Afortunadamente yo no estuve, a pesar de estar invitado, entre los electores del Partido Democrático que ensalzaron anticipadamente al nuevo, muy democrático y finalmente, Presidente negro de América.
Entonces, ahora puedo escribir tranquilamente que Obama no sólo no es muy democrático, sino que es el digno sucesor de su predecesor. De hecho firmó una

¿Qué implica en términos prácticos esa ley? Que 173 prisioneros que todavía están atrapados dentro de esos reticulados, así quedarán. Incluso aquellos que se ha comprobado que son inocentes o que no tienen ningún cargo de imputación pendiente sobre ellos.


Resultado final, que es oportuno cuantificar: 89 prisioneros, que ya tendrían que haber sido liberados, se quedan en la cárcel, sin proceso y sin acusaciones en su contra. 58 de ellos permanecen en prisión por una sola razón: porque son yemeníes. Una imputación bastante particular que difícilmente se encontrará dentro de los códigos penales de cualquier país no orweliano. Y, ya que el Gobierno americano ha puesto al Yemen entre los países canallas con los cuales pretende lidiar sólo a golpes de cañón, no los liberará.
Otros 31, entre los desgraciados a los cuales no les ha sido posible imputar ni siquiera una pequeña acusación, no son considerados escarcelables, porque en caso de repatriación corren el riesgo de ser torturados en su país de origen.


Su sucesor, para compensarles por haber sido torturados por los carceleros americanos, les mantiene recluidos en una cárcel americana. Cuando termine el mandato llamaremos a Obama “Carcelero en Jefe”.
Ahora yo, que todavía tengo buena memoria, recuerdo la historia de los “prisioneros políticos” en la era soviética. Cuando Gorbachov llegó al poder, en 1985, todo el maistream occidental le refregaba todos los días por las narices la lista de los prisioneros políticos que debía liberar. Entre ellos Andrei Sakharov. Gorbachov los liberó a todos, uno

Porque los grandes periódicos occidentales, incluso los que no se nutren del Bunga Bunga, no encuentran espacio para hablar. ¿Qué son estos 173? ¿Queremos llamarlos prisioneros políticos? Yo no lo se. Se solamente que el único prisionero político que existe todavía en el mundo está en Rusia, y es un millonario llamado Mikhail Khodorkovsky.