Domingo 8 Diciembre 2024

A 61 años del homicidio de JFK, los valores de los Kennedy continúan con su nieto Robert Kennedy Jr.

Era el 22 de noviembre de 1963 cuando el presidente pionero de los Estados Unidos de América, John Fitzgerald Kennedy, fue asesinado en Dallas, Texas. Un homicidio, o más bien un magnicidio, cometido ante la mirada estupefacta de la multitud, de todo el país y de Occidente. Fue una ejecución orquestada por una oscura entidad estadounidense -con la participación directa de la CIA- y llevada a cabo por Cosa Nostra estadounidense. La eliminación del 35º presidente norteamericano estuvo determinada por una convergencia de intereses. A pesar de la brevedad de su presidencia, el demócrata Kennedy se destacó por decisiones significativas, a menudo en contra del establishment de la época, como durante la Guerra Fría con la URSS, la crisis de los misiles cubanos y la guerra de Vietnam. Un político de otra época que hoy no encuentra similar en ningún exponente -hombre o mujer- de la actual clase dirigente estadounidense. Ciertamente, ninguno entre Joe Biden, Kamala Harris y Donald Trump.

Sin embargo, los Kennedy no terminaron su "aventura". Las ideas de JFK, sobre todo, no murieron con él. De hecho, desde hace meses, un miembro de su familia, Robert Kennedy Jr., hijo del ex ministro de justicia Bob Kennedy (también víctima de un atentado) y hermano de John, continúa con su legado moral. El presidente electo Donald Trump nominó a Robert para ser secretario del Departamento de Salud y Servicios Humanos. Bob Kennedy Jr., exmiembro del Partido Demócrata que se presentó como independiente a las elecciones presidenciales de este año, abandonó su candidatura tras llegar a un acuerdo con Trump para darle su apoyo a cambio de un papel en la administración sanitaria del país. Y así fue.

Sin embargo, además de este papel, entre los objetivos políticos de Robert Kennedy Jr. están la búsqueda de la verdad sobre el asesinato de su tío John, la oposición al complejo militar-industrial estadounidense, el pacifismo, la mejora de las relaciones con Rusia, el fin de los ensayos nucleares y la lucha contra la corrupción. "Mi tío lo dijo bien: ningún problema del destino humano está más allá de las capacidades de los seres humanos", dijo Bob Jr. en uno de sus discursos públicos, subrayando la conexión con la visión de JFK.

La familia Kennedy es una de las pocas dinastías estadounidenses poderosas que siempre ha luchado por la paz y la justicia en el mundo. Aunque el padre y el abuelo de John y Bob Jr. respectivamente, tenía vínculos con la mafia, sus hijos y nietos se comprometieron con la justicia. JFK y su hermano Bob fueron símbolos de esperanza y encarnaciones de la "nueva frontera" del sueño americano, aspirando a un mundo de paz y colaboración entre los pueblos. Y fue por eso que ambos, empezando por John, fueron eliminados.

Proponemos a nuestros lectores un dossier elaborado por ANTIMAFIADuemila con motivo del 50º aniversario del homicidio del Estado-mafia ocurrido en Dallas el 22 de noviembre de 1963, con una entrevista exclusiva al fallecido periodista y escritor Gianni Bisiach, que investigó detalladamente aquel trágico acontecimiento.dallas2

JFK Y EL HOMICIDIO DE ESTADO

La verdad puede ser obstaculizada pero nunca detenida

Dos mil ochocientos noventa y uno. Este es el número de documentos desclasificados de los Archivos Nacionales de Washington relativos al asesinato del Presidente de los Estados Unidos, John Fitzgerald Kennedy. Tanto se ha escrito en los últimos años. También nosotros en ANTIMAFIADuemila hemos publicado un dossier que detalla las implicaciones de la CIA, de la Mafia y de otros poderes económicos en el asesinato. Entre los entrevistados está Gianni Bisiach, de los periodistas italianos sin duda el más cercano a los Kennedy (especialmente a Ted), que tuvo acceso a los secretos de una de las más importantes familias estadounidenses, precisamente por esa relación de amistad establecida con los tres hermanos. Fue el primero de todos en decir (como está escrito en su libro "El Presidente", y en la película "Los dos Kennedy"), que John Kennedy fue asesinado por la mafia, con la colaboración de algunos sectores de la CIA. Una declaración que les recomendamos en su totalidad. Para avalar aquella tesis del reportaje como también la de la Comisión Stokes, está el Comité sobre el Asesinato de la Cámara de Representantes de los Estados Unidos, que confirma lo que hasta 1979 solo podían parecer teorías. Y no solo eso. Incluso el ex director de la CIA William E. Colby, muerto en circunstancias misteriorsas, admitió durante una presentación del libro de Gianni Bisiach, que la Agencia Central de Inteligencia había colaborado con la mafia, pero excluyó categóricamente la participación en el asesinato del Presidente.

Los nuevos documentos, desclasificados por Donald Trump (lo cual es digno de elogio, aunque todavía creemos que no es apto para el papel de Presidente por su política racista y de extrema derecha), proporcionan nuevos elementos que señalan cómo la verdad puede ser obstaculizada, pero tarde o temprano siempre sale a la luz. Y así resulta que quien asesinó al presidente de Estados Unidos no fue Lee Harvey Oswald, sino un oficial de policía, J. D. Tippit. Un sujeto, este último, asesinado el 22 de noviembre de 1963, con disparos, 45 minutos después del ataque a Kennedy en Dealy Plaza en Dallas. Hubo 12 testigos del crimen de Tippit. Ocho de ellos reconocieron o creyeron reconocer a Oswald como el asesino, tanto durante los enfrentamientos como después con la ayuda de fotografías.

Pero si esto se sabía, lo nuevo que surgió fue que Oswald y Tippit se habían conocido en el club nocturno de Jack Ruby, una semana antes del asesinato de Kennedy. Ruby, relacionado a la mafia local, habría después matado a Oswald en el subsuelo de la policía de Dallas. De modo que se convierte en algo más que una hipótesis el hecho de que Ruby intervino para taparle la boca a Oswald y evitar que el mismo dijera la verdad sobre lo que había sucedido.

Dichas actas se agregaron a la investigación conducida por el juez Jim Garrison, en la que resultó que la CIA había sido ayudada por "otros", como el propio FBI o, aunque marginalmente, la mafia. Teorías que también forman parte del guión de la película "JFK" del director Oliver Stone.

Se puede considerar suficientemente probado que le dispararon al Presidente Kennedy de cuatro puntos diferentes, así como está suficientemente probado que la mafia ha hecho una gran contribución al "magnicidio", no solo respaldando el plan de muerte (los Kennedy le habían dado la espalda a la Cosa Nostra americana después de los votos recibidos en la campaña electoral), sino también interviniendo con sus hombres.

La verdad, entonces, surgirá siempre, incluso en un país como los Estados Unidos de América. Una nación de grandes contradicciones, capaz de dar nacimiento a grandes mentes e intelectuales, pero que aún hoy es gobernada por grupos de presión fascistas, autoritarios y racistas. Y quién sabe si tarde o temprano no surgirán nuevas verdades sobre el genocidio masivo del 11 de septiembre de 2001. Desde JFK hasta el ataque a las "Torres Gemelas". En el fondo son los signos de verdaderos crímenes del Estado.dallas3

Por el orgullo de su mirada y sus palabras, comprendimos que este hombre nunca le había tenido miedo a la muerte...

Dossier Kennedy: entrevista a Gianni Bisiach

Por Giorgio Bongiovanni

¿Cómo es posible vivir durante años con la idea de ser asesinado...? ¡¿Ir a lugares donde se sabe que hay posibles asesinos al acecho, con el propósito de demostrar que no se ha perdido la dignidad y que se está dispuesto a morir por lo que se cree…?! Probablemente no exista una respuesta racional, o tal vez la haya, pero no es fácil de entender... En un caluroso día de otoño conocimos a un hombre que se dio "esa" respuesta, aceptando todos los riesgos que tal actitud conllevaba, con gran determinación y humildad. Este hombre es Gianni Bisiach. Más allá de su conocida trayectoria en radio y televisión, Bisiach habló de su pasado "de riesgo" con gran claridad y sin retórica. Al final de la entrevista, se entretuvo más tiempo con Giorgio Bongiovanni, almorzando con él. Y precisamente en ese lapso de tiempo, con los micrófonos apagados, el periodista, el escritor y el corresponsal... dieron paso al hombre, sus batallas, sus derrotas... sus aspiraciones y sus miedos... El miedo vivido en su propia piel, respirando hondo... esa sensación de soledad que nunca muere y que acompaña a todo hombre que busca la verdad, desafiándose a sí mismo y a todas las adversidades. Y luego... la victoria sobre la muerte... su "desprendimiento" de este evento tan "natural" pero igualmente "contra natura" cuando ocurre en su manifestación más brutal que es el asesinato. Por el orgullo de su mirada y sus palabras, comprendimos que este hombre nunca le había tenido miedo a la muerte... Un sentimiento de "devoción" hacia el presidente Kennedy se hizo evidente incluso en las expresiones más simples que utilizó para comentar las fotos que retrataban a John Kennedy durante los mítines, con sus hijos, hasta la última, en la cámara mortuoria...

Mientras que contra la mafia y los sucios juegos políticos de la CIA y de toda la conspiración creada para eliminar al presidente, siempre mantuvo una actitud de desprecio, deplorando abiertamente la connivencia criminal y los desvíos investigativos deseados por los 'altos mandos'. Con el paso del tiempo, Bisiach nos hizo revivir su breve paréntesis en la 'trinchera' de la lucha contra la mafia. Su primer reportaje para la RAI en Corleone, en 1963, y las "señales codificadas" de los mafiosos, ese lenguaje hecho de silencios y guiños... El encuentro con el abogado del mafioso Luciano Liggio y su intimidación"... Dott. Bisiach... en su reportaje limítese a hablar de los muertos y deje en paz a los vivos...", el mismo abogado que lo haría conocer a Luciano Liggio (que en esa época era fugitivo y se escondía en una clínica psiquiátrica, ndr), con Totò Riina y con Bernardo Provenzano (encuentro histórico para el único periodista que logró conocer al actual fugitivo número uno). Recordando los muchos enemigos que tenía en la RAI y que luego de su reportaje sobre la mafia le impidieron hacer bien su trabajo, nunca se expresó con rencor, sino con la sonrisa de quien sabe que al final es la historia la que condena o absuelve. Al momento de despedirse, un abrazo espontáneo encerró la esencia del encuentro con un hombre sereno, que completó la tarea que se había propuesto, feliz de haber encontrado un amigo para continuar una batalla llena de trampas y aún no ganada.

P: Me gustaría comenzar preguntándole si hoy, en 1999, tiene miedo de ser asesinado como en 1969.

R: Nunca he tenido miedo de que me maten. Siempre he enfrentado a la muerte conscientemente y creo que eso me salvó, porque "ellos" sabían que no me importaba... No es que yo fuera a buscar la muerte, pero también he puesto en juego esta posibilidad... Probablemente hoy las cosas hayan cambiado, la situación mundial ha cambiado. En general, el único que conoce cierta realidad... que perturba el poder, corre el riesgo de ser asesinado. Durante un tiempo me ocupé del caso Kennedy y "ellos" tenían todo el interés en eliminarme, así como a decenas de personas que fueron eliminadas en ese período...

P: Usted fue, como periodista de la RAI, el primero en decir (como está escrito en su libro "El presidente", en su película "Los dos Kennedy") que John Kennedy fue asesinado por la mafia, en colaboración con algunos sectores de la CIA. Mencionó los nombres de Carlos Marcello, Santo Trafficante... En ese momento, cuando lo dijo, ¿cuáles fueron las reacciones de nuestro gobierno y de los estadounidenses? Se sabe que su libro fue presentado por el senador Andreotti quien luego lo leyó...

R: Usted me habla del libro, pero la película salió mucho antes, en 1969, y mencionaba el nombre de Carlos Marcello que era 'desconocido' en ese momento. Tuve mucho cuidado, al buscar las imágenes, de no dar nunca su nombre. Buscaba videos en los que Marcello estaba ahí con diferentes pretextos, pedí por ejemplo fotos de Nueva Orleans y otras cosas... Lo importante era que nadie lo supiera... Cualquiera que supiera que yo estaba buscando a Carlos Marcello, se habría asegurado de que me eliminaran al instante. Todo el procesamiento de la película se hizo de tal manera que quedó como un misterio hasta su estreno en los cines, por lo cual ya hubiera sido inútil eliminarme. No habrían atentado contra mi vida... algo que yo estaba dispuesto a sacrificar. En cualquier caso, lo importante fue que salió la película. Hice la investigación sobre la mafia 'Informe desde Corleone' que salió al aire en TV7, en la sección RT, el gran programa de televisión de Enzo Biagi. Fui el primero en hablar de la mafia de Corleone y los corleoneses, luego de Luciano Liggio, Totò Riina y Provenzano. En ese momento, hacer eso significaba ser el 'primero', era ser el que estaba 'consciente' de estos hechos, el que 'ellos' pensaban que sería útil eliminar.

P: ¿Por qué la CIA le pidió ayuda a la mafia para matar a Kennedy y por qué fue asesinado John Kennedy?

R: La CIA le había pedido ayuda a la mafia para matar a Fidel Castro. Cuando Fidel Castro tomó el poder en Cuba, Estados Unidos inicialmente lo apoyó, al igual que la CIA, que le proporcionó armas lanzadas en paracaídas. Esto se debe a que los estadounidenses ya no querían a Batista en el poder. Pero cuando Castro llegó al poder, lo primero que hizo fue nacionalizar empresas estadounidenses, la United Fruit en el rubro agricultura, empresas petroleras, etc. Los industriales estadounidenses estaban indignados por el comportamiento de Castro, que anteriormente se había beneficiado con su ayuda, y decidieron eliminarlo primero políticamente y después físicamente. Cuando Castro llegó al poder expulsó a la mafia de Cuba, cerró casas de juego, burdeles, el tráfico de drogas y de abortos (los estadounidenses iban a abortar a Cuba).

La mafia estaba furiosa con Castro porque había destruido su negocio y la CIA pensó en recurrir a la mafia que aún tenía algunos hombres en Cuba. Por ejemplo, Santo Trafficante, quien en ese momento se encontraba preso en Cuba y con quien la CIA tenía relaciones en nombre de Sam Giancana de Chicago, con Jack Rubi, quien luego mató a Oswald. Jack Rubi era un traficante de armas y de drogas y tenía varios clubes nocturnos en Dallas. Estaba en el círculo de Sam Giancana de Chicago (la mano derecha de Al Capone, que había pasado de ser chofer a ser su lugarteniente). Rubi fue a Cuba a llevarle naranjas a Trafficante que estaba en prisión. La CIA, al parecer con el apoyo de los Kennedy, decidió matar a Fidel Castro, de formas bastante ridículas... Kennedy tuvo un comportamiento contradictorio, en el sentido de que como presidente de los Estados Unidos (como todos los jefes de Estado), también tuvo que aceptar ciertas operaciones infames de los servicios secretos, manteniendo su propia moral. John siguió una cierta línea y luego con su hermano, el Ministro de Justicia (Robert Kennedy, ndr) luchó contra esos mismos mafiosos que ayudaron a la CIA. Ahora todo parece simple, pero los hechos eran muy complejos. Tras la crisis de los misiles en Cuba (cuando el mundo se salvó del riesgo de la Tercera Guerra Mundial), Kennedy decidió hacer las paces con Fidel Castro y con la Unión Soviética. Para ello abrió la 'línea roja', el teléfono con el Kremlin. Hizo que la mafia "terminara" el "trabajo" y cerró los campamentos de la CIA donde se entrenaba a los cubanos que se preparaban para el desembarco en Cuba. Entonces Robert Kennedy inició una investigación a fondo sobre Cosa Nostra en el Senado y en ese momento nadie sabía que se llamaba Cosa Nostra (Joe Valachi habló de ella en septiembre de 1963, dos meses antes del asesinato de Kennedy). Estos grandes mafiosos decidieron entonces matar a Kennedy. Ciertas secciones de la CIA claramente estaban en contra del presidente. En particular, Allen Dulles, a quien Kennedy había echado, junto con las personas (mencionadas en mi libro, con fotos) que participaron del escándalo de Watergate; los mismos que luego fueron detenidos en el Dealy Plaza tras el tiroteo contra Kennedy y que junto a Calogero Minacori (alias Carlos Marcello, ndr) decidieron eliminarlo. Fue un "cambio de objetivo": la mafia debía matar a Fidel Castro, cuando Kennedy cambió de opinión, la mafia decidió matarlo a él durante el viaje a Dallas... con una organización de tipo militar...

P: En ese momento, al igual que hoy, Cosa Nostra tenía una "comisión", una "cúpula". Cuando Carlos Marcello, Santo Trafficante y otros decidieron matar a Kennedy, Don Vito Genovese, el jefe de todos los jefes, debió saberlo. ¿Es, por tanto, sólo una hipótesis el hecho de que toda la mafia estadounidense estuvo de acuerdo con el asesinato de Kennedy?

R: No es una hipótesis, es una certeza. Vito Genovese venía siendo acusado por los hermanos Kennedy desde 1957, antes de que John asumiera la presidencia.dallas4

P: Recientemente, el director del FBI, Luis Fry, admitió oficialmente que la mafia estadounidense, por temor a la persecución policial, otorgó a la mafia siciliana el derecho exclusivo de vender heroína en todo el mundo a cambio de un buen porcentaje de las ganancias. En 1957 en el Hotel Delle Palme de Palermo, Lucky Luciano fue el "mediador" entre la mafia siciliana y la estadounidense. En esta reunión se decidió oficialmente el asunto. Pero ¿qué tan interesada estaba la mafia siciliana en el asesinato de Kennedy? ¿O fue completamente excluida?

R. La mafia siciliana no fue excluida y en particular Luciano Liggio y los corleoneses. Durante el juicio de Valachi en el Senado, Valachi primero contó que se llamaba "Cosa Nostra" y luego que los dos grupos hegemónicos eran los corleoneses y los castellamareses. Castellamare del Golfo fue vencido y el grupo que ganó, hasta el día de hoy es el de los corleoneses, que apoyaron a sus representantes en América. No sé si es cierto que Lucky Luciano tenía todo esto entre manos, creo que el mando mundial del tráfico de heroína, por lo que entiendo, era Santo Trafficante. El poder de Carlos Marcello y Santo Trafficante era inmenso. Santo Trafficante tenía todo el tráfico mundial de heroína en sus manos, estaba de acuerdo con la CIA en la época de Vietnam...

Recordemos que el jefe de todos los jefes era Vito Genovese, que le había "arrebatado" el poder a Lucky Luciano. Cuando se conocieron en Cuba, me parece que en 1948, en un hotel, Lucky Luciano entró en una habitación, se encontró con Vito Genovese y lo golpeó salvajemente, casi lo mata, diciéndole que había sido injusto con él en un momento en que estaba en "desgracia" en Italia. Posteriormente intentaron por todos los medios "comprometer" a Vito Genovese, que era muy hábil para ocultar su riqueza como resultado de las apuestas de caballos en Agnano. Precisamente a Agnano había llegado un personaje folclórico de la Camorra, Pascalone Nole, un hombre enorme. Lucky Luciano no era un hombre grande y usaba anteojos. Pascalone Nole acudió a Lucky Luciano pidiéndole "el honor" de jugar con él. Luciano se negó, respondiendo que nunca jugaba con otros, sino siempre solo. Pascalone insistió en que no podía negarse, mientras que Lucky Luciano fue inflexible en su negativa. Pascalone le dio entonces dos bofetadas, con su mano "gigante", tan fuerte que se le rompieron las gafas (Luciano tenía un grave problema de visión). Lucky Luciano, sin decir una palabra, se inclinó para recoger los vidrios, los metió en un pañuelo y se fue. Esa misma noche en la casa de Lucky Luciano, que vivía en el paseo marítimo de Nápoles, se presentaron los hombres de Pascalone Nole diciendo que le enviaba sus disculpas por lo que había hecho. Lucky Luciano respondió con mucha calma que Pascalone no tenía que disculparse por nada, ya que no había pasado nada... A la mañana siguiente, a las 10.30, en el mercado de frutas y verduras de Nápoles (como luego contó Francesco Rosi en su película "El desafío") Pascalone Nole fue asesinado de dos disparos. La esposa, que tomó su lugar, intentó por todos los medios encontrar al asesino, pero fue en vano. Las sospechas, por supuesto, recayeron sobre Lucky Luciano, quien en todo caso sabía que lo estaban marginando. Al principio escribió un libro (del cual no hay ni una copia, pero que he leído), de ese libro quería hacer una película sobre su vida. Fue al aeropuerto de Nápoles para encontrarse con dos productores estadounidenses. Mientras esperaba que llegara el avión, el mariscal de la Guardia de Finanzas que se hospedaba con él le ofreció una bebida, después de beberla murió súbitamente. No le hicieron autopsia, lo colocaron dentro de un cofre enorme, le dieron un funeral espectacular y lo enviaron a América. Por eso no sé si en ese momento tenía todo el control de la situación en sus manos, más bien creo que lo tenía Santo Trafficante...

P: Volviendo a John Kennedy, usted fue el primero en el mundo en decir que la mafia lo mató con la ayuda de la CIA o viceversa. El fiscal Jim Garrison llevó a cabo una investigación que fue en cierto modo asombrosa, y también mostró que la CIA había sido ayudada por "otros", como por ejemplo el FBI, nombrando sólo marginalmente a la mafia, a pesar de que sabía que el crimen organizado estaba involucrado en el asesinato del presidente.

R: Como Garrison era un fiscal "electivo", designado por elección, tenía necesidad de una "base electoral". La "base electoral" de Nueva Orleans estaba gobernada en gran parte por Carlos Marcello y, además, era amigo cercano de uno de los lugartenientes de Marcello. Cuando hubo ese notorio juicio en el que fui uno de los pocos periodistas admitidos, el abogado de Dallas, Alright, me pidió que escondiera a los testigos de Jim Garrison en mi habitación. Esa noche no dormí en mi habitación, dormí en la habitación de los testigos porque existía el riesgo de que los mataran. Los testigos fueron el taxista Raymond Camings y otra persona. Esa noche el abogado me invitó a cenar en el club Playboy de Dallas, también estaba Garrison que estaba muy bronceado por el sol. Le pregunté qué había pasado y me respondió que había estado en Las Vegas y que se había quedado dormido al sol, quemándose en un hotel que, "curiosamente", estaba a cargo del brazo derecho de Carlos Marcello. La revista "Life" publicó una serie de artículos, en parte relatados en mi libro, donde se decía que estaba en la nómina de Cosa Nostra...

P: Entonces, la figura del "héroe" que se describe en la película de Oliver Stone...

R: Quizás también fue un héroe, pero necesitaba la ayuda de alguien... y buscaba dinero donde pudiera encontrarlo... Garrison no podía ser tan íntegro, mencionó a la Mafia, pero sin dar nombres... La película de Oliver Stone es una película, en cierto modo importante porque hizo conocer la historia de este asesinato a los jóvenes de todo el mundo, pero falta el "equilibrio" de la participación en la conspiración de la Mafia y la CIA.

P: ¿Lindon Johnson, el 36º presidente de los Estados Unidos, fue parte del complot o dio un "consentimiento tácito" al asesinato de Kennedy?

R: Esto sigue siendo un misterio hasta hoy. Según algunos, Johnson no estuvo directamente involucrado, pero se dice que uno de sus colaboradores texanos (Johnson también era texano, se notaba en su forma de actuar, era grosero incluso con la viuda de Kennedy) había determinado la reubicación de la caravana de autos. El coche debía seguir derecho en Daily Plaza y en su lugar hizo un doble giro y en la segunda curva, que era muy estrecha, redujo la velocidad a 7/8 km por hora, favoreciendo así a los tiradores. Acertar a un objetivo en una "caravana" que va a 30/40 km por hora es muy difícil...

P: ¿Y el petrolero Hunt?

R: Ciertamente estuvo involucrado, tanto él como su hijo habían conocido en esos días a algunos jefes de la mafia de California e incluso a algunos asesinos. También hay algo muy extraño, muy misterioso. Nixon estaba en Dallas el día antes del asesinato de Kennedy, asistiendo a una gran reunión de Pepsi Cola, de la cual era portavoz. Nixon salió del aeropuerto de Dallas por la mañana entre las 8 y las 10 y Kennedy llegó a las 11.30 con su avión. Por supuesto que esto no significa nada... o significa mucho... extrañas coincidencias...

P: Bob Kennedy fue asesinado por más o menos la misma razón... Entonces ¿por qué cuando la familia Kennedy habló con usted no quisieron decir nada sobre el asesinato?

R: Incluso ahora no quieren hablar de eso. Creo que tienen miedo de que los maten. Ted Kennedy también sufrió tres atentados: luego de la muerte del presidente se cayó su avión, luego una mujer armada con un cuchillo fue detenida en el último momento, después lo llevaron a Chappaquiddick, nadie sabe cómo. Yo sospecho de los amigos que lo llevaron allí, que drogaron a las chicas, que lo emborracharon, fue víctima de algo que no está muy claro...dallas5

P: ¿Y la muerte de John John?

R: John John de alguna manera también quería llegar a la Casa Blanca. Cuando un entrevistador le preguntó por qué la revista "George" no abordó la muerte de su padre en Dallas, John John respondió que era inútil enfrentarse a otra investigación sobre la muerte de su padre. También podría haberle dedicado 40 números de "George", pero no habría conducido a nada... "Para poder hacer este tipo de investigación – dijo – hay que tener el poder". Poder significaba la Casa Blanca. Quería llegar a la Casa Blanca, dijo Salinger en un comunicado oficial, al igual que Schlesinger el día después de su muerte. John John no quería llegar allí en 4 o 6 años, sino alrededor del 2008. Creo que su muerte agradó a muchos, su avión se estrelló en el mismo lugar donde el avión de TWA se había estrellado tres años antes. Y se dice que el avión de TWA, al igual que el de Ustica, se estrelló porque le dispararon misiles militares por error. Muy cerca hay una base militar que dispara misiles. Todo esto también lo dijo Salinger, jefe de prensa de Kennedy; hay cientos de personas que vieron al misil partiendo desde abajo y golpeando al avión de TWA. En cuanto a John John, prevalece la hipótesis de la desgracia, de un accidente, ya que fue muy imprudente salir en esas condiciones climáticas. Es más difícil imaginar una conspiración...

P: Cuando William Colby, el director de la CIA, vino a Roma, dijo que la Agencia Central de Inteligencia había cometido el error de colaborar con la mafia, pero negó que hubiera una conexión directa de la CIA en el asesinato de Kennedy...

R: Siendo el director no podía hacer otra cosa que negarlo, pero su admisión fue muy importante. Había estado en Vietnam; más de 30.000 vietnamitas murieron durante el tiempo que estuvo allí, con los grupos de la CIA. Colby admitió esta "colaboración"... estaba Santo Trafficante... y desde Vietnam y Laos (las poblaciones del altiplano de Laos), se cargaban en los aviones de Air America, (una línea privada de la CIA), las bolsas con opio, con morfina, con la pasta base de la heroína...

P: Una organización criminal como Cosa Nostra logra matar al presidente de Estados Unidos. Cosa Nostra en Italia mata cuando quiere: Falcone, Borsellino, por no hablar de todos los magistrados y sus custodias... el hecho de que la CIA le pida ayuda a estas personas nos da mucho en que pensar... La mafia italoamericana que luego se convirtió en líder de las organizaciones criminales del mundo... Pero ¿por qué los gobiernos, o al menos los servicios secretos, la necesitan?

R: Porque esta organización tiene dos elementos que le dan ese gran poder: por un lado, el terror, porque "ellos" son despiadados y por lo tanto amenazan la vida de las personas y sus familias, un terrible poder de "persuasión", y luego porque tienen riquezas ilimitadas. El tráfico de drogas comienza con un producto que cuesta muy poco y que se vende a precios muy altos. Una dosis de heroína que puede valer 300 liras se vende por 100/150 mil liras. Hay una gran ganancia y, por lo tanto, tienen una gran cantidad de efectivo. Ninguna industria en el mundo, ningún gobierno del mundo puede tener una cantidad de dinero igual a la del crimen organizado. Lo llamo deliberadamente crimen organizado porque se dice que hoy se ha diferenciado de la mafia rusa... Creo que la mafia siciliana todavía predomina, porque está mejor organizada y se ramifica por todas partes... Luego está el poder del dinero... el hecho de que alguien tenga acceso a mucho dinero… es todo. Los industriales no tienen mucho dinero, los industriales tienen materias primas, los que venden autos pueden tener millones de autos, pero no tienen dinero efectivo... La mafia en cambio tiene el dinero para sobornar a la gente en varios ámbitos... "Ellos" generalmente corrompen a los que están en el poder, corrompen a los gobiernos. Obviamente, no necesariamente tienen que sobornar al Primer Ministro. En la maquinaria de un partido hay personas que pueden influir en las decisiones desde niveles cercanos a la cima, de una manera que no es explícita. En Estados Unidos se dice que John Kennedy obtuvo el voto que necesitaba de Illinois de la mafia de Chicago. No sé si esto es cierto, si es cierto quizás sucedió indirectamente. Frank Sinatra estaba "enamorado" de la figura de Sam Giancana, que para él era como un mito. En la película "El Padrino", el padrino sería Giancana y el cantante Fontane, Frank Sinatra. Puede ser que Sinatra, así como conectaba a las mujeres de Giancana con Kennedy, haya conectado a los mafiosos de Illinois que le dieron algunos votos a Kennedy. No es que Kennedy haya ido directamente a Illinois para estrechar la mano de los mafiosos... aunque debo decir que hay imágenes en mi película en las que se ve a Kennedy estrechando la mano de mafiosos de todo Estados Unidos, como Bonanno y otros (que, sin embargo, formaban parte de la comunidad italiana y quizás Kennedy no sabía quién era realmente).

P. ¿Por qué para los gobiernos es necesario que exista la mafia?

R: Porque la maquinaria política necesita dinero. Por ejemplo, ahora está el tema de la igualdad de condiciones, de los comerciales, etc., está claro que quien tiene más publicidad gana más fácilmente las elecciones. Quien tiene más publicidad no necesariamente va a ganar las elecciones, pero ciertamente es más probable que llegue directamente al público y, por lo tanto, se encuentra en ventaja. Masas de dinero tan enormes y la posibilidad de utilizarlas directa o indirectamente para corromper personajes pertenecientes a "ciertas maquinarias políticas" en realidad le dan a la mafia un gran poder... Creo que el mundo de hoy, con la circulación de información, de noticias, con Internet (que pone a disposición de los jóvenes, de todos los ciudadanos, una gran información sobre lo que está sucediendo) hará la vida más difícil para las organizaciones mafiosas. Cuanto más se hable de esto, mejor es... pero "ellos" van a transformar a la organización, habrá una mutación: se van a convertir en industriales, en jefes de Estado, llegarán adentro del poder... Mientras estaban afuera, tenían "referentes" (como se acusa a Andreotti y otros de haber sido referentes de la mafia), ahora "ellos" tendrán hombres que serán elegidos directamente para los niveles superiores y por tanto, con el dinero que tienen, podrán mantener estos cargos... También puede ser que, al entrar en posesión de muy grandes organizaciones industriales, puedan transformar en algo "honesto", "lícito", "legal" lo que antes era ilegal, aunque esto es solo una esperanza... creo que vencer a la mafia hoy requeriría "santidad" de parte de casi todos y los santos son muy pocos... las personas que viven según principios morales y religiosos absolutos son muy pocas. Generalmente el hombre es débil... Sin embargo, queda la esperanza de que exista una mutación positiva y que la mafia sea aplastada lentamente por las organizaciones políticas... Todos los que hemos atacado a la mafia, asumiendo los riesgos, obviamente lo hemos hecho con la esperanza de que pueda ser vencida y espero que esto pronto suceda...dallas6

P: En este momento ¿es más fuerte la mafia o los servicios secretos?

R: Son fuerzas distintas. El servicio secreto no tiene dinero, pero tiene el poder del Estado, la mafia no tiene el poder del Estado, tiene que sobornar, pero tiene el dinero. Quien tiene el poder obtiene el dinero con corrupción y quien tiene el dinero corrompe al que tiene el poder. En ambos casos se necesita la voluntad de delinquir, tanto por parte del poder político como por parte de la mafia y los servicios secretos...

P: Le agradezco en nombre de nuestra redacción por escribir su libro...

R: Cuando hice la película y luego el libro, simplemente esperaba hacer público lo que sabía, aunque me arriesgué un poco... Afortunadamente, el riesgo no se produjo, aunque lo hubo, me mantuve con vida... Ahora tengo la satisfacción de comprobar que la noticia circuló discretamente, no tanto como pensaba... Escribir un libro no es suficiente, hacer una película no es suficiente, a veces la gente lee el libro, ve la película y luego sigue hablando como antes...

P: ¿Qué opina del hecho de que los jóvenes editores hablen de la mafia para atacarla?

R: Deben explicar, especialmente a los jóvenes, que es mejor ser honesto, además de moral, y que también es más útil, no conviene cometer un delito. Tomemos por ejemplo a Totò Riina, que vive en una prisión ¿qué tipo de vida lleva? Aquel que era el "más grande", el "más poderoso", que podía matar a cualquiera, ahora vive como un miserable en una celda. Puede haber corrompido a alguien, pero vive mal de todos modos... Un joven que tiene una carrera limpia, que tiene metas limpias, que usa su vida para propósitos nobles, como quería hacer el joven Kennedy, tiene una vida más justa y más bella y la vivirá incluso mejor que los que viven mal, que los que cometen delitos… Es importante que el joven editor diga con valentía cosas explícitas. Es igualmente importante que quienes tienen grandes medios de comunicación digan también "pequeñas palabras", porque la palabra pequeña que se habla a una gran masa prepara el terreno para el conocimiento.

P: Gracias nuevamente por todo lo que ha hecho y por lo que sigue haciendo.

R: Buen trabajo…

*Foto de Portada:

*Foto 3: Gianni Bisiach

*Foto 5: Robert Kennedy Jr.

*Foto 6: John Fitzgerald Kennedy y Nikita Khrushchev

La madre, Angela Gentile, hace un llamamiento al Jefe de Estado Sergio Mattarella y a la Primera Ministra Meloni

 

Attilio Manca, el famoso urólogo siciliano, fue encontrado muerto, simulando un suicidio, en su apartamento de Viterbo la noche del 11 al 12 de febrero del 2004. Debido a los particulares métodos del homicidio, porque de esto estamos hablando, se ha establecido que el motivo de su eliminación está vinculado a los misterios que giran en torno a la fuga del jefe de Cosa Nostra, Bernardo Provenzano.

No era un "jefe mafioso normal", sino un líder especial que tenía, junto con otros, la "tarea de mantener las relaciones con los aparatos del poder, el llamado Estado oculto y con los servicios secretos". Un jefe que conocía los secretos candentes, como "los secretos que se esconden detrás de ciertos asesinatos excelentes, como el asesinato de Mattarella, Pio La Torre, la masacre de Chinnici y los de las masacres del 92 - 93. Este tipo de jefe mafioso disfruta de una protección superior". El análisis del exfiscal general de Palermo y hoy senador Roberto Scarpinato abarca todo el marco del asesinato de Attilio, y llega a la conclusión de que esta dramática historia ciertamente puede insertarse dentro de ese ámbito en el que se desarrolla la "lucha sucia de poder que ha caracterizado a este país nuestro".

Es la primera vez que la sala dedicada a los caídos de Nassirya en el Senado de la República recibe a la familia de Attilio Manca y su historia. Junto a Scarpinato estuvieron Angela Gentile, madre del médico siciliano, el abogado de la familia Fabio Repici, la senadora Barbara Floridia (moderadora del evento) y la diputada Stefania Ascari. Todo gira en torno a lo que fue Provenzano: un jefe particularmente poderoso (no sólo para la mafia) para quien existía un doble nivel de protección: el interno de la mafia y el externo, que se traduce en protección del sistema. Pero si uno de estos líderes especiales es capturado se convierte en un asunto serio; ya que "ni siquiera es fácil eliminarlos, porque toman precauciones y, sabiendo que son custodios de secretos ardientes, siguen teniendo documentos que pueden ser puestos a disposición en caso de peligro". Entonces, si un médico como Attilio Manca se encuentra con un personaje "especial" como Provenzano, que guarda secretos de Estado, y puede poner en peligro su fuga, esto ya no es un problema de la mafia, se convierte en un problema de Estado. Y aquí entran al campo los especialistas. "Estoy haciendo una hipótesis, pero quizás Attilio Manca era un peligro no sólo para la mafia en ese momento, sino que era un peligro mayor, porque si Provenzano hubiera sido arrestado en ese momento, todo lo que pasó después podría haber pasado antes. Había que proteger a Provenzano".

Esos mismos especialistas que entran en las cárceles y dejan bolsas de plástico en las mesas de noche de los reclusos, como pasó con Antonino Giuffrè (mano derecha de Provenzano) o que matan simulando suicidios como en el caso de Nino Gioè. ¿Y cómo olvidar la escena en la que Bernardo Provenzano se pone una bolsa en la cabeza, comunicando simbólicamente que alguien le había aconsejado suicidarse?manca2

Éste es el rostro del otro Estado que mató a Attilio. Pero como en todas las grandes tragedias italianas también hay espacio para personajes "híbridos", las llamadas "eminencias grises", esas figuras que habitan el mundo del medio. Uno de ellos es sin duda el jefe de Barcellona Pozzo di Gotto, Rosario Pio Cattafi, que también participó "en la investigación sobre el asesinato del doctor Attilio Manca", según recordó el abogado Fabio Repici. "Recién en 2022 -dijo- fue condenado por mafia, por un delito que comenzó en los años 1970 pero que no pudo convertirse en condena debido a sus contactos en los más altos niveles del mundo institucional y empresarial. Hoy, sin embargo, nos enfrentamos a una paradoja: dentro de unos días Cattafi podrá pasear libremente por Barcellona Pozzo di Gotto, donde vive la madre de Attilio Manca, la señora Angela Gentile. La Comisión Antimafia debe ser consciente de lo que está pasando y de que se le debe prestar la máxima atención. Es inaceptable que la madre de Attilio Manca encuentre al jefe de la mafia suelto en su ciudad".

¿Pero por qué tanta impunidad?

"Durante cincuenta años -continuó Repici- fue imposible que las instituciones pudieran certificar que Rosario Cattafi era un mafioso. ¿Por qué? Porque Rosario Cattafi es una persona que, según los informes que la policía judicial hizo sobre él, ha tenido "relaciones con magistrados, ministros, parlamentarios, subsecretarios, diputados regionales, jefes de los servicios secretos, jefes de las fuerzas de seguridad, policías, directores de empresas, entre ellas las más grandes empresas de armas, como Oto Melara, Breda y otras, todas vendedoras internacionales de armas; y gracias a ello había encontrado una cláusula de inmunidad salvadora". Hasta el 2022, cuando el Tribunal de Casación dictó una sentencia confirmando lo que ya había establecido el Tribunal de Apelación de Reggio Calabria el 6 de octubre de 2021. En uno de los pasajes de los fundamentos de esta sentencia, la Casación declara que "alrededor del 2004, Salvatore Rugolo (cuñado del jefe Giuseppe Gullotti, ndr), que, como (Francesco) Cambria y Cattafi, mantenía relaciones con las instituciones desviadas por cuenta de la banda, le había dicho que fue el propio Cattafi, en nombre de un general de carabineros, quien llevó al médico al lugar donde se había refugiado Bernardo Provenzano, que necesitaba atención urgente. Precisamente para evitar que se revelara el refugio de Provenzano, Manca fue asesinado por los servicios secretos desviados". Además, según D'Amico, "después del 2006, en el momento en que estaba recluido en la cárcel Opera de Milán, Antonino Rotolo (importante afiliado a Cosa Nostra de Palermo, ndr) confirmó que Provenzano había sido tratado en Francia por Manca, y que luego fue asesinado por los servicios secretos". Volviendo a las investigaciones sobre el asesinato de Attilio, el abogado recordó que "estamos a la espera de la evolución procesal, pero naturalmente este no es el lugar para tratar ese tema". Durante la conferencia, la madre de Attilio, Angela, hizo un llamamiento al presidente de la República, Sergio Mattarella: "Presidente Mattarella, usted es una víctima de la mafia, ¿por qué no habla bien de la búsqueda del verdad sobre mi hijo? Pero también a la presidenta Meloni: ella es madre, dice que la familia es la parte más importante de su vida. Bueno, yo tuve una familia feliz, tuve dos hijos maravillosos, uno todavía está aquí conmigo, pero al otro me lo sacaron justo en el momento en el que podría haber logrado sus mayores metas, porque era un joven de 32 años que se suponía iba a ser el primero en realizar en el país una cirugía laparoscópica de próstata, lo cual hubiera sido una medalla para Italia. Y en cambio Italia lo olvidó, empañó su nombre y lo olvidó. Lucharé, ya tengo 80 años, pero espero tener verdad y justicia antes de morir".

La guerra contra quienes luchan contra la mafia

"El derecho a la verdad de Ángela Manca, de Gianluca Manca, no es un derecho privado como si fuera un derecho de propiedad cuyos límites deben regularse, cuya protección debe solicitarse. Es una cuestión que concierne a la nación y al interés de toda una comunidad, y no es aceptable que en Italia, en determinadas cuestiones, como está sucediendo estos días, en estas horas, incluso frente a ciertos desaciertos de la Comisión Antimafia, sean las familias de las víctimas las que apoyen la dignidad de un país. Las instituciones deben estar en primera fila a su lado", afirmó el abogado recordando que "la señora Manca estaba entre los firmantes, junto con Salvatore Borsellino, los familiares de Nino Agostino, Stefano Mormile, Paola Caccia, Paolo Bolognesi, presidente de la Asociación de Familiares de las Víctimas de Bolonia, al presidente de la Asociación de Familiares de las Víctimas de la masacre de Piazza della Loggia, al presidente de la Asociación de Familiares de las Víctimas de Piazza Fontana, etc., etc., etc., citando a Gaber, de un llamamiento contra la "abominación que está ocurriendo con el vuelco de valores por el cual hoy, en lugar de luchar todos juntos en la búsqueda de la verdad y la justicia, se hace la anti antimafia es decir, la guerra contra quienes han luchado y luchan contra la mafia. Esto es algo que no se puede tolerar y no hay solución, puede venir cualquier fuerza de gobierno, cualquier mayoría, cualquier potentado pero no pasarán, y digo no pasarán en este sentido: la señora Manca pertenece a ese grupo de grandes personas que desgraciadamente han ilustrado en estas décadas la nación".manca3

Desvíos del Estado

La voz de Ángela se llena de emoción mientras pronuncia las palabras más duras: "Tuve que presenciar desvíos vergonzosos, desvíos del Estado. La última llamada de mi hijo fue el día que lo mataron entre el 11 y el 12 de febrero del 2004 y esa mañana me llamó a las 9, una llamada que desapareció de los registros. Hay 24 horas de vacío. ¿Qué hizo mi hijo en esas 24 horas? ¿Por qué desapareció? ¿Por qué en los tabulares se veía dónde estaba mi hijo?". Y luego agregó: "¿Por qué nos dijeron que mi hijo había muerto de un aneurisma cerebral? ¿Saben cuando me enteré que mi hijo había muerto por una sobredosis? El día del funeral. Porque el profesor Rizzotto y Ugo Manca nos impidieron ver el cuerpo de mi hijo. Luego vi fotos de mi hijo. Mi hijo tenía la cara y el tabique nasal completamente desviados y su cara era una máscara de sangre, por eso no lo dejaron ver. ¿Y por qué Gava, el inspector de policía, dijo una mentira? Dijo que mi hijo estaba presente en el hospital el día de la cirugía de Provenzano, pero mi hijo no estaba en el hospital". Y luego dijo: "Recuerdo que cuando Mónica Mileti fue condenada por tráfico de drogas, ese día, con mi hijo Luca, fuimos felices. Por fin podíamos defendernos en un juicio. ¿Saben lo que pasó? Que fuimos excluidos del juicio porque la muerte de Attilio no había causado ningún daño. En los últimos años he sufrido mil decepciones y, sobre todo, actos intimidantes".manca4

Suicidios inexplicables

La diputada Stefania Ascari recordó "el trabajo realizado en la Comisión Antimafia en la última legislatura" en referencia al informe votado por unanimidad "en el que se dice que el de Attilio Manca fue un asesinato relacionado con la fuga del jefe corleonés. Pero una larga lista de suicidios sin resolver gira en torno a este hecho. Francesco Pastoia, el jefe que luego se suicidó en la prisión de Módena y que en una escucha ambiental habló de un médico que había visitado a Provenzano en su refugio y a partir de este elemento se podía llegar a la verdad. Pero, hay que decirlo, nadie, a la luz de esta declaración, se interesó jamás. Lo extraño de este tema es que posteriormente se abrió su tumba y se comprobó que el cadáver había sido quemado, un hecho sumamente extraño. Luego escuchamos a Carmelo D'Amico, retomamos las declaraciones de Giuseppe Setola, Giuseppe Campo, Stefano Lo Verso y Antonino Lo Giudice, a quienes se sumó luego el arrepentido Biagio Grasso de Milazzo. Y en todos los casos, estos colaboradores de justicia hablaron de asesinato. También quiero decir -prosiguió Ascari- que en el caso del médico Attilio Manca hubo muertes colaterales absolutamente sospechosas y en cualquier caso poco claras, y especialmente hacia aquellas personas que hablaban del médico y de su implicación evidente en el caso del fugitivo. Hablemos por ejemplo, además del arrepentido Francesco Pastoia, de Salvatore Rugolo que habló del caso del médico a Carmelo D'Amico y que murió en un extraño accidente de auto con un chico de 20 años a su lado que resultó ileso. Pensemos por ejemplo en Sergio Rappazzo (fallecido en 2005) y Angelo Miano que entran en la investigación de las escuchas telefónicas cerca del convento donde supuestamente estaba recluido Provenzano, que también en este caso mueren de una manera muy extraña y también habían hecho referencia al doctor. Pienso en Miguel Ángel Alfano, hombre de honor de la familia de Bagheria, que se ocupó de la situación de fuga de Provenzano y se habría suicidado. Por lo tanto, se trata de una serie de muertes colaterales que evidentemente deben investigarse más a fondo", concluyó la diputada.

*Foto de Portada: © Imagoeconomica: La madre de Attilio Manca, Ángela Gentile y Bárbara Floridia

*Foto 2: Roberto Scarpinato con Ángela Manca

*Foto 3: Fabio Repici

*Foto 4: Stefania Ascari

https://www.antimafiaduemila.com/rubriche/giorgio-bongiovanni/102498-omicidio-attilio-manca-scarpinato-latitanza-di-provenzano-era-un-problema-di-stato.html

De los nuevos ataques contra la magistratura al acto de fuerza contra Scarpinato

No, no alcanzaron las cosas "desagradables" de la Justicia o las normas vergonzosas "anti-Gandhi", a golpe de decretos y leyes. Este gobierno, fascista y amigo de los mafiosos, revela cada vez más su rostro autoritario. El último caso es el de los 12 migrantes, procedentes de Bangladesh y Egipto, encerrados en Gjader (Albania), a donde habían llegado para ser sometidos al examen acelerado de sus solicitudes de asilo porque procedían de países de origen que el gobierno considera seguros y luego devueltos a Italia por decisión del tribunal de Roma sobre la base de una sentencia europea.

En pocos días hemos sido testigos de una auténtica campaña de desprestigio contra toda la magistratura.

La primera ministra Giorgia Meloni aplica un "corta y pega" de un correo electrónico enviado por el fiscal adjunto de Casación, Marco Patarnello, publicado en el boletín de la ANM (Asociación Nacional de Magistrados) tras la decisión del tribunal de Roma sobre la permanencia de los inmigrantes en los centros albaneses, para luego decir: "Es un peligro, hay que remediarlo".

El jefe de bancada de Forza Italia en el Senado, Maurizio Gasparri, quien, invocando la intervención del Jefe de Estado y del CSM (Consejo Superior de la Magistratura), habla de "togas rojas" que "violan las leyes y los principios constitucionales". El dirigente de Fratelli d'Italia, Giovanni Donzelli, hace lo mismo: "Las togas rojas no detendrán nuestras reformas".

Luego vienen el ministro de Justicia, Carlo Nordio ("Si el poder judicial se desborda, debemos intervenir") y su subsecretario Andrea Delmastro, que, en el diario La Stampa, definió a los jueces como "ayatolás". El viceprimer ministro Matteo Salvini, procesado en Palermo por el caso Open Arms, habla de "persecución judicial", arremete contra los fiscales e intimida a los jueces que deberán juzgarlo.

Después, el presidente del Senado, Ignazio La Russa, un conocido "matón" fascista, lanza flechas y ataques proponiendo una reforma de la Constitución para regular las relaciones entre magistrados y políticos.

Estos son los tantos "matones estatales" que, con arrogancia y prepotencia se sientan en los escaños de nuestro Parlamento.

Una soberbia propia de quienes creen que pueden hacer lo que quieren y que se extiende por todos los ámbitos institucionales.

Sucede también en la Comisión Parlamentaria Antimafia, presidida por Chiara Colosimo, donde se desarrolla lo que definimos como "el teatro del absurdo".

Para continuar sin contratiempos su investigación sobre la masacre de via d'Amelio, ahondando en la única pista procesal del interés de Paolo Borsellino, esto es, la investigación "Mafia y Licitaciones", se lanzó una vergonzosa campaña contra el ex fiscal general de Palermo, hoy senador del Movimiento Cinco Estrellas, Roberto Scarpinato.

Se trata del supuesto "arreglo" con Gioacchino Natoli, antes de que este último fuera a declarar a la Comisión Antimafia.

El periódico La Verità, que fue el primero en revelar la existencia de intercepciones telefónicas en relación con los dos exmagistrados, insiste hoy con el tema, de manera críptica, dando a entender que estaba al tanto del contenido de esas conversaciones.

Un hecho absolutamente anómalo si tenemos en cuenta que el mismo, transmitido a la Comisión Antimafia por la Fiscalía de Caltanissetta, debería estar protegido por el secreto.

Al menos eso es lo que había garantizado la propia Colosimo después de decidir, en el despacho de la presidencia, ponerlos a disposición de los miembros de la Comisión.

No a Scarpinato, sin embargo.

Y no solo eso. En primer lugar, se rechazó la solicitud de devolver a la Fiscalía de Caltanissetta los documentos transmitidos y solicitar a dicha Fiscalía "que disponga una nueva transmisión de las intercepciones antes mencionadas a la Comisión sólo después de la presentación de los documentos conforme al art. 415 bis de CPP (Código Procesal Penal) o en cualquier caso después de que el juez de instrucción haya agotado la selección de escuchas telefónicas pertinentes para las investigaciones". Después de eso, Colosimo quiere avanzar proponiendo una ley sobre conflictos de intereses.

Luego, según dijeron algunas agencias, la presidenta de la Comisión Antimafia decidió continuar con el proceso para modificar la ley y establecer la obligación de que los miembros de la Comisión Antimafia se abstengan en casos de conflicto de intereses.

Todo con una premisa. La propuesta de la centroderecha sólo será retirada si de la oposición llega un texto mejorado de la ley que propuso, que vaya exactamente en la dirección esperada durante la reunión en la oficina de la presidencia.

Del estilo "se hace como digo y punto".

La razón por la que quieren sacar a Scarpinato de la Comisión Antimafia la explicó el propio exfiscal de Palermo en la entrevista con Massimo Giletti, durante el programa El Estado de las Cosas: "Quieren sacarme de la Comisión Antimafia por esto: soy uno de los pocos magistrados que nunca aceptó que las masacres de Capaci y via D'Amelio, así como los atentados de Roma, Florencia y Milán de 1993 fueran perpetrados únicamente por la mafia. Algunos colegas y yo hemos llevado a cabo investigaciones que demuestran que detrás de esas masacres hubo hombres poderosos de la política, la masonería y la derecha subversiva".

Es evidente que este Gobierno no puede aceptar presencias incómodas.

Quizás el conflicto de intereses podría afectar a la propia Colosimo, que frecuentaba a Luigi Ciavardini, responsable no sólo de la masacre de Bolonia sino también del asesinato del magistrado Mario Amato.

Este es sólo uno de los hechos conocidos de los miembros de nuestras instituciones.

Se sabe que entre las figuras de referencia de la actual Premier se encuentra un "protagonista del neofascismo" como Pino Rauti, fundador del Centro de Estudios Nuevo Orden y padre de Isabella Rauti, subsecretaria del Ministerio de Defensa.

Se sabe también que en una visión del revisionismo en el Parlamento se organizó una conferencia dedicada al general Gianadelio Maletti, jefe del departamento de contraespionaje del SID en los años 1970, condenado a una pena firme de 18 meses por complicidad con los responsables por la masacre de Piazza Fontana (otra masacre neofascista).

En el gobierno está Forza Italia, el partido fundado por Silvio Berlusconi, que le pagaba a la mafia, y por Marcello Dell'Utri, condenado a siete años por concurso externo en asociación mafiosa.

Berlusconi está muerto. Y hoy su hija Marina habla de política. En su intervención durante la inauguración de la nueva librería Mondadori en la Galería Alberto Sordi de Roma, no sólo expresa una "opinión positiva" sobre el gobierno Meloni, sino que ataca a "ciertos jueces" que, según ella, "no son enemigos de mi padre o de Giorgia Meloni, sino de todo el país".

Quiso la casualidad que en la inauguración también estuviera presente el antiguo brazo derecho de papá Silvio, Dell'Utri, que dijo lo suyo: "Estoy de acuerdo con las palabras de Marina Berlusconi. Hay algunos jueces, no es que sean todos, son pocos. ¿Han regresado las 'túnicas rojas'? ¿Por qué se fueron?". Y no tiene dudas sobre el trabajo de Giorgia Meloni: "Es muy buena".

Todo es normal en un país sin memoria.

Pero en las sentencias del exsenador hay palabras que pesan como piedras.

Dell'Utri fue el garante "decisivo" del acuerdo entre Berlusconi y Cosa Nostra con un papel "importante para ambas partes: la asociación mafiosa, que recibió un canal constante de enriquecimiento significativo; el empresario Berlusconi, interesado en preservar su ámbito de seguridad personal y económica".

Hoy a la política le gustaría eliminar estos hechos. Así es posible aceptar que el propio Dell'Utri, en una entrevista muy reciente, haya vuelto a hablar de Vittorio Mangano, reiterando el concepto de que según su modo de ver fue un héroe por no haber hablado nunca de él y de su querido amigo Silvio, presentándolo como un gran hombre. La verdad, sin embargo, es muy diferente. Y los "matones del Estado" lo saben bien.

*Diseño gráfico de Portada: Paolo Bassani

Un asesinato político, planeado, deseado y organizado por "mentes refinadísimas": el padre de la patria, Carlo Alberto dalla Chiesa, ex general de carabineros y luego prefecto de Palermo, fue asesinado el 3 de septiembre de 1982 en via Isidoro Carini en Palermo, junto con su joven esposa Emanuela Setti Carraro y el agente de su custodia Domenico Russo.

Fue muy valiosa la colaboración de Calogero Ganci que, hablando con el magistrado Luca Tescaroli (ahora fiscal jefe de Prato), contó los detalles de aquel trágico día. Explicó que condujo el auto desde el que Antonino Madonia empezó a disparar con un rifle Kalashnikov y, en interrogatorios posteriores, Ganci indicó los métodos organizativos y ejecutivos de la emboscada. El 12 de julio siguiente, su primo Francesco Paolo Anzelmo lo siguió en su decisión de colaborar con la justicia y declaró que la masacre no fue provocada por la guerra mafiosa, sino que era "algo que vino de afuera".

Mientras tanto, el 10 de junio de 1996, el Tribunal de Casación puso fin al maxi proceso, iniciado más de una década antes, y declaró la culpabilidad, por haber dado la orden, de Salvatore Riina y de otros seis miembros de la comisión provincial de Palermo: Bernardo Provenzano, Michele Greco, Pippo Calò, Bernardo Brusca y Nenè Geraci.

La condena de Madonia y de otro miembro del comando. Vincenzo Galatolo, pasó a ser definitiva tras la sentencia de la Corte de Casación del 22 de junio de 2004.

Además de ellos, Pino Greco "Scarpuzzedda", Raffaele Ganci, Francesco Paolo Anzelmo, Giuseppe Lucchese, Vincenzo Galatolo y Nino Madonia fueron condenados como miembros del grupo de fuego.

El trabajo nefasto y sinérgico del Estado-mafia creó tal masacre que incluso el jefe de jefes, Totò Riina, hablando con su compañero de prisión Alberto Lorusso en la cárcel Opera de Milán, describió con emoción: "Tan pronto como salió, con su esposa, lo seguimos de lejos. Podría haberlo hecho allí, para ser más espectacular, en el hotel, pero estas cosas me molestan". Y luego agregó: "Al día siguiente le dije: 'Pino, Pino (refiriéndose a Pino Greco conocido como Scarpuzzedda, uno de los asesinos más infames de Cosa Nostra, ndr) mejor si vas a buscar las cosas, preparemos las armas'". "A primera vista, a primera vista -concluye- fuimos varios… éramos unos siete, ocho de los terribles, éramos terribles. Ya estaba muerto pero a pesar de que estaba muerto le disparamos donde estaba, apenas salió ta, ta, ta, y murió".

Sin embargo, quienes piensan en esta masacre como un mero acto de venganza de Cosa Nostra hacia un servidor leal del Estado (el honesto) se engañan.

Como se indica en la sentencia del 2002, "podemos ciertamente estar de acuerdo con quienes sostienen que persisten grandes zonas grises, tanto en lo que respecta a la forma en que el general fue enviado a Sicilia para hacer frente al fenómeno mafioso, como a la coexistencia de intereses específicos, en el seno de las instituciones, para eliminar el peligro que representaba la determinación y la capacidad del general".

No tiene sentido andarse con rodeos: las víboras que anidaban en los pasillos del poder del Estado-mafia enviaron al general a Palermo para que lo mataran; para ser arrojado "al viento ni bien determinados intereses fueron o podían ser tocados o reducidos", escribió el prefecto en sus diarios.dallachiesa2

Pero ¿cuáles eran esos nefastos intereses? ¿Podemos realmente pensar que fue sólo Cosa Nostra? Totalmente improbable.

El prefecto no fue incluido en la "lista negra" a pesar de haber investigado a la mafia (la corleonesa y otras) en Sicilia entre finales de los años '60 y principios de los años '70. Simplemente porque, como dijo su hija Simona dalla Chiesa, a Cosa Nostra "no le convenía".

Incluso las confidencias de Pino Greco "Scarpuzzedda" al futuro arrepentido Tullio Cannella confirmaron ese cuadro: este asesinato "nos consumió, serán necesarios al menos diez años para enderezar el barco y la situación".

A estas declaraciones se suman las del jefe Giuseppe Guttadauro a su amigo de confianza Salvatore Aragona, interceptadas en el 2001 por los magistrados de Palermo coordinados por el fiscal Nino Di Matteo (ahora fiscal nacional adjunto antimafia y exconsejero togado del CSM, Consejo Superior de la Magistratura) que investigaban al ex gobernador de Sicilia, Salvatore Cuffaro, luego condenado en forma definitiva por complicidad agravada con la mafia.

"Pero a quién carajo le importaba matar a dalla Chiesa, vamos, hablemos claro", dijo el jefe Guttadauro.

Aragona asintió y habló de un misterioso "orquestador". Los Carabineros del ROS (Reparto Operativo Especial del Arma de Carabineros) escribieron a la Fiscalía comentando: "Guttadauro creía que en la masacre de dalla Chiesa había una dirección oculta por parte de alguien que esencialmente se había salvado a sí mismo de la situación". "Pero por qué siempre tenemos que pagar por las cosas", mencionó Aragona. "¿Y por qué tuvimos que hacer este favor?", respondió Guttadauro. "No entiendo -insistió Guttadauro- este impulso a ciertas exasperaciones. ¿Por qué nos dejamos meter en la picadora de carne?".

Entonces ¿quién en 1982 le pidió a la mafia el "favor" de matar a Carlo Alberto dalla Chiesa? ¿Quién fue el "orquestador"?

"Pero no podemos resolver y comprender todas las cosas con palabras -prosiguió Guttadauro- hay cosas que nunca diré, nunca saldrán de mí". Incluso los mafiosos se quejaron de que la responsabilidad por los crímenes excelentes sólo recaía en los ejecutores y los autores intelectuales de la mafia. Estos, de hecho, han sido utilizados muchas veces como brazo armado para operaciones militares que al final casi siempre han resultado inconvenientes para la propia organización Cosa Nostra. "Bajo ese paraguas sólo pueden caber los políticos -sentenció Guttadauro- van a ver que en los distintos juicios los únicos que no tendrán problemas serán los políticos".

El instigador está dentro de la Democracia Cristiana

El 8 de marzo del 2017, Roberto Scarpinato, entonces fiscal general de Palermo (hoy senador), reveló en una sesión secreta de la Comisión Antimafia que Gioacchino Pennino (médico, hombre de Cosa Nostra y masón, convertido en colaborador de justicia) dijo haber sabido por otros masones que "la orden de eliminar a Carlo Alberto dalla Chiesa llegó a Palermo desde Roma, del diputado Francesco Cosentino", un democristiano, muy fiel a Giulio Andreotti, secretario general de la Cámara de Diputados y figura importante de la Logia Masónica P2 de Licio Gelli. Scarpinato, sobre el papel de Cosentino, no proporcionó más detalles, pero ya el 6 de diciembre de 1982 la esposa de Cosentino, Clara Canetti, ante la Comisión P2 de Tina Anselmi había establecido el "peso" del honorable demócrata cristiano dentro de la logia masónica: "Gelli era sólo el cuarto. El primero era Andreotti, el segundo era Francesco Cosentino, el tercero era Umberto Ortolani, y el cuarto era Licio Gelli". Se lo repitió el 2 de febrero de 1989 a Michele Santoro en el programa de televisión Samarcanda: "Mi marido me dijo que por encima de Gelli y Ortolani estaban Andreotti y Cosentino".

Por tanto, no erala última pieza del escudo cruzado.

Además, su nombre fue señalado con un marcador amarillo en la lista de 962 nombres (conocidos) de miembros de la Logia P2, junto con los de Licio Gelli, Michele Sindona, Roberto Calvi y Silvio Berlusconi.

Y además, el nombre Cosentino aparece también en los diarios de otro miembro, el director de 'OP' Mino Pecorelli, que anotó sus nombramientos: "Costa-Berlusconi-Licio-Gregori-Cosentino" (5 de septiembre de 1977): "Berlusconi-Cosentino" (16 de octubre de 1977); "Cosentino-Berlusconi-Montedison" (27 de octubre de 1977).

Delicados equilibrios de poder

El hijo del general, Nando dalla Chiesa, nos dijo el año pasado que su padre fue asesinado porque había un partido (la Democracia Cristiana) que "trataba de salvar el equilibrio nacional". Los jueces Giovanni Falcone y Paolo Borsellino también hablaron de política en relación con el crimen, refiriéndose a una matriz resultante de una "convergencia de intereses entre Cosa Nostra y sectores políticos y económicos".

Una pieza fundamental, la política, que hace sentir todo su peso el 5 de abril de 1982: ese día -pocos días antes de partir hacia Sicilia para dirigir la prefectura- dalla Chiesa se reunió con el Primer Ministro Giulio Andreotti y le dijo: "No tendré consideración por esa parte del electorado de la cual sus grandes electores se aprocechan".

Lo cuenta su hijo, Nando dalla Chiesa, en el libro "Delitto Imperfetto". "Mi padre nos dijo después de esa conversación: 'Fui a ver a Andreotti y cuando le conté todo lo que se decía de su gente en Sicilia se puso blanco'".

¿Fue en ese momento que el General firmó su sentencia de muerte?

El general, que ya había luchado contra el terrorismo rojo, seguramente no se habría detenido. Habría cumplido con su deber contra Cosa Nostra, investigando a fondo los vínculos que la organización criminal llevaba a cabo con otros segmentos del poder, desde la economía hasta los segmentos desviados de la política.

Esta última, recordemos, estaba en manos de los democristianos de Andreotti, a los que el prefecto dalla Chiesa definió como "la familia política más contaminada". "Aunque parezca absurdo hasta ese momento gozaba de la máxima confianza del gobierno y del propio Andreotti", recordó el magistrado de Catania, Sebastiano Ardita. Pero luego, después de esa reunión con el Primer Ministro, los miembros de la DC le declararon la guerra porque dalla Chiesa había entendido que la fuerza de la mafia dependía de esas coberturas políticas. A pesar de ello, dalla Chiesa cumplió con su deber hasta el día de la masacre con los pocos medios legislativos y operativos que en ese momento poseía el Ejército, y que el General había pedido al Estado para luchar contra las organizaciones mafiosas en Sicilia. Herramientas que hoy, sólo después de su muerte, y la de decenas de otros servidores del Estado, posee el país.dallachiesa3

El desvío de las investigaciones

El largo camino para descubrir la verdad se caracterizó por el desvío de las investigaciones del criminal convicto Giuseppe Spinoni (cuyos gastos legales fueron financiados por los servicios secretos), que dirigió las pesquisas hacia criminales completamente ajenos y que luego fue condenado por calumnia.

Pero este es sólo uno de los elementos que caracterizaron a esta masacre estatal. Y siempre era el jefe de jefes, Totò Riina, quien habló de otros detalles como el robo de documentos del general.

"Ellos -dijo el jefe corleonés- cuando llegó el momento... de dalla Chiesa... lo hicieron, carajo, se la abrieron, le abrieron la caja fuerte... le quitaron todo". Y con ellos se refería a entornos externos a Cosa Nostra. ¿Los servicios secretos? Una posibilidad nada remota.

Se sabe que alguien entró en la casa del prefecto en Villa Pajno durante la noche del 3 al 4 de septiembre de 1982. Llegó a la caja fuerte y la vació.

De hecho, la mañana del 4 de septiembre, la familia de dalla Chiesa buscó la llave para abrir esa caja fuerte pero sin éxito. La llave no apareció hasta la tarde del 11 de septiembre, en el cajón de una secretaria. Sin embargo, cuando se abrió la caja fuerte, no quedaba nada en su interior excepto una caja (también vacía).

"Encontramos la llave de la caja fuerte en un estante -dijo en 2016 la hija del general, Simona dalla Chiesa- que no habíamos notado en nuestra investigación, no estaba allí antes. Y la caja fuerte estaba vacía. La desvergüenza que vimos fue una nueva herida para nosotros".

El maletín de cuero del general, sin embargo, fue encontrado en el 2013 en el sótano del tribunal de Palermo. Estaba vacía. Sin embargo, en el informe de inspección de la policía científica, conservado en el expediente judicial sobre la masacre de Via Carini, se certifica que poco después de las 21.30 horas del 3 de septiembre de 1982, Carlo Alberto dalla Chiesa (muerto ya desde hacía quince minutos en el interior de su coche) tenía entre sus piernas un maletín lleno de papeles. En otro informe, fechado el 6 de septiembre, de la Escuadra Móvil de Palermo a la Fiscalía de la República de Palermo, que solo menciona el maletín del general. ¿Y los documentos? Desaparecieron en el aire.

En un vídeo de la RAI, incorporado por los magistrados de la DIA (Dirección de Investigaciones Antimafia), a disposición de la Fiscalía de Palermo, el maletín de cuero fue inmortalizado en las manos de un militar del Arma de Carabineros.

En septiembre del 2012, en una carta anónima que llegó al entonces fiscal adjunto Nino Di Matteo, se decía que "un oficial de Carabineros en servicio en Palermo estaba preocupado por haber robado el maletín de cuero marrón que contenía documentos candentes, sobre todo nombres candentes relativos a investigaciones que dalla Chiesa estaba tratando de realizar por sí solo". Además, se habló de una oficina reservada que el general Dalla Chiesa habría tenido en el cuartel de Piazza Verdi, sede del comando provincial de los Carabineros: "Estaba situada frente a la unidad de mando de Rono y allí había carpetas, notas y mensajes". La fiscalía de Palermo, a través de los fiscales que investigaban sobre la Tratativa Estado-mafia, reabrieron ese expediente y citaron a Nando dalla Chiesa como testigo. Hasta hoy de aquella investigación no se supo nada, pero numerosas preguntas permanecen abiertas.dallachiesa4

A pesar del tiempo transcurrido, no podemos dejar de esperar que se encuentre una verdad completa sobre la muerte del general dalla Chiesa, verdadero padre de nuestra patria.

Necesitamos descubrir a quién le fue útil la eliminación del general. ¿A quién le hizo Cosa Nostra ese 'favor'? ¿Qué obtuvo de todo ello? ¿Qué le prometieron las 'mentes refinadísimas' a la 'Cúpula'?

El trabajo de difamar

Carlo Alberto dalla Chiesa no fue dejado en paz ni siquiera después de su muerte, hasta el punto de que se orquestó una campaña para manchar su nombre.

Es una historia que tiene raíces antiguas. En otoño de 1976, el comandante general del ejército, Enrico Mino, informó al general de que en febrero de 1977 él también tendría que abandonar el mando de brigada de Turín y que tendría que permanecer "disponible" durante algún tiempo. Una manera tan buena como cualquier otra de decir "estacionado". El epílogo de esta historia concluyó en el otoño de 1976 con la firma de Carlo Alberto dalla Chiesa en una solicitud de ingreso en la P2, ofrecida "expertamente" por Franco Picchiotti, general de Carabineros y comandante de la Legión de Roma. Fue él, también según el propio testimonio de dalla Chiesa, quien le ofreció aquel 'bocado envenenado'. "En octubre de 1976 -dijo el General el 23 de febrero de 1982 ante la comisión de investigación del caso Moro- recibí en mi despacho de Turín al general Picchiotti, que había sido subcomandante de la fuerza, y me habló de esta masonería, diciéndome que lo correcto era que yo formara parte de ella. Obviamente me resistí, diciendo que no me interesaba, que mi padre siempre había estado alejado de estos conceptos, pero insistió, entonces le dije que yo era católico practicante y él me dijo que también había cardenales involucrados. Al cabo de hora y media se fue sin que yo hiciera el más mínimo gesto de asentimiento. Después de unos quince días, alrededor del 28 de octubre, volvió a traerme la solicitud impresa. Entonces en ese momento me dije a mí mismo que quería ver hasta dónde llegábamos. ¡Era impensable que después de haber rechazado tan resueltamente un argumento, un ex subcomandante de la fuerza se presentara con un pedido así!". La solicitud estaba fechada el 28 de octubre de 1976. Fue encontrada más de cuatro años después, durante la búsqueda llevada a cabo. en el despacho de Licio Gelli en Castiglione Fibocchi, guardado en la caja fuerte del despacho, en una carpeta titulada "suspendido".

La pertenencia del general a la Logia P2, de hecho, nunca fue verificada en ninguno de los dos órganos competentes: ni por la Comisión Parlamentaria de la P2 ni por los jueces Gherardo Colombo y Giuliano Turone.

¿Carlo Alberto dalla Chiesa fue asesinado por la mafia?

Es cierto que Cosa Nostra hizo su parte. Pero quizás, 42 años después, haya llegado el momento de decir que fue asesinado por el Estado-Mafia y la Mafia-Estado. Sicilia e Italia ya no son lo que eran entonces y en Palermo queda un recuerdo muy pálido de Carlo Alberto dalla Chiesa pero no hay que dejar de buscar esas "mentes refinadísimas" de las que hablaba Giovanni Falcone, que siempre están presentes detrás de los crímenes "híbridos" de nuestra República.

*Foto de Portada: Antimafia Duemila

*Foto 2: El lugar del asesinato del prefecto Carlo Alberto dalla Chiesa, junto con su esposa Emanuela Setti Carraro y el agente de custodia Domenico Russo © Franco Zecchin

*Foto 3: Paolo Borsellino y Giovanni Falcone © Shobha

*Foto 4:Giulio Andreotti © Shobha

Entrevista al histórico abogado de los arrepentidos (Segunda parte)

Después de haber abordado, en la primera parte de la entrevista con el director de ANTIMAFIADuemila Giorgio Bongiovanni, las graves cuestiones del vaciamiento de la ley sobre los colaboradores de justicia, el histórico abogado de Tommaso Buscetta, Totuccio Contorno, Giovanni Brusca (y otros), habla de otros temas.

A pesar de las transformaciones, todavía hoy existe una mafia que controla los territorios.

Así, el abogado habla de las masacres de los años noventa, de las convergencias de intereses sobre diversos crímenes que han atravesado la historia de nuestro país y de la presencia de autores intelectuales externos, para una búsqueda de la verdad que aún no es completa.

"Creo que la palabra antimafia da urticaria a algunas personas, en el sentido de que no pueden soportarlo -responde el abogado- la paz mafiosa también significa esto: basta de leyes especiales, basta de doble vía para los hechos de la mafia, basta ya de la doble vía procesal".

Luego llega a una amarga conclusión: "Hay un Estado, o una parte del Estado, comprometido con esta realidad (la mafia). Todavía hoy comprometido. No nos hemos liberado de este condicionamiento mafioso que nos afecta. La gente no se da cuenta. La sociedad está contaminada por esta presencia".