que hace tres años parecía una pequeña protesta de escolares en el metro de Santiago desembocó rápidamente en un reclamo nacional sobre el modelo de país. Chile lleva desde octubre de 2019 una escalada de profundos cambios que no cesan: en tiempo récord vivió una revuelta encarnizada, un plebiscito sobre la actual Constitución, la redacción de su nueva Carta Magna y las elecciones presidenciales más polarizadas en los últimos 30 años.
Pero, a pesar de todo, las preguntas seguirán quedando en el tintero: ¿cómo se logrará un nuevo acuerdo? ¿Ese nuevo acuerdo será funcional al pueblo o nuevamente al poder? ¿Cuándo podrá Chile finalmente sacarse de sus espaldas a la derecha de antaño?
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*Foto de portada: herramienta.com.ar