El pasado sábado la agrupación ‘Multisectorial Humedales’ organizó el corte total del puente Rosario-Victoria, junto con el acompañamiento y aportes de otras organizaciones sociales. El encuentro se celebró para reclamar por milésima vez que cesen de una vez por todas las quemas de los humedales. Estos ecosistemas conciernen no solo a la provincia de Santa Fe y Entre Ríos por su jurisdicción, sino que deberían ser materia de debate para todos los argentinos, más aún en la emergencia climática global en la que nos encontramos. En este encuentro de militancia por el medio ambiente participó entre otras organizaciones, el Movimiento Cultural Internacional Our Voice.
La quema de las islas de los humedales, es un hecho nefasto y trágico para el ser humano y la vida. Lamentablemente parece ser una materia pendiente más que compartimos los argentinos con el resto de los ciudadanos del mundo.
Los jóvenes del movimiento Our Voice participaron del corte con carteles que hacían alusión a los actores sociales que se benefician con las quemas y que son también responsables, como lo es la narcopolítica y los sectores productivos que se benefician directamente con las miles de quemas de hectáreas, como lo son el sector agroganadero y el desarrollo inmobiliario.
A raíz de esto, charlamos con Emilia Cardoso de Our Voice, quien nos comentó su perspectiva sobre la problemática: “Nos encontramos en un contexto de sequía, bajante histórica del río Paraná, y crisis climática planetaria. Las quemas ilegales e intencionales en las Islas, lo único que hacen es empeorar este panorama, no solo con un aire turbio para una ciudad tan grande como la de Rosario, sino con la destrucción de los medios naturales que permiten, entre otras esenciales cuestiones, la purificación de nuestras aguas. La presión ciudadana y social debe estallar para torcer el brazo de los intereses de un puñado de negociados, que pasan por encima de miles de personas, y de todo un ecosistema. Bajar los brazos no es una opción. Si el Estado no responde, tendremos que ser entonces un pueblo unido el que se levante, no solo en las calles, sino en todo punto estratégico y decisorio, por nuestra salud y por la de nuestros ecosistemas”.
Trágico y más aún, penoso, rozando con la comedia más bizarra, es la indiferencia y complicidad de los aparatos del Estado (en sus tres poderes: Judicial, Legislativo y Ejecutivo) que podrían revertir el panorama, pero nunca lo hacen.
Ante la falta de respuesta por parte de nuestros representantes electos por decisión popular, surgen los movimientos ambientalistas/sociales para intentar dar respuesta a estas necesidades. Haciendo uso del derecho a la protesta y a un ambiente sano y digno. Todo esto contemplado en la Constitución nacional, nuestra Carta Magna en el cual decidimos formarnos como pueblo-nación.
Rodolfo Martínez de la ‘Multisectorial Humedales’, charló con nosotros sobre esta problemática.
-¿Cómo se está viviendo hoy, cómo se organizó la movilización?
“Afortunadamente con un día de sol, que eso también hace que el encontrarse sea más placentero porque el motivo ya sabemos que es muy doloroso por el que estamos acá, que tiene ver con estas quemas intencionales en las islas. Han vuelto a recrudecer, nunca se detuvieron.La anterior semana las tuvimos (a las quemas, ndr) desde San Pedro hasta pasando San Lorenzo a lo largo del Delta”.
-¿Han tenido respuesta de parte del oficialismo de la provincia local?
“Hace dos años que no hay respuesta de parte del Poder Judicial entrerriano, no hay un condenado. Sabiendo que los focos los podemos detectar, vos, yo, cualquier persona con el celular, con geamap.com o con cualquier satélite. Es raro que, a esta altura, teniendo el mapa de catastro, es decir, a quien corresponde las hectáreas quemadas, no se cruce esa información y de esa manera se pueda dictaminar dónde están comenzando las prácticas (incendios, ndr), quiénes son los responsables, y de esa forma condenar. A esta altura no hay nada de todo eso y el Poder Ejecutivo del municipio de Victoria y de la provincia de Entre Ríos no son más que cómplices de esta situación”.
-¿Cómo está viviendo la gente que está afectada, los isleños, los que viven monte adentro de Santa Fe?
“Hay voces que no se escuchan, que no puede ser oídas. En 2020 tuvimos que ir a socorrer varias viviendas en Paso Destilería (isla de Entre Ríos) donde llegamos a tiempo, al rancho de un señor muy viejito, pasado los 80 años. Ese fuego se podría haber transformado, además de un ecocidio, en un delito de lesa humanidad, porque estaría el Estado por acción u omisión, dejando que las llamas maten a una persona que no puede defenderse”.
“Afortunadamente desde este lado, podemos también utilizar los diferentes medios de comunicación para tratar de presionar de alguna manera”.
-¿Ven alguna huella de otros actores como es el crimen organizado, o el desarrollo inmobiliario sin restricciones?
“Las islas, el delta en general. Es un territorio de anomias, sobre todo, con lo cual lo que sucede allá es muy distinto a lo que sucede acá”.
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Foto de portada y restantes: Antimafia Dos Mil / Our Voice