Narcotraficantes operando tranquilamente en una amplia zona del departamento de Canindeyú (algunos de ellos vinculados a integrantes del sistema político paraguayo), una notoria ausencia de autoridades y de ciudadanos de la ciudad de Curuguaty en el acto central del 16 de octubre de este 2016 (al cumplirse dos años de los asesinatos del periodista Pablo Medina y de su asistente Antonia Almada) y una airada disconformidad de la sociedad civil paraguaya: por el hecho de que aún está en suspenso el juicio oral a Vilmar “Neneco” Acosta (sindicado como autor intelectual del doble crimen) , de que aún se aguarda la extradición del Brasil de Flavio Acosta (sindicado como autor material del doble atentado) y de que aún permanece prófugo Wilson Acosta (otro de los sujetos sindicados como autor material del doble crimen), son algunos de los aspectos que más sobresalieron durante la movilizaciones que se realizaron tanto en la ciudad de Curuguaty como en Asunción, capital del Paraguay, entre los días 15 y 17 de octubre.
Bajo un sol abrazador con una marca de 45 grados de temperatura ambiente, en la plaza de Curuguaty (una de las principales ciudades del departamento de Canindeyú al noroeste de la capital paraguaya) se llevó a cabo el acto de homenaje al colega Pablo Medina Velázquez y a su asistente Antonia Almada Chamorro. Homenaje convocado por la redacción paraguaya de Antimafia Dos Mil.
Bajo un tinglado instalado por los organizadores en una de las alas de la plaza denominada “34 Curuguateños” y bajo la sombra de los árboles del lugar estuvimos presentes representando a la revista Antimafia Duemila, de Italia y en particular a su director y fundador Giorgio Bongiovanni. Presentes codo a codo con todos los familiares de nuestro amigo y redactor Pablo Medina. Entre ellos su padre, sus hermanos, sus tres hijos, su esposa Olga y otros integrantes del grupo familiar. Presentes codo a codo con todos los integrantes de la redacción Antimafia Dos Mil Paraguay: Jorge Figueredo, director; y redactores Omar Cristaldo y Félix Vera. Presentes codo a codo con amigos y vecinos del periodista asesinado, los cuales colaboraron en todas las etapas de organización del gran homenaje, que además contó con la presencia de un camarógrafo de un medio local y los corresponsales de los diarios ABC Color y Ultima Hora de Asunción, Alberto Núñez Barreto y Elías Cabral respectivamente, en su tarea de cobertura del evento. Un evento al que también acudieron expresamente desde Argentina los periodistas , Matias Gufantti y Ramiro Cardozo, de la ciudad de Rosario; y Raúl Blázquez y Alejandro Díaz, de Córdoba. Sumándose igualmente al acto el colega de la radio Comunitaria Popular de Canindeyú, Ramón Ruiz, excusándose de estar presentes por razones de fuerza mayor el senador Arnaldo Giuzzio, la abogada Catia González de la Coordinadora de Abogados del Paraguay y el colega Santiago Ortíz del Sindicato de Periodistas del Paraguay.
¿Y las autoridades locales?. Ausentes. Y ausentes sin aviso. Simplemente ausentes. Una ausencia muy notoria. Una ausencia que pone en relieve de que esa ciudad: Curuguaty , está dominada literalmente por el narcotráfico y que los políticos locales (por su ausencia, aclaremos) parecerían adherirse a los narcos de la región. A esos personajes que regenteando plantaciones de marihuana clandestinas en la región, comercios, hoteles, restaurantes, casas de cambio y bancos (en número desproporcionado con la densidad de población) intimidan sutilmente a sus trabajadores a no participar de movilizaciones , que en definitiva hablan mal del sistema mafioso imperante, y que campea (sin mordaza alguna) en toda la región.
¿Y los políticos?. Su ausencia nos dio vergüenza ajena. Una ausencia descarada que nos hizo ver con nitidez alarmante la fuerte ascendencia en la zona del poder sustentado en el delito y en la corrupción. Una ausencia que reiteradamente fue destacada por la mayoría de los oradores en el acto.
¿Y los curuguateños? También estuvieron ausentes. Una ausencia que pone en evidencia que la población está sumida en la indiferencia (¿o condicionada por el miedo?) ante todo acto o movilización civil antinarco, y como en este caso ante un sentido homenaje a Pablo Medina y Antonia Almada. Una ausencia ciudadana que no fue obstáculo para que cada uno de los oradores se expresaran libremente levantando el dedo acusador sobre el poderoso criminal, que se pasea por las calles de su ciudad natal cubriendo su rostro con lentes oscuros, luciendo llamativos gorros deportivos y circulando en vehículos de alta gama, quizás para materializar furtivos encuentros de negocios (o para conspirar) con señores de saco y corbata allende las fronteras de sus tierras y de sus residencias.
Ausencias de por medio, el espíritu del homenaje no se resintió, y por el contrario, además de fortalecerlo, se mantuvo incólume y se centró exclusivamente en un generalizado sentimiento de repudio a la narco política por parte de todos quienes dijeron presente durante la calurosa mañana del día 16 de octubre que pasó.
Jorge Figueredo (Fiscal y periodista director de Antimafia Dos Mil redacción Paraguay) dijo en la apertura del acto:” Este acto tiene como propósito no solamente recordar a Pablo Medina y a Antonia Almada una vez al año y que todo termine allí. Este acto tiene como objetivo despertar la conciencia de cada una de las personas del pueblo de Curuguaty y de todo el país, para que cada uno de nosotros seamos protagonistas del cambio que este país necesita. Tiene como propósito que cada uno de nosotros tomemos el compromiso de imitar a Pablo Medina. Así como Pablo Medina denunciaba la corrupción, el crimen organizado, a la mafia, también los ciudadanos debemos tomar el compromiso de seguir su camino. Solo así realmente estaremos reivindicando al periodista, al amigo, al hermano, al ciudadano, al compatriota, al hombre universal Pablo Medina. Si así no lo hacemos estaremos siendo hipócritas, no verdaderos, y falsos. Debemos ir más allá de las palabras y en las acciones, con nuestros actos cotidianos, seguir el camino que Pablo Medina siguió. Allí estaremos realmente reivindicando a Pablo Medina. Porque Pablo Medina no pertenece ya solamente a su familia, no pertenece más solamente a Paraguay, no pertenece más solamente al pueblo sudamericano. Pablo Medina hoy pertenece a toda la humanidad. Porque Pablo Medina es un mártir, como muchos otros a lo largo de la historia. Martin Luther King, Ghandi, Kennedy, Juan el Bautista y el más importante de todos: Jesucristo, el primer mártir de nuestra historia. Todos ellos han dado la vida por la verdad y la justicia. Y hoy queremos recordarlos, no solamente con nuestras palabras. Querría que cada uno de nosotros nos comprometamos a luchar cotidianamente por la verdad y la justicia”
La intervención del Director y fundador de la revista Antimafia Duemila, Giorgio Bongiovanni, vía skype desde Italia, resultó sumamente significativa, tomando en cuenta que Pablo Medina fuera un colaborador suyo desde el año 2005, momento en que el periodista asesinado se encontró con él en la ciudad de Asunción, para informarle sobre la muerte de su hermano Salvador.
“Para mi hoy es un día inolvidable –comenzó diciendo Bongiovanni. Me emociona recordar a Pablo Medina, amigo nuestro fraterno. Nuestro colaborador de la revista Antimafia, periodista íntegro, incorruptible, honesto. Investigador y periodista que buscaba la verdad y que a menudo la encontraba. La verdad de la alianza entre la mafia, el narcotráfico y los poderes que están dentro del Paraguay. Recordar a Pablo es justo. Recordar juntos quien era. Hacer una manifestación espiritual profunda. Nosotros tenemos que recordar a Pablo Medina pero también nos toca la obligación de buscar la verdad de quien mató realmente a Pablo Medina. El personaje que está preso, “Neneco” Acosta, el supuesto autor intelectual del delito de Pablo y de Antonia está preso y negó todo. Obviamente es un mentiroso, porque las evidencias judiciales hasta este momento demuestran que la muerte de Pablo la pidió él. Pero él es un títere, un payaso, un personaje, uno de los muchos, lamentablemente, narcos que hay en Paraguay y en el Cono Sur, en Sudamérica, al servicio de personajes potentes. Me habría gustado que el Presidente de la República paraguaya Horacio Cartes fuera ahí a dar su testimonio, pero no está. Me habría gustado que el jefe, el capo del diario donde trabajaba Pablo estuviera ahí, y no está. El ministro de la justicia, creo que hay senadores y diputados honestos, que recuerdan a Pablo, pero no es suficiente. Recordar a Pablo lo tendría que hacer el Presidente de la República e indicar y señalarnos quienes son adentro del estado paraguayo los narcotraficantes millonarios. ¿Dónde están las investigaciones de la policía antinarcos ?¿ Qué están haciendo, dónde está el dinero, los millones y cientos de millones de dólares que se lavan ahí? ¿Quiénes son los mafiosos italianos que compran la droga de Paraguay para hacerla llegar a Italia y a los Estados Unidos? ¿Qué hace la inteligencia de Paraguay para descubrir esto? Si no es así tenemos que tener dudas que la inteligencia, y hasta el Presidente de la Republica están involucrados. A mí no me gustaría pensar así. Pero si ellos no aparecen y no dicen nada y Paraguay sigue siendo un país narcotraficante, significa que periodistas como Pablo Medina mueren, morirán y seguirán muriendo. Entonces querido Jorge, tú eres un funcionario del Estado que yo respeto mucho. Ese Estado de Paraguay que nos hace vibrar, aquel Estado de Paraguay que promete esperanza y justicia para el pueblo paraguayo. Y en ti Jorge y en otros pocos senadores y diputados veo el verdadero Paraguay, pero la cúpula mafiosa del poder paraguayo, antes o después el pueblo la tiene que desenmascarar.El pueblo tiene que hacer una revolución, sacar desde la cumbre del poder a estos mafiosos, porque la muerte de Pablo Medina la quisieron los grandes funcionarios del Estado que están involucrados en el narcotráfico. Porque Pablo llegaba hasta ellos. Pablo no denunció solamente a” Neneco” Acosta, un títere, un estúpido, un charlatán, farsante de la delincuencia. Pablo llegaba y miraba a niveles altos en el narcotráfico paraguayo. Los personajes como” Neneco” Acosta son amas de llave de los grandes narcos. Y me da pena el mismo” Neneco” que miente. Tiene que mentir, porque si no lo matan. Si él da nombres dura un día dentro de la cárcel. Entonces no tenemos que esperar nada de” Neneco”, querido Jorge, tenemos que pedir, gritar, denunciar al Estado, a los hombres del Estado del Paraguay, a los grandes jefes de las televisiones paraguayas, los grandes jefes del periodismo paraguayo que se callan y no hablan. Entonces gritaré mientras tenga vida, y cuando la providencia me dé la oportunidad, no soy un cobarde, estoy hablando desde Italia ahora, pero las mismas cosas se las voy a decir en la cara a los jefes del Estado paraguayo, todo lo que pienso. Y se lo voy a decir en Paraguay, porque yo no tengo miedo a la muerte. Pero es muy difícil tocar a un italiano, sobre todo si viene de Sicilia, es decir, sobre todo si se siente discípulo de nuestros mártires como Falcone y Borsellino. Entonces Jorge, recordar a Pablo para mí es buscar la verdad, encontrarla, desenmascarar a los anticristos que están en la cúpula del Estado paraguayo, los que quisieron la muerte de Pablo. Esto para mí es recordarlo, si no significa seguir matando a Pablo, burlarse de su martirio. Entonces gritamos: Libertad a Paraguay, que el pueblo se levante y busque la verdad. Y busque la verdad. A la familia Medina le prometo: mis ojos no se van a cerrar antes de que encuentre la verdad sobre vuestro amado Pablo y sus hermanos. Yo sé quiénes lo mataron, yo sé los nombres y los apellidos, estoy buscando las últimas pruebas para desenmascararlos delante del pueblo paraguayo. Esto se lo prometo delante de Dios. Gracias.”
De entre filas de la familia Medina, Francisco, hermano de Pablo destacó: ”Estoy muy triste, ya han pasado dos años y hasta ahora no vemos todavía a un autor intelectual sentenciado, no vemos todavía a los autores materiales sentenciados. Y estoy muy triste por otra cosa, estoy aún más triste porque brillan por su ausencia las autoridades locales acá en Curuguaty. No hay ni un solo representante acá donde estamos nosotros luchando por una causa justa, estamos luchando por Pablo Medina, por lo que él hizo aquí en Curuaguaty y por todo nuestro querido Paraguay. Brilla por su ausencia la sociedad civil ¿dónde está la sociedad civil acá? Debería acompañarnos en esta difícil circunstancia que estamos pasando. Si nosotros permitimos eso y lo seguimos permitiendo y no luchamos, porque una sola golondrina no hace primavera, yo puedo luchar y voy a seguir luchando. la familia Medina Velázquez sigue luchando. Vamos a seguir luchando, pero necesitamos el apoyo también de los colegas ¿Dónde están los colegas de Pablo, acá? Yo hubiera querido verlos vestidos de amarillo acá, apoyándolo y pidiendo justicia para Pablo”
n un tramo posterior de su oratoria, Francisco Medina informó públicamente que la Red Internacional de Derechos Humanos por la Libertad de Expresión lo acompañó luego de que se derivara una queja muy precisa por el caso de Pablo Medina a más de 30 representantes de países hermanos.
“Y ellos sí nos han escuchado atentamente. Escucharon nuestras quejas y tan es así que para nosotros fue todo un éxito porque gracias a ellos Paraguay ha recibido nueve recomendaciones que están directamente relacionadas con la libertad de expresión y crímenes contra periodistas. Quiero recalcar las 9 recomendaciones que recibió Paraguay y espero que el Ejecutivo cumpla y que no sea una mera promesa, quiero leer de las 9 recomendaciones que recibió Paraguay. La número uno dice: combatir la impunidad, enjuiciar a los responsables y garantizar el derecho a las víctimas, aún de curso efectivo en el caso de los periodistas. Recomendación de Austria, y Paraguay lo aceptó. La recomendación de Canadá dice: combatir la impunidad de todos los ataques contra defensores de derechos humanos , mediante la investigación de los asesinatos de 17 periodistas ocurridos desde el año 1991 que aún no han sido esclarecidos, ni sus responsables enjuiciados y sentenciados. Y esto es muy importante, y tenemos que presionar y estamos luchando para que se cumpla esto, que se establezca una comisión especial en la oficina del Ministerio Público para llevar adelante a los responsables ante la justicia como lo pide Canadá. Y vamos a luchar para que eso se cumpla. Que se cree una comisión especial dentro de la fiscalía, que trabaje exclusivamente en los asesinatos de los 17 periodistas que han acaecido hasta ahora. Otra recomendación recibida es de Italia: adoptar medidas eficaces para investigar a fondo los ataques contra periodistas y defensores de derechos humanos, para garantizar que todos los responsables sean llevados ante la justicia. La recomendación del Líbano dice: Mejorar las leyes que fomenten la libertad de expresión. Grecia dio una recomendación muy importante, que estamos luchando para que se cumpla: Proteger aún más la libertad de expresión y perseguir los delitos contra periodistas como asuntos de prioridad. Recomendación de Noruega: crear y mantener un entorno seguro y propicio para los periodistas para que puedan llevar a cabo su trabajo legítimo sin amenazas de violencia en represalia. La recomendación de Costa Rica es implementar medidas para proteger a los periodistas así como las políticas eficaces para garantizar la libertad de expresión en Paraguay. Y por último, la de los Estados Unidos de América: establecer una mayor protección para los periodistas amenazados y garantizar con prontitud investigaciones de amenaza de hostigamiento y crímenes contra periodistas. Entonces queridos hermanos les agradezco infinitamente a todos ustedes que ponen sus pechos acá, porque el temor no nos conduce a nada, la cobardía no nos va a conducir a ningún puerto, va a ser fácil matar a otro periodista si en este caso no llegamos a la máxima justicia. Y aunque para nosotros la máxima justicia no va existir nunca, por lo menos ante la vista de la ciudadanía, ante la vista del pueblo, ojala que se llegue a la justicia” explicó públicamente Francisco Medina.
Una muy reconocida figura del ambiente jurídico paraguayo, la doctora Catia González, presidenta de la Coordinadora de Abogados del Paraguay, cuya participación en el homenaje estaba prevista, y viendo que le resultaba imposible viajar a Curuguaty desde la capital, envió una muy valiosa adhesión que Jorge Figueredo, como moderador del evento la hizo pública: ”Queridos compañeros de lucha y en especial a los hijos, sobrinos, parientes y compueblanos de Pablo Medina. La memoria del corazón elimina los malos recuerdos y magnifica los buenos, y gracias a ese artificio logramos sobrellevar el pasado. Es una frase que leí no recuerdo donde. Recordar a Pablo es mantener viva nuestra memoria colectiva, es intentar contra viento y marea la vigencia de su lucha contra el crimen organizado, la miserable mafia política que somete al Paraguay a la miseria de tener que mendigar siempre, de tener que mendigar todo, dignidad, derechos, seguridad, salud, educación, justicia. Hoy quiero recordar a ese Pablo Medina que nos enseñó a luchar con los medios que tenía a su alcance, su palabra, su escritura y su cámara. Hoy quiero interpelar al poder judicial, al ministerio público y a la policía nacional, porque desde hace dos años, poco y nada han hecho por protegernos de la corrupción e impunidad. Hoy quiero, a pesar de todo, celebrar este encuentro que nos permite abrazarnos, solidarizarnos y reafirmar nuestras convicciones e ideales en la búsqueda de un Paraguay con mayor justicia social. Gracias Pablo Medina, gracias Antonia Almada, un país sin justicia es un país que no tiene paz”
La dirigente campesina Ana Mujica (que conocía en profundidad al periodista asesinado y a su familia) subió al estrado y con la energía de una luchadora social por excelencia, sin mordazas y con la fuerza que ha ido cultivando en años de enfrentamientos con la corrupción y el poder, fue en extremo directa.
“No es fácil pararme delante de la familia que es mi amiga. Hace más de treinta años que nos conocemos. A Pablo lo conocimos desde que llegó a Curuguaty, y a mí me duele, me duele como mamá, como mujer, porque “ellos” no pensaron. Estos que se instalaron en el poder político, los que compran las bancas a base del dinero, así como dijo el señor de Italia. A base de dinero sucio que los narcos blanquean, no se respeta para nada a las personas. Aquí los candidatos número uno son los que tienen más dinero. Ellos ya saben quién va a ser número uno, quienes van a estar en las instituciones públicas. Y no respetan la profesión, se olvidan de la familia, se olvidan de que mamá y papá fueron quienes los encaminaron en el estudio. Pensé mucho anoche, sobre por qué estaba casi vacío nuestro salón parroquial (donde en la noche anterior se exhibió el documental “Pablo”) ¿Dónde está la juventud? ¿Y los docentes, los actores sociales?¿ Porque se hizo una invitación, se ha agotado la instancia correspondiente? Sabemos que la mayoría de los que llegaron a la institución pública desde la dictadura a la fecha se están apoderando de esas instituciones. Dicen que les pertenece. Ellos no dicen que la “institución está realizando” sino que “ellos” personifican. Ellos dicen que jubilamos a Alfonsito o a Cristina, porque se sienten los dueños. Sabemos que ellos nombran a sus funcionarios judiciales en el Estado para limpiarlos de culpa. Sabemos que este señor” Neneco” está diciendo lo que está diciendo para proteger a otros. Por eso dije que hay que comparar a Pablo con Lázaro, que resucitó. Su obra tiene que resucitar a través de un pedido de una comunidad. ¿Y quién recorrió junto a Jesús cuando vieron mal a Lázaro? La hermana. Cada uno de nosotros somos hermanas y hermanos de Pablo. Les agradezco muchísimo a ustedes por llevar adelante su recuerdo y el pedido de justicia, porque si vamos a seguir esperando algo de nuestras autoridades que tienen sueldo, y discúlpenme, tienen sueldo, coima, tienen viáticos, chofer, gasoil, vehículo y encima no asumen su rol, entonces compañero, compañera, ¿qué les pasará a nuestros hijos el día de mañana? No estamos creando una tierra firme para nuestros hijos. Nosotros no vinimos al mundo para jugar, vinimos a tomar compromisos, vinimos a asumir luchas, a querer un ambiente sano, un ambiente de familia, un ambiente de coherencia. Yo le agradezco mucho a mi organización nacional campesina ONAC. ¿Por qué le agradezco? Porque me han enseñado a curar mi carácter, a interesarme más por el prójimo. Muchas gracias y mucho ánimo que cada día esto se vaya alimentando más, y más, y más. Te queremos Pablo, Olga, hija, papá, hermano, cada uno de ustedes. Alimenten mucho su Fe, porque la Fe es lo único que nos mantiene y vamos a cuidar las plantas que nos quedan.”.
Uno de los comunicadores locales, Ramón Ruiz, de la Radio Comunitaria Popular Canindeyú fue invitado a subir al estrado. Aunque escueto, fue igualmente directo:” Somos pocos pero las que están son personas especiales que no van a retroceder. Jorge me vio y me llamó, yo no estaba en la lista de oradores, en principio lo que quiero decir es que Radio Popular, la radio comunitaria, se pone firme al lado de Pablo. La radio está extendiendo por todos lados, en todos sus filiales esto que estamos haciendo acá, lo que solicitamos, nuestra preocupación. Es importante lo que estamos haciendo, y los que nos escuchan nos apoyan desde sus casas. Radio Comunitaria está expandiendo toda nuestra preocupación, todo nuestro deseo de justicia por Pablo, lo cual estamos manifestando acá en esta plaza. Por eso me subí y eso es lo que les quería decir a ustedes, nuestra preocupación y lo que Radio Comunitaria está haciendo junto a Antimafia Dos Mil.”
Los periodistas extranjeros presentes tuvieron su momento para la expresión. Raúl Blázquez, de Córdoba, Argentina dijo: ”La verdad, después de haber escuchado a Ana quiero decir que siempre vamos a estar con Pablo, que siempre vamos a seguir denunciando la narco-política, y no se olviden que en Argentina también tenemos un gobierno mafioso que aplica la economía base de la mafia, que es la economía liberal de mercado. Estoy con ustedes y voy a seguir estando. Mi decisión, la decisión de alguien que sigue a Cristo, es única. Y es dar, no la vida, porque la vida es otra cosa, es entregar el cuerpo, porque la vida sigue. No se olviden que la vida es eterna. Mi más profundo respeto a todos los paraguayos y mi dolor y mi sufrimiento por lo que está pasando aquí y por lo que está pasando en Argentina. Repito, una economía a la que no le importa los niños, el hambre, la miseria, la desocupación. Una economía mafiosa, pero vamos a seguir luchando”
Por su parte, el periodista Matias Guffanti, de Rosario, Argentina hizo su aporte desde una visión del periodismo joven refiriéndose al crimen organizado actual, instalado en el Paraguay y en otros países del mundo. Enfáticamente dijo: “Me enorgullece que Paraguay, vecino de Argentina, pueda manifestarse en contra del narcotráfico y en contra de las mafias, a favor de los justos, a favor de Pablo medina, y al apoyarlo a él apoyando a todos los que mueren por la justicia y por la verdad. Me gustaría que cada vez seamos más los que intentamos luchar en contra de las mafias, que cada vez sean más los jóvenes que buscan la verdad, porque lo que estamos haciendo hoy es decidir nuestro futuro. La lucha que hoy estamos haciendo acá define el futuro que los jóvenes vamos a tener. Lo que los adultos están haciendo define el futuro que sus hijos y sus nietos van a tener. Por lo tanto no tenemos que quedarnos callados. Tenemos que denunciar, tenemos que hablar, tenemos que salir a protestar, dar la cara, porque si hay algo que los narcotraficantes y las mafias quieren es que tengamos miedo y nos quedemos callados. Pero cuando hablamos, cuando decimos la verdad, cuando luchamos, son ellos quienes tienen miedo. Porque el pueblo es más fuerte que todos ellos juntos y, unidos, podemos hacerlos desaparecer de nuestra sociedad. Nosotros tenemos la fuerza para enfrentar al narcotráfico y sacarlo completamente del Estado. Esto es algo que está pasando en Paraguay, que está pasando en Argentina, que está pasando en Uruguay, en toda Sudamérica y en el mundo entero. Por lo tanto les agradezco a todos, le agradezco a la familia de Pablo Medina de la cual estoy muy orgulloso por la forma en que sigue luchando por sus hijos, y también le agradezco al pueblo paraguayo que poco a poco empieza a manifestarse, que poco a poco empieza a enfrentarse a esta problemática que afecta no solo a Paraguay sino a la humanidad toda y en especial a Sudamérica, nuestra patria grande, por la cual nosotros los jóvenes queremos luchar, porque queremos un futuro totalmente diferente”
Uno de los redactores de la redacción de Antimafia Dos Mil, Omar Cristaldo puntualizó: “Es un día muy especial para todos nosotros recordando el segundo año del cruel asesinato de nuestro hermano y amigo Pablo Medina que con su vida entregó y demostró que su ideal de justicia es lo que debe reinar en nuestros corazones y lo que nos debe hacer caminar por todas las calles de todas las ciudades para solicitar y manifestar y pedir justicia. El, lo único que trataba de darnos a comprender a nosotros como sociedad, es que detrás de la apariencia de la sociedad, de lo bueno que aparentemente vivimos, alguna parte de esa sociedad corrupta tiene el dominio, por el caudal de dinero que genera el narcotráfico, destruyendo la mente y la conciencia de la gente, ¿Cuánta gente hoy está siendo drogada? No solamente en Paraguay sino, en todo el mundo. Ellos vienen a contar sufrimiento y dolor de muchas familias y si nosotros, como decía el amigo y hermano Matías de Argentina, como joven hoy, si no nos ponemos hoy a sembrar con esta lucha, con este pedido de justicia, no podrán los jóvenes tener un futuro, un futuro bueno, un futuro honesto y transparente, y nosotros los más viejos no le podríamos dar, sin esta lucha a nuestros hijos, también ese mismo futuro, de honestidad, de transparencia, de felicidad, porque hoy vivimos en este país, en este planeta de horror, de sufrimiento. Porque la corrupción, la impunidad, se imponen por encima de los valores de la justicia, de la paz y del amor. Los invitamos a luchar, más allá de esta vida hay otra vida, que nos prometieron si luchamos por la justicia, eso entendió Pablo y muchos otros santos que han dado la vida por darnos a entender la verdad. Les agradecemos infinitamente su presencia y que pueda servir esto como impulso a seguir luchando por la verdad, por la justicia y que así podamos vivir en paz y en amor”.
Tal como estaba previsto, también nos tocó a nosotros expresarnos en este acto que marca a fuego, verdaderamente, allí en el Paraguay, en Curuguaty y adyacencias, la esencia de una lucha anti criminal que no debe conocer fronteras. Fue así que dijimos:” El pueblo de Curuguaty se debate entre la necesidad de trabajar y la libertad de conciencia. El pueblo de Curuguaty se debate entre la impunidad y el derramamiento de sangre y la lucha por la verdad y la justicia. El pueblo de Curuguaty se debate entre la indiferencia, el silencio, la omertà y el grito de lucha y combate contra el sistema mafioso que está enquistado e instalado en esta ciudad y en toda la región de frontera seca con el Brasil. Alguien dijo por ahí que esta plaza debería estar llena. Sí, esta plaza debería estar llena sin necesidad de que nosotros convoquemos a un homenaje. El homenaje de este pueblo debería ser espontáneo. El homenaje de este pueblo a Antonia Almada y a Pablo Medina debería ser sin convocatorias, debería ser un homenaje de 365 días al año.Los pueblos se movilizan cuando tienen conciencia. Los pueblos se movilizan cuando no hay ignorancia. Los pueblos se movilizan cuando hay educación. Cuando la impunidad campea, somos rehenes de nuestros miedos, vivimos condicionados por nuestros miedos, vivimos condicionados por el sistema financiero, porque tenemos miedo de perder el trabajo, de perder nuestra calidad de vida, de perder nuestros placeres, nuestros gustos. Yo pregunto por los 17 periodistas que fueron asesinado en el Paraguay ¿Ellos no se preocuparon de todos esos miedos?. Recordemos las expresiones de Santiago Leguizamón, el día que lo asesinaron, en Pedro Juan Caballero. Él no tenía miedo, él hablaba de una muerte física y de una muerte moral. Él tenía miedo a la muerte moral, no le importaba la muerte física . Hermanos y compañeros, somos periodistas, como todos mis compañeros de Antimafia de Argentina, de Paraguay, de Italia y de Chile. Todos los periodistas deberían estar unidos, y estar aquí presentes. Toda esta platea llena de colegas con la foto de Pablo Medina y una palabra que diga, “luchemos por justicia”, por Pablo y por otros periodistas y por la justicia en el mundo, ¿o creemos que solamente acá en Curuguaty, en Paraguay se ha quebrado el concepto de justicia? No, el mundo vive muchas injusticias mientras estamos sentados acá bajo este sol maravilloso. Estamos acá vecinos y en el mar Mediterráneo hay gente que se muere ahogada, niños. En México, cuántas familias sufren por la desaparición de 42 normalistas. Sufren los familiares de un sacerdote que fue asesinado y que lo hicieron aparecer como ahorcado hace cuatro semanas en Tucumán, Argentina, porque dijo no al narcotráfico. Pensemos eso y díganselo a los ausentes cuando caminen mañana en las calles o en vuestros trabajos o en vuestros centros de concentración social en Curuguaty. Hablemos de eso, con transparencia, con honestidad a pesar de nuestras dificultades humanas. Gracias a los familiares de Pablo Medina porque con su valor nos están enseñando, con el sufrimiento de perder hijos, hermano y padres. Y sigamos adelante luchando porque bajo ningún concepto podemos hacernos los desentendidos.”
Y seamos sinceros, hacernos los desentendidos ( los ñembotavy, en guaraní ) ante estos dos crímenes (y ante los que le precedieron a la dictadura de Strosner) sería como hacernos cómplices de una impunidad repugnante y de una criminalidad descarada, y en marcada labor de deterioro de la democracia paraguaya y de la libertad del hombre.
No va con nosotros hacernos los ñembotavy.
*Foto de Portada: Francisco Medina-Antimafia Dos Mil*Foto 2: Una panorámica del acto central-Antimafia Dos Mil
*Foto 3: Fiscal Jorge Figueredo-Antimafia Dos Mil
*Foto 4: Ana Mujica-Antimafia Dos Mil
*Foto 5: Ramón Ruiz-Antimafia Dos Mil
*Foto 6: Raúl Blázquez-Antimafia Dos Mil
*Foto 7: Omar Cristaldo-Antimafia Dos Mil
*Foto 8: Matias Gufantti-Antimafia Dos Mil