Domingo 8 Diciembre 2024
felicesTratativa, el bienio de los estragos analizado por la acusación

Por Giorgio Bongiovanni - 12 de enero del 2018

Hay noticias frescas en la acusación que los fiscales del pool de la tratativa Estado-mafia - Di Matteo, Teresi, Del Bene y Tartaglia - están presentando contra hombres del Estado y de Cosa Nostra, acusados unos al lado de los otros en el proceso de Palermo. La acusación de amenaza al cuerpo político del Estado, el hilo rojo que fuera detallado en las últimas audiencias (informadas por los colegas Baldo y Pettinari) se refiere a los contactos entre los personajes de las instituciones - indignos de ser representantes - y jefes mafiosos de primer nivel. Todo esto bajo la bandera de una tratativa que habría implicado el sacrificio extremo de nuestros mártires en Sicilia: Giovanni Falcone y Paolo Borsellino, junto con la esposa del primero, Francesca Morvillo, y los agentes de ambas escoltas, hasta la masacre de ciudadanos inocentes y de niños en los atentados realizados por todo el país.

Para la Corte d’Assise (Tribunal que en Italia juzga los delitos graves, ndt) presidida por Alfredo Montalto, será luego el momento de escuchar a las defensas, que intentarán de una vez por todas sacar a sus clientes de los problemas. Entre ellos se destaca la figura del ex general de ROS Mario Mori, personaje cuyo pasado en el SID, el antiguo servicio secreto militar, y su repentino alejamiento, ha sido objeto de investigación en este proceso. Varias veces "la falta de escrúpulos de Mori, siempre acostumbrado a moverse como un hombre de los servicios con desprecio de la autoridad judicial" fue citada ante el tribunal, haciéndose referencia al testimonio del coronel Giraudo. Circunstancia que destaca el fiscal Di Matteo junto con la enorme cantidad de declaraciones de arrepentidos, testimonios, escuchas telefónicas y correspondencia que confluyen en la tesis acusatoria de: la “tratativa política” entre el ROS y Cosa Nostra, la cuestión de Dell'Utri y Berlusconi, el papel de Massimo Ciancimino, cuya contribución debe ser “analizada y evaluada cuidadosamente” y no “prejudicialmente eliminada”. Pasando por las declaraciones de los funcionarios del Estado, como las palabras del honorable De Mita, y los “intercambios de favores entre la mafia, la P2, los servicios de inteligencia desviados y la masonería desviada” que, según el ex ministro Claudio Martelli, se llevaron a cabo después de su "defenestración" del Ministerio de Justicia.

A la espera de la sentencia, ya desde el trámite del proceso emerge la historia de un país fundado en magnicidios y acuerdos entre el Estado y la mafia, la sombra de los llamados instigadores externos y las alianzas que Cosa Nostra presume en altos niveles. Todas ideas que, cuando el juicio termine, no deberían quedarse para juntar polvo dentro de un cajón, sino convertirse en insumos para los abogados de Caltanissetta, Florencia y Roma, que, por competencia, pueden volver a partir desde aquí para arrojar luz sobre los verdaderos asesinos de Falcone y Borsellino y de todos los mártires que este Estado ha sacrificado.


Foto © Castolo Giannini