Sábado 18 Mayo 2024
“Se abrirán las grandes alamedas…”
 
Por Claudio Rojas, desde Chile-19 de diciembre de 2021

A pesar de todos los inconvenientes, obstáculos y dificultades para votar que le pusieron al pueblo, el joven diputado de izquierda Gabriel Boric, abanderado del Frente Amplio y el Partido Comunista, está ganando este domingo la segunda vuelta presidencial en Chile contra el abogado ultraderechista José Antonio Kast con casi 11 puntos de ventaja con el 92% de las mesas escrutadas. La victoria sería menos ajustada que lo pronosticado por los sondeos y, según los datos provisionales, el exlíder estudiantil obtenía el 55,73% de los votos, frente al 44,27% de Kast.

Boric, un egresado de derecho de 35 años, pasó de ser dirigente universitario a diputado y representa a “Apruebo Dignidad” un bloque entre el izquierdista Frente Amplio y el Partido Comunista. Kast, de 55 años, un admirador de la dictadura militar de 1973 a 1990, fue cuatro veces diputado y compite por el Frente Social Cristiano, una alianza de dos colectividades conservadoras.

Con 35 años, la edad mínima para postular a la presidencia de Chile, Boric dejó atrás los temores expresados en setiembre de 2020 y en mayo pasado se lanzó a recoger firmas para inscribir su candidatura presidencial y competir en las primarias de la coalición “Apruebo dignidad”, que reúne al Frente Amplio y al Partido Comunista.

Las elecciones, las más trascendentales desde el retorno a la democracia en 1990, estuvieron marcadas por infinitas denuncias de ciudadanos que esperaron durante horas la llegada de buses públicos para poder llegar a los centros de votación.

El diputado izquierdista chileno Gabriel Boric descartaba de plano hace un poco más de un año una candidatura presidencial. Reconocía carecer de “la experiencia necesaria”. Pero este domingo ganó el balotaje presidencial respaldado por toda la izquierda chilena. Sorpresivamente, antes se había impuesto al candidato comunista Daniel Jadue, favorito en las encuestas.

“Queremos avanzar hacia un Estado de bienestar. El título que le pongan no me preocupa. Si es socialdemócrata, en buena hora”, afirmó Boric el martes en su último debate frente a su rival de extrema derecha.

“Los derechos que ustedes alcanzaron (mujeres) los vamos a defender juntos”, dijo Boric. Tras la primera vuelta el candidato dejó de dirigirse a sus seguidores como “compañeros y compañeras” y lo reemplazó por “chilenos y chilenas”.

El día de hoy estuvo marcado por altas temperaturas y problemas en el transporte público para llegar a los locales de sufragio, lo que generó polémica entre ciudadanos por las largas esperas y complicaciones para llegar a las urnas.

La situación fue especialmente crítica al medio día y en las zonas periféricas de la capital, los alcaldes debieron sacar a las calles vehículos municipales para transportar a los vecinos.

Ambos candidatos criticaron la situación, aunque desde el comando de Boric fueron más allá y acusaron al Gobierno de Sebastián Piñera de “boicotear” los comicios. “Ante la operación del Gobierno de limitar el transporte público en favor de su candidato, llamamos a organizar taxis, colectivos y autos compartidos para trasladar a votantes”, indicó la jefa de campaña de Boric, Izkia Siches.

Sobre qué impulsa a los votantes en esta polarizada elección, el analista político Marcelo Mella señaló a AP que “el principal impulso que moviliza a la gente... no es tanto las virtudes del candidato, sino el temor a que salga el otro”.

Las elecciones tienen lugar a dos años de una revuelta que se tradujo en una explosión de demandas sociales y en rechazo a las desigualdades, en un país donde reciben mejor salud y educación los chilenos que tienen dinero para pagarlas. Las demandas persisten y periódicamente afloran con fuerza.

A pesar de todos los esfuerzos de la derecha, el gobierno y los empresarios, para que no haya movilización colectiva, el pueblo pudo más, las campañas particulares de acarreo de gente a los lugares de votación pudieron más, a pesar de la ruin campaña del Servel para hacer cambios de última hora de los lugares de votación en los barrios periféricos y populares, para que así la gente desistiera de votar.

El pueblo pudo más… ”se seguirán abriendo las grandes alamedas”.

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*Foto de portada: 180.com.uy