Jueves 28 Marzo 2024
Por Sebastián Cabrera, desde Paraguay-6 de abril de 2021

El día 3 de febrero del año 1989, se daba lugar al derrocamiento de la dictadura del General Stroessner y el Paraguay daba su gran paso hacia la restauración de la democracia. Sin embargo, este proceso quedo a medias. Esto queda más que evidenciado mediante los hechos ocurridos en el país durante los últimos años.

Repasando dichos sucesos nos encontramos que ya han transcurrido cuatro años del asesinato de Rodrigo Quintana a manos de la policía, dentro de la sede de la mayor fuerza política de oposición, el Partido Liberal Radical Auténtico (PLRA). Todo esto en la noche madrugada del 31 de marzo de 2017 cuando se suscitó una manifestación en contra del intento de violación a la Constitución Nacional a manos de Horacio Cartes junto al Partido Colorado (partido que en su momento respaldo y fue estructura de la dictadura). Dicha movilización culminó con la quema del Congreso Nacional de la República lo cual posteriormente derivó en el asesinato de Rodrigo como se menciona anteriormente. A todo esto, lo ocurrido después es evidencia clara y fehaciente de que las prácticas dictatoriales siguen latentes hasta hoy en día.

Por ejemplo, la policía rememorando estrategias de la época de Stroessner, intentó instalar varias versiones falsas, tales como que Rodrigo fue asesinado por gente de su entorno y estando este en la calle, a lo que posteriormente fue arrastrado a la sede de su partido hecho que fue desmentido por los videos del circuito cerrado en donde se ve como la policía ingresa y dispara a quemarropa asesinando al joven. Otra versión fue que la policía llegó hasta el lugar persiguiendo hechos vandálicos realizados por los manifestantes, teniendo que forzar las puertas. Finalmente, una tercera mentira vino a manos del entonces viceministro de asuntos políticos del Ministerio del Interior, Ariel Martínez quien es hijo del juez stronista Diógenes Martínez que luego se desempeñó como abogado de Horacio Cartes, en la cual decía que el suboficial Gustavo Florentín había escapado de la Comandancia de la Policía (lugar donde debía guardar reclusión por orden del juez Nelson Romero a causa de un caso de violencia intrafamiliar) habiendo este ingresado al predio del Partido Liberal de manera solitaria y sin orden alguna, pero más tarde saldría evidencia en la cual se ve al suboficial estando operativo en horas de la tarde durante la manifestación y así también que su ingreso al PLRA se produjo acompañado de un pelotón de la policía, desmintiendo así totalmente la versión fantasiosa dada por el viceministro.

Paraguay una democracia ficticia 2

Habiendo hecho esta vital recapitulación, nos situamos en el presente año 2021 teniendo como presidente a Mario Abdo Benítez (Marito), hijo de Mario Abdo quien fuese secretario privado de Alfredo Stroessner durante su dictadura. Y es bajo el gobierno de Marito donde vemos más claramente que Paraguay está sometida a una falsa democracia, una en donde los políticos de turno hacen y deshacen a voluntad y son amparados por las fuerzas del orden público, como lo es una policía a la cual no le tiembla la mano para arremeter contra su pueblo, dándose así los casos de represión e inclusive tortura en contra de los manifestantes quienes exigieron un juicio político para el presidente y su segundo al mando; una fiscalía corrupta que al primer silbatazo actúa en favor de sus mandamases y una jueza servil como lo es Hilda Benítez (quien también está en el caso Rodrigo Quintana), emitiendo órdenes de captura y prisión contra de jóvenes dirigentes estudiantiles y de todo aquel que amenace los intereses políticos de quienes hoy manejan el gobierno tras bambalinas (Horacio Cartes).

Como en épocas de dictadura hoy en día tenemos presos políticos siendo este el caso de Pedro Areco, Luis Trinidad y Vivian Genes quienes por defender a su patria hoy día son condenados, víctimas de un sistema cuyas raíces más firmes que nunca… yacen en la más pura dictadura totalitarista.

Estamos ante una cruda realidad, en la cual, sin pruebas y sin respetar los procesos legales, se termina castigando al que no acepta ser sometido y se premia a quienes ayudan a mantener este perverso sistema, con el cual el Paraguay, junto a su pueblo viven encadenados más no silenciados, resonando más fuerte que nunca un grito contundente: ¡Dictadura nunca más!

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*Foto de portada: www.abccolor.com / Muerte de Rodrigo Quintana, en la noche madrugada del 31 de marzo de 2017

*Foto 2: www.radionanduty.com