Viernes 19 Abril 2024
Es considerado el primer asesinato en coordinación entre Argentina-Uruguay, por el Plan Cóndor

47 años después, la justicia sigue sin responder

Por Victoria Camboni-20 de diciembre de 2021

Después de casi medio siglo, el homenaje se convierte en memoria. Hace 47 años, en la ruta 70, cerca de la intersección con la ruta 9, en la localidad de Soca, Canelones, fueron asesinadas cinco personas: Graciela Estefanell, María de los Ángeles Corbo -embarazada de seis meses-, Mirta Hernández, Héctor Brum y Florial García, en lo que se conoce como la primera operación conjunta de Inteligencia entre Argentina y Uruguay. Ellos fueron secuestrados en Argentina el 8 de noviembre de 1974 y trasladados de forma clandestina a Uruguay en el “vuelo cero” de la muerte, y finalmente fusilados en un descampado, el 20 de diciembre del mismo año. En el secuestro, Amaral, hijo pequeño de Mirta y Floreal, fue arrebatado y apropiado por una familia vinculada a la policía de Argentina. Este 18 de diciembre de 2021, el lugar del infame fusilamiento se convirtió en un sitio de memoria. Allí, se rindió homenaje a los caídos, junto a una numerosa concurrencia, estando presentes, además, autoridades departamentales como el propio intendente de Canelones, Yamandú Orsi, el director de Derechos Humanos de la Intendencia canaria, Carlos Garella, y referentes del ámbito de los derechos humanos como la exjueza penal Mariana Mota; el legislador Rafael Michelini, y Jorge Zabalza, expreso político, exintegrante del Movimiento de Liberación Nacional-Tupamaros, quien estuvo acompañado por su esposa Verónika Engler, hija del extupamaro Henry Engler.

2

Bajo un sol intenso de mediodía, salieron a la luz las emociones de tantas personas, muchas de las cuales sufrieron en carne propia encarcelamiento y torturas. Todas ellas se expresaron en términos de “memoria”, una vez más (por los caídos a manos de la criminalidad estatal y regional conocida como Plan Cóndor) dándose cita en ese rincón de la tierra uruguaya.

Waldemar Olivera, pastor metodista, integrante del grupo de los tres que hicieron ayuno en el 83, en SERPAJ, habló de "la tristeza que late como una herida sangrante que no cierra". "El motivo de nuestra indignación es el egoísmo tan grande de quienes se oponen o ponen trabas para llegar a la verdad de este crimen", que "son personas de carne y hueso que defienden sus intereses", "actores políticos, de gobierno", y también "estructuras que permiten el silencio y la impunidad".

"Elegimos tener memoria porque es una decisión política", dijo el director de la oficina de Derechos Humanos de la Intendencia, Carlos Garolla, y reclamó que otras intendencias deberían hacer lo mismo. Haciendo un racconto de las acciones que ha realizado la comuna canaria, dijo que en Canelones "hay más de 80 espacios conmemorativos", dos circuitos de memoria, además de "colaboración activa con las excavaciones en el batallón 14" y en otras reparticiones militares. Comentó también que existe “Memorias de mi pueblo”, una página web que lleva adelante la Intendencia, donde se nombran varios casos de violaciones de derechos humanos.

Adriana Cabrera habló en representación de la Comisión Nacional Honoraria de Sitios de Memoria. En su discurso, recordó principalmente a las mujeres. “Quizás no sea suficiente" este homenaje, dijo, "pero habremos hecho lo que podíamos para que las nuevas generaciones y las actuales puedan identificar los síntomas de deterioro" de la nación.

Desde Francia, la asociación “Dónde están”, envió una adhesión y palabras acusatorias con la Justicia uruguaya, ya que a pesar de que estos crímenes sucedieron hace casi 50 años, “los responsables siguen sin ser juzgados”. Uruguay es un país “donde la impunidad ha encontrado refugio".

3

Luz ‘Charito’ Estefanell es la hermana menor de Graciela, una de las cinco personas acribilladas, que habló en representación de los familiares de las víctimas de los fusilados.

En su discurso, apuntó contra las estafas y políticas destructivas que implementaron grandes poderes utilizando el golpe de Estado para manejar sus intereses económicos y financieros. La mujer habló de una "gran fuga de capitales", y de un "proceso inflacionario que agudizó y profundizó la brecha entre ricos y pobres", llevando a cabo una "política anti Estado" que impulsó la matriz agroexportadora para el beneficio de unos pocos. "Los cargos ministeriales son ocupados por la burguesía agroexportadora“, dijo, y agregó que todo eso llevó a una "lenta degradación de las condiciones sociales para la inmensa mayoría de la población"

En la antigüedad se hablaba de acción demoníaca, dijo Estefanell, haciendo referencia a la teoría de los dos demonios, que justificaba el accionar de los dictadores frente a lo que consideraba otro “demonio” (la guerrilla urbana, el Movimiento de Liberación Nacional-Tupamaros, los comunistas, y otros grupos que persiguió y asesinó brutalmente, justificando sus crímenes con una teoría inventada). Esa teoría fue reprochada por Estefanell, virando ese significado hacia las actuaciones del Estado en contra de sus ciudadanos: "Cabe calificar algunas que se efectuaron no solo durante la dictadura sino en los gobiernos que la precedieron", puntualizó, lo que interpretó como “la universalización de la tortura”.

4

Por otro lado, señaló que la investigación de las muertes fue archivada durante el gobierno del expresidente colorado Julio María Sanguinetti, y lamentó que los gobiernos precedentes "no han demostrado voluntad política" de esclarecer los hechos.

“El tiempo pasa, la impunidad continúa”, lamentó. Y enfatizó: "Es por la acción de movimientos sociales que permanece viva la necesidad de justicia y de luchar contra la impunidad".

FInalmente, instó a los presentes a "redoblar el esfuerzo", para que "esta sociedad por la que ellos lucharon, sea definitivamente buena".

Gaston Grisoni, presidente de la Asociación de expresos políticos del Uruguay -Crysol-, recordó que el memorial fue construido en 2008 como un "sencillo homenaje" a estas personas que, hasta ese entonces, se encontraban "en el más completo anonimato".

Grisoni fue crítico con la justicia uruguaya. Señaló que, aunque desde octubre de 2011 no hay impedimentos para juzgar a los culpables de delitos de lesa humanidad en Uruguay, la causa sigue sin avanzar, e incluso algunos responsables gozan de prisión domiciliaria sin haber sido interrogados por los hechos.

"La Suprema Corte de Justicia debe dejar de tolerar las artimañas que emplean los sospechosos de forma permanente para entorpecer las causas", que "son crímenes de lesa humanidad", y debe "frenar las indebidas prisiones domiciliarias de quienes han cometido los peores crímenes de este país", sentenció.

También cargó contra la Secretaría de Derechos Humanos del Gobierno, que para Grisoni vende "fruta podrida a la ciudadanía", “ocultando las responsabilidades de los dueños del poder en el terrorismo de Estado” (recordemos que en noviembre de este año, la responsable de la secretaría de DDHH Rosario Pérez aseguró en una actividad que organizó en el Parlamento, que el golpe de Estado fue la respuesta a "movimientos guerrilleros", silenciando la realidad de que se trató de un plan regional, el Plan Cóndor, impulsado desde Estados Unidos). Y retomó la valoración que hizo Estefanelli sobre los cometidos del golpe de Estado, no solo en Uruguay sino en los países linderos: “La dictadura fue la respuesta de las clases dominantes a las crisis económicas desde 1955, alentado en la región por sucesivos gobiernos de EEUU”.

El intendente de Canelones Yamandú Orsi, fue otro de los oradores en el homenaje a los fusilados de Soca. "La sociedad tiene cosas que son inaceptables", lamentó, y destacó que “lo más importante es tomar esa antorcha que tan gentilmente nos entregaron".

Luego de la oratoria, Luz Estefanell, hermana menor de Graciela, dialogó con Antimafia Dos Mil en un intercambio breve pero intenso de emotividad, y con la emoción apretada en sus ojos, recordó a su hermana mayor, a quien admiraba: “Era una buena persona”, atinó a decir, y la emoción no la dejó proseguir.

Grisoni: este fue “uno de los crímenes más espantosos cometidos por la dictadura”

El presidente de Crysol, Gastón Grisoni, habló con Antimafia Dos Mil, y expresó su satisfacción “por lo logrado, en transformar este, un lugar perdido de la campiña uruguaya, en un lugar de memoria y de recordación a uno de los crímenes más espantosos cometidos por la dictadura”. “Fueron uruguayos secuestrados en el exterior, bárbaramente torturados, y aparecieron acá. Esto era campo pelado hace 50 años”, rememoró.

Sus palabras fueron críticas contra el sistema judicial uruguayo, y contra la impunidad que hasta hoy reina sobre el caso.

“La justicia uruguaya lamentablemente sigue estando en falta con este crimen, de los más horrendos, y que además está muy vinculado a toda la operativa del Plan Cóndor”.

“Este lugar vamos a trabajar para transformar en punto de referencia a nivel de la memoria para el Mercosur, porque fue una operación del Mercosur”.

“La justicia uruguaya tiene que dejar de seguir haciendo la vista gorda y de no cumplir con sus obligaciones fundamentales”.

5

“Esto fue hecho por los servicios de inteligencia, que en aquel momento eran Gavazzo, Ramas, Cordero que está preso en Argentina, y muchos de los que están presos hoy”. “Armando Méndez sino estaba… El turco Arab… Todos los procesados que están acá están vinculados ahí”, pero “no han sido investigados por esta causa”.

“Ramas está en la casa con prisión domiciliaria, era uno de los operativos junto con Gavazzo. Si vas a buscar, tenés que ir por ese lado”, cerró.

Luego los presentes intercambiaron abrazos, llantos y sonrisas de esperanza, por haber marcado un hito de memoria y por el deseo e ímpetu de seguir avanzando en la búsqueda de la verdad.

Porque todavía hoy, 47 años después de los fusilamientos a María de los Ángeles, Mirta, Florial, Héctor y Graciela, no se hizo justicia. Cuando la jueza Mariana Mota estaba por emitir una sentencia sobre el caso, la Justicia realizó su traslado al ámbito civil, lo que impidió que la causa avanzara, dejando este crimen sin responsables, en la más absoluta impunidad.

Finalmente, entre recuerdos de compañeras y compañeros ya fallecidos, todos cantaron el himno nacional uruguayo y procedieron a develar una nueva placa conmemorativa. Una placa de homenaje a esas cinco personas destrozadas y luego acribilladas, que pagaron con la vida la inclaudicable decisión de seguir el dictado de su conciencia, y de trabajar en la construcción de una sociedad donde los derechos, sean verdaderamente humanos.

-------------------

*Foto de portada: Antimafia Dos Mil