Viernes 6 Diciembre 2024

Cuando se hacen listas, se las debe hacer completas, o mejor es no hacerlas. A esta conclusión llegamos tras leer un artículo, esta mañana, en Il Foglio, titulado "La antimafia política", escrito por Riccardo Lo Verso.

Una pieza en la que se desempolva, hasta el cansancio, el tema de los "profesionales de la antimafia" que, según el autor, por ambición y por interés buscan "un tren a Bruselas" postulándose para las próximas elecciones europeas. Y Riccardo Lo Verso despliega una lista de nombres desde Leoluca Orlando hasta Sergio De Caprio (también conocido como el Capitán Ultimo), desde Sonia Alfano hasta Piera Aiello, desde Giuseppe Antoci hasta Caterina Chinnici.

Más allá de si las posiciones expresadas sobre cada nombre individual son agradables o no, quedamos literalmente asombrados por una ausencia notoria y pesada.

Porque no es posible evitar el nombre del fiscal adjunto del Tribunal de Apelaciones de Milán, Cuno Jakob Tarfusser, recién llegado a su candidatura en la lista "Acción" de Carlo Calenda.

Las listas -como dijimos al principio- se hacen completas o no se hacen.

Después de haber estado de baja sin goce de sueldo durante unos meses con colocación temporal fuera de funciones, quizás él también debería estar incluido en esta lista, sobre todo porque, en medio de sus deberes, Tarfusser decidió tratar con la mafia y la antimafia.

Como es sabido, la lista de "profesionales de la antimafia", como la define Lo Verso, es larga.

Y Tarfusser, en el pasado mes de diciembre, se convirtió en miembro de pleno derecho y por elección propia.

De hecho, habló en la presentación del último libro del abogado Basilio Milio, que también estuvo presente, junto con el periodista Filippo Facci, el profesor Giovanni Fiandaca (conectado a distancia), Mario Mori y Giuseppe De Donno.

En aquel momento, Tarfusser, magistrado en servicio permanente y efectivo, se había definido burlonamente como un ignorante en materia de mafia: "Conozco Sicilia sólo porque fui de vacaciones allí", bromeó.

Esto no le impidió defender al general Mori y atacar a los magistrados que lo habían llevado a juicio con frases un tanto despectivas: "Desde el primer momento dije que el problema del mal funcionamiento de la justicia es que hay algunos magistrados en libertad".

Tarfusser, como podemos ver, se abre paso entre los "profesionales de la antimafia", sin decirlo.

Aunque luego, tal vez al darse cuenta de que había hecho y dicho demasiado, interrogado por Il Fatto Quotidiano corrigió su punto diciendo que lo suyo "era una hipérbole", pero continuó reiterando que para él la investigación "fue y sigue siendo un engaño".

Opiniones fuertes.

Lo que, sin embargo, lo incluye de lleno en esa lista de "profesionales de la antimafia" de la que hablábamos antes, retomando la expresión muy colorista de Lo Verso.

Como si eso no hubiese sido suficiente, hace unos días fue aún más claro.

Cuando escuchó la noticia de que la Fiscalía de Florencia, sin pedirle permiso, había inscrito a Mori en el registro de investigados por las masacres del '93, de nuevo se le fue la mano.

No sólo fue la legítima "solidaridad con el general Mario Mori" por parte de un magistrado, "aunque con expectativas electorales", sino que también manifestó "el desdén y el desprecio hacia quienes continúan este vergonzoso ataque judicial a quien considero un caballero".

¿Entonces, esto cómo funciona?

¿Alfombras rojas en la política cuando se critica a los fiscales de Palermo y de Florencia hasta el insulto, porque son culpables de haber realizado investigaciones procesales sobre hechos que conciernen a nuestra República?

¿Y paladas de barro para aquellos ex magistrados que piensan diferente y en cambio apoyan la actividad de los fiscales?

Desde hace décadas se habla de "puertas giratorias" cuando los magistrados jubilados entran en política, pero Cuno Jakob Tarfusser pasa (si es elegido) de la magistratura a Bruselas en un nanosegundo, entre aplausos de los amigos del Foglio, de Mario Mori, del abogado Basilio Milio o del periodista Facci, porque pronunció las fatídicas palabras: "El verdadero crimen lo cometen quienes asocian el nombre de Mori a los crímenes que se le imputan".

Nos tomamos la libertad de recordar el nombre del estimado magistrado porque -en nuestra opinión- encajaría muy bien en la lista de Lo Verso.

Dios nos guarde de las leyes, que de los amigos me protejo solo.

*Foto de Portada: Diseño gráfico de Paolo Bassani