Este domingo 21 de noviembre de 2021, Chile ha tenido elecciones presidenciales y de la mitad del parlamento, siendo lo más destacado, sin lugar a dudas, la irrupción de José Antonio Kast en cifras como primera mayoría, y con altas posibilidades de llegar a la primera magistratura del país, siendo el segundo en cifras, Gabriel Boric.
A diferencia de elecciones pasadas, la votación de los chilenos en el exterior (Alemania, Italia, Suecia, Finlandia y otros países europeos, junto a Australia y Canadá) no ha marcado una tendencia que se aproxime a la realidad, como generalmente ha sido. Una diferencia que inicialmente era de seis puntos, se ha ido reduciendo hasta llegar a ser de 2,56, a las 22:23 horas. José Antonio Kast 28,06% y Gabriel Boric 25,50% (Esto con el conteo del 88% de los votos).
Las elecciones del 25 de octubre de 2020, para dirimir si el pueblo quería una nueva Constitución, bordeó casi un 80 % la opción “apruebo”, luego, el 15 y 16 de mayo de este año, la oposición al gobierno actual obtuvo casi un 80 %; ambas elecciones, con una participación de alrededor del 50 a 52 % del universo electoral. Entonces, era esperable el triunfo del ala progresista de la política chilena, representada por Gabriel Boric. Pero, había dudas, porque Boric no es del gusto de quienes encabezaron la revuelta, que son los jóvenes, por no ser rupturista, y por carecer de carácter, temiéndose caiga en componendas con el poder económico y el poder político para gobernar sin contrapesos. Se temía un bajo nivel de participación, y así fue, sólo un 45 % del universo electoral participó, pues la gente dice y piensa” son todos lo mismo”, decepcionados una vez más del sistema político.
Pero, fue tan brutal la campaña de Kast y toda la derecha para defender el modelo, que alcanzó en esta elección, teniendo Kast, Sichel y la instrumentalización del candidato Parisi, que entre los tres alcanzan, casi el 50 % de los votos, lo que aumenta la posibilidad de que Kast pueda ganar en segunda vuelta.
Sin lugar a dudas que, con un candidato débil y tibio como Boric, hemos hecho las cosas mal. La campaña fascista de Kast apuntó incluso a sectores populares ofreciendo orden y trabajo, ofreciendo eliminar la competencia para los chilenos, que representa la migración de los últimos años. Lo que no sabe la gente que votó por Kast, que el lugar de la mujer retrocederá más de 50 años y que su principal objetivo será destruir la Convención Constitucional, pues es la fuente de cambio del modelo que quieren perpetuar.
Se pintó al candidato Boric, quien pedía indulto a los presos, como un promotor del vandalismo y la delincuencia; confrontándolo con el orden, la paz y la seguridad, que esperan muchos simplistas sin conciencia, sin ideas y con una ingenuidad que reza en la estupidez e ignorancia absoluta, sobre lo que están haciendo al votar por un candidato fascista.
¡Dónde quedaron los 80% obtenidos en torno a la Convención? ¿Dónde quedaron los millones que se movilizaron el 25 de octubre de 2019? Son preguntas sin respuesta.
Es muy decepcionante, que la revolución que comenzó el 18 de octubre de 2019, un proceso interesante que fue observado a nivel mundial, que costó tantas vidas, tantos ojos, tantas torturas y violaciones, tantos presos (y que a su vez despertó alegrías y esperanzas) esté yéndose al tacho de la basura. ¡Cuánta razón tenía el Dr. Juan Alberto Rambaldo, uno de nuestros colaboradores, cuando decía que un movimiento sin liderazgo está condenado a fracasar!
Repasemos algunas cosas importantes de esta primera vuelta
1. La extrema derecha ha levantado cabeza electoral sin complejos. La UDI y la RN van a sentir el golpe, al tiempo que se tendrán que alinear con Kast. Su propuesta clara, si bien muchas veces estúpida, era fácilmente entendida. Es perfectamente posible que gane la presidencia.
2. Boric pasó a segunda vuelta, pero ligeramente detrás de Kast. Su permanente ambigüedad le pasó la cuenta.
3. La gran derrotada es la ex Concertación, DC, PS y PPD. Muy mal resultado de Provoste. La Concertación perdió el papel central que tuvo en la transición; esos partidos acelerarán ahora sus procesos de disgregación.
Una de las grandes sorpresas ha sido el nivel de votación del candidato Franco Parisi, un candidato que no está en el país, pues no puede volver aún por causa judicial de pensión alimenticia, y cuyo discurso ha sido ir contra todos los políticos.
Necesitamos convocar fuerzas, amplitud y movilización y construir una gran red de difusión internacional. La batalla contra la ofensiva ultraderechista y defender el proceso constituyente será parte central de la batalla por la segunda vuelta presidencial del 19 de diciembre.
Aquí como decía Gramsci: “lo viejo no termina de morir y lo nuevo no termina de nacer y es en ese momento en que aparecen los monstruos”, como la contraofensiva que viene generando la derecha y los poderes fácticos contra el estallido social y el proceso constituyente en Chile y que ahora tiene expresión en el candidato José Antonio Kast, mezcla de Pinochet, Bolsonaro, Trump y Le Pen...
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*Foto de Portada: Twiter