Por Antimafia Dos Mil-18 de junio de 2022
Jeanine Áñez, expresidenta de facto de Bolivia, fue condenada por el tribunal primero de sentencia de anticorrupción de La Paz a 10 años de cárcel. Por la causa titulada “golpe de Estado 2”. En dicha causa se la juzgo por los delitos de incumplimiento de deberes y resoluciones contrarias a la constitución boliviana y a sus leyes. La condena fue establecida el pasado viernes por la noche.
El proceso judicial
“Hice lo que tenía que hacer, asumí la presidencia por compromiso, asumí la presidencia de acuerdo a lo establecido en la Constitución, siguiendo cada uno de los pasos y respetando todo lo que dice; y me siento muy orgullosa, y lo volvería a hacer si tuviera la oportunidad; lo volvería a hacer porque para eso a nosotros nos eligen en el parlamento, para estar en las buenas y en las malas, para estar en situaciones de tranquilidad y situaciones de violencia, eso es tener compromiso”, afirmó la expresidenta Áñez.
El 28 de marzo se inició el proceso contra Áñez y otros ocho involucrados, culminando recientemente, y en la oportunidad Áñez sostuvo que lo “volvería a hacer” en referencia a los hechos ocurridos en noviembre de 2019, en el que, en medio de un golpe de Estado contra Evo Morales, se autoproclamo presidenta de Bolivia. En una Bolivia sumergida en un caótico escenario social. Y también volvió a insistir en su inocencia.
La exmandataria está detenida desde marzo del 2021, todo dentro del proceso llamado golpe de Estado 1. A instancias de la exlegisladora Lidia Patty, del movimiento al socialismo (MAS), acusada por la comisión de los delitos de terrorismo, sedición y conspiración.
La causa: golpe de Estado 2
Este juicio fue más dinámico administrativamente que el de “golpe de Estado 1”. Es el proceso en el cual se la condenó a 10 años de cárcel, por los delitos de incumplimiento de deberes y resoluciones contrarias a la Constitución boliviana y sus leyes. Obtuvo la condena por delitos anteriores a autoproclamarse presidenta.
Evo Morales (MAS) renunció a la máxima jerarquía ejecutiva de Bolivia el 10 de noviembre de 2019. En un escenario social colmado de protestas, denuncias de fraude electoral, las Fuerzas Armadas bolivianas que empujaban su renuncia e incluso un motín policial.
Luego, el 12 de noviembre de 2019, Áñez asumió la presidencia del Senado boliviano (antes era vicepresidenta de dicho órgano legislativo) y después se trepó a la Presidencia de la Nación. Cabe destacar que estos hechos se sucedieron sin quorum del Congreso y sin la asistencia de la mayoría del Senado (MAS). Este acontecimiento, diríamos más bien un mamarracho legal, fue calificado como golpe de Estado
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*Foto de portada: radio.uchile.cl