Martes 12 Noviembre 2024

El homenaje a un delincuente convicto que le pagaba a la mafia

No bastaron el funeral de Estado, el duelo nacional, la estampilla conmemorativa, los documentales y los especiales engañosos emitidos en todas las cadenas. El aeropuerto internacional de Malpensa pronto llevará el nombre de Silvio Berlusconi. La noticia la hizo oficial el ministro de Infraestructuras, Matteo Salvini ("Justo hoy el consejo de administración del ENAC aprobó la solicitud de dar al aeropuerto de Malpensa el nombre de Silvio Berlusconi. Y como la última palabra la tiene el ministro de Transporte, creo que dará el visto bueno").

De hecho, mientras para calles, plazas y avenidas la ley prevé una espera de diez años, para los aeropuertos no existe ninguna restricción.

El camino está, por tanto, despejado para este "recuerdo indigno".

Sólo así se puede definir la dedicación de uno de los aeropuertos más importantes de Italia a un político condenado, repetidamente investigado y juzgado, que le pagaba a la mafia (las sentencias dicen que al menos hasta 1992) y que murió cuando aún era investigado por la Fiscalía de Florencia, junto al exsenador Marcello Dell'Utri, como instigador externo de las masacres de 1993.

Ahora bien, cualquiera que recuerde estos hechos es inmediatamente atacado.

Y es triste comprobar que, en un teatro del absurdo, incluso los hijos de las víctimas de la mafia participan en la distorsión de la realidad.

Una vez más es Rita Dalla Chiesa, a la que nos hemos dirigido varias veces, quien se convierte en protagonista atacando al director de Il Fatto Quotidiano, Marco Travaglio, culpable de haber escrito las siguientes palabras: "La nueva toponimia del aeropuerto permitirá a los extranjeros hacer escala en el "Berlusconi" y luego continuar, si se desea, hacia Palermo desembarcando en el "Falcone e Borsellino": primero el financista de las masacres, luego sus víctimas; ahora quedan otros aeropuertos por nombrar. Linate, en homenaje a la igualdad de condiciones, sería perfecto para Marcello Dell'Utri, exsenador y mano derecha de Berlusconi, condenado por concurso externo con la mafia, que entre otras cosas, despegó de allí el 24 de marzo del 2014 para escapar del arresto volando a París y luego a Beirut, el lugar elegido para su escondite. El aeropuerto de Ciampino le podría ir bien a Francesco Lollobrigida, por razones más ferroviarias que aeronáuticas, pero Pratica di Mare pertenece con razón a Chico Forti y a Giorgia Meloni, ex aequo".berlusca2

"Creo que no podemos permanecer en silencio ante un Travaglio que sigue llamando a nuestro presidente financiador de masacres -afirmó Dalla Chiesa- Entre las pseudo revelaciones de un falso arrepentido sobre Chico Forti y la ignominia de todo el barro que se vierte sobre Silvio Berlusconi, tal vez sería oportuno presentar una denuncia, esta vez muy grave, contra este personaje que nunca habría existido si nuestro presidente no hubiera existido también. Ya no sabe de qué hablar para quedarse en el centro de atención y lo ataca incluso ahora que ya no está aquí".

Algunas palabras duelen. Pero aún más indignante es el silencio de los más altos funcionarios del Estado. ¿Qué tiene que decir el jefe de Estado, Sergio Mattarella, que como familiar de una víctima de la mafia, debe comprender el motivo de tanta confusión? ¿Será posible que esta enésima "masacre" de la memoria no cause vergüenza?

Berlusconi no era sólo un empresario, sino una figura oscura.

Hay sentencias que hablan claro.

En 1974, como confirmó el Tribunal de Casación en el proceso contra su mano derecha, Marcello Dell'Utri, se demostró que Silvio Berlusconi se reunió con el jefe mafioso más autorizado de Palermo, Stefano Bontade, para pedirle protección en aquel histórico momento en que se producían los secuestros de personas. Cosa Nostra puso en su casa al "mozo de cuadra", el jefe de Porta Nuova, Vittorio Mangano, como garantía.

Es escandaloso que este empresario, que más tarde fue cuatro veces primer ministro, prefiriera recurrir a la mafia antes que al Estado.

Si Falcone y Borsellino hubieran seguido vivos, seguramente habrían investigado al ex primer ministro. Y para los que tengan dudas, recordamos la anotación de Falcone: "Cinà se lleva bien con Berlusconi. Berlusconi le da 20 millones a Grado y también a Vittorio Mangano".

No es aceptable el negacionismo de quienes evitan recordar ciertos hechos.

Decimos no al Estado traidor, fascista, amigo de los mafiosos y criminales y nos ponemos del lado de esos ciudadanos, más y menos jóvenes, trabajadores, hombres y mujeres que eligen no olvidar, que hacen ruido y creen que es posible un cambio.

*Foto de Portada: Reelaboración gráfica de Paolo Bassani

*Foto 2: Matteo Salvini y, de fondo, Silvio Berlusconi © Imagoeconomica