Martes 15 Julio 2025

“Lex dura lex”; una expresión latina -en materia jurídica- que significa: “La ley es dura, pero es la ley” (un principio jurídico que enfatiza la necesidad de aplicar la ley tal cual, sin importar lo difícil que puede resultar en un caso particular).

Un significado, que si bien consta universalmente como que tiene que ser respetaco dado que es “la ley”, irrita, nos irrita y nos genera un repudio abrazado al convencimiento más humanitario de que cuando se llega a ese punto, se está frente a un obsceno dislate técnico jurídico, pero no porque pretendamos desmoronar ese axioma lineal, sino que para llegar al mismo se formalizó, con sabiduría mezquina (que ya es una contradición, decir que es una sabiduría, y lo admito, pero sirve para demostrar lo excelsos que fueron los mezquinos) una causa trucha literalmete contra la comunidad mapuche winkul de Bariloche, con el solo objeto de desalojarla; lo que significa, ampliando esta apreciación, es que la causa “fue trucha y armada contra la comunidad winkul, que fue siempre un juicio político; y la sentencia fue política” tal como lo enfatizaron -a través de un comunicado de prensa que llegó a nuestra redacción, firmado por la Gremial de Abogados y Abogadas argentinos- quienes asumieron la estoica defensa de los ahora condenados y de la Comunidad en su conjunto.

Nos subleva ser testigos, y no por primera vez, cómo las conspiraciones del poder sacan su rédito con el instrumento juridico, manipulándolo a su antojo, todo en definitiva, y hablando de este caso, para condenar a penas de hasta dos años y medio de prisión a seis integrantes de la Comunidad mapuche Lafken Winkul Mapu por el delito de “usurpación con despojo” de un predio estatal, en el marco de un juicio -el segundo- por el que atraviesan los integrantes de esa Lof tras los violentos desalojos llevados a cabo oportunamente, de las que fueron víctimas integrantes de esa Comunidad, y en particular un grupo de mujeres condenadas.

Transcribimos textualmente ese comunicado que pone de relieve una situación que nosotros, desde nuestra redacción, como tantos otros colegas -obviamente, que no son parte del periodismo hegemónico, pacato, y servil al poder de un Ejecutivo mezquino y racista- repudiamos rotundamente y denunciamos, para que la opinión pública despierte y no quede atrapada en la indiferencia o el desconocimiento de una de las tantas injusticias que se cometen con la más absoluta impunidad, y a la vista pública.

“La sentencia fue política. Tribunal, fiscales,abogados querellantes, expresan proyectos políticos”

“La Gremial lo dijo desde el principio: fue una causa Trucha, armada con el solo objeto de desalojar a la Comunidad Winkul.

En 2017 el presidente Macri y la ministra Bullrich arrasaron la Comunidad.

Y junto al juez federal y la fiscal asesinaron a Rafa Nahuel e hirieron por la espalda a Gonzalo Coña y Johana Colhuan. Pero no pudieron desalojar el territorio sagrado.

A principios del Gobierno anterior hubo intentos serios y concretos por parte de la Ministra de Seguridad Sabina Federic y su equipo para evitar represión, sangre, sacrificios y pérdidas de libertades y la Gremial colaboró y puso el hombro a esas gestiones. Pero el propio gobierno terminó cediendo a los sectores supremacistas y, tras la salida de esos funcionarios, avanzó con la represión y la criminalización.

En 2022, entonces, durante el gobierno de Alberto, Cristina Fernández y Aníbal Fernández, su ministro de “seguridad”, las tropas federales, con la cobertura del ministerio público fiscal y el Poder Judicial de la Nación, volvieron a arrasar Winkul.

Trucharon una causa con la complicidad absoluta del Fuero Federal en su totalidad, tanto de Bariloche como a nivel nacional. Jueces y fiscales conservadores o directamente reaccionarios y sus colegas progresistas fallaron siempre igual: en contra de las comunidades.

Las cautivas fueron trasladadas encadenadas a más de dos mil kilómetros, sufrieron vejaciones a su pudor y todo tipo de abusos, partos en cautiverio, meses y meses de prisión, etc.

El Gobierno anterior “se la dejó picando” a Milei, Bullrich y los racistas de Bariloche.

Les prepararon el camino. Hicieron la mayor parte del trabajo sucio.

El resultado era más que cantado:

Jueces, fiscales y querellas con la ideología del racismo y bancando los intereses de los latifundistas y las grandes empresas fueron llevando el proceso judicial a este final anunciado.

Cómo dijimos y reiteramos: las sentencias contra los pueblos originarios se firman en los despachos judiciales pero se redactan en otros lados.

Y así llegamos a una sentencia que pintaba cantada desde el primer día.

La Gremial no se las hizo fácil como todos pudieron ver.

Se las vendimos muy cara. Pero era imposible, sobre todo considerando también el contexto político e internacional. Y si algo evitó condenas de cumplimiento efectivo como pidieron las Acusaciones fue precisamente la dureza de la Resistencia que le opusimos (tanto nosotros como nuestros asistidos).

La contundencia y precisión de la abundante prueba, sobre todo testimonial, que todos escucharon. Las Pericias concretas que ofrecimos.

Y la garra con que enfrentamos cada planteo acusatorio.

El Juez probablemente debió haber tenido desde el principio una sentencia mucho más dura que no pudo pronunciar por todas estas razones.

LA SENTENCIA fue adversa para la Comunidad Winkul y para nosotros

1) El Tribunal rechazó nuestro pedido de un imputabilidad de Betiana Coluhan por ser menor al momento de los hechos.

2) El Tribunal rechazó nuestro planteo de "non bis in idem" o sea que entendió que no se estaba juzgando dos veces el mismo delito.

Y los condenó a todos:

A la Machi Betiana Colhuan a 2 años y 2 meses de prisión en suspenso.

A Luciana Jaramillo a 2 años y 4 meses de prisión en suspenso.

A Celeste Güenumil a 1 año de prisión en suspenso.

A Romina Rosas a 2 años y 4 meses de prisión en suspenso.

A Yessica Bonefoi a 2 años y 6 meses de prisión en suspenso.

A Matías Santana a 2 años y 6 meses de prisión en suspenso, que unificada con una pena anterior de un año por atentado y resistencia a la autoridad se unificó en 3 años de prisión en suspenso, procediendo a su libertad.

Asimismo se condenó a todos a las siguientes medidas:

1) pago de costas a los abogados de las querellas.

2) trabajos comunitarios a cada uno, por el tiempo de sus condenas en la mayoría de los casos.

3) prohibición de acercarse a los lotes de terrenos de los supuestos vecinos racistas (que viven en Bs. As.).

Respecto del Rewe, se dispuso mantener la situación actual de su conservación en el lugar y su custodia a cargo de Parques Nacionales.

En relación con su remoción se estableció que ello debía resolverse en otro incidente judicial que tramita en Bariloche, tal como habíamos sostenido en distintas presentaciones judiciales.

En definitiva, por ahora todos seguirán en libertad hasta tanto quede firme la sentencia y una eventual unificación que pueda producirse con la anterior sentencia condenatoria que pesa contra algunas integrantes de la Comunidad hoy vueltas a condenar; condena anterior que tampoco está firme.

Por ahora nada debe pagarse porque todo está recurrido y absolutamente todos quedan en libertad completa.

La Gremial seguirá agotando las vías recursivas.

Agradecemos a los muchos y muchas que nos acompañaron y colaboraron con nosotros.

A los y las testigos que se la jugaron.

Y a las lagmien y peñis que nos brindaron siempre su confianza”

Testimonios de resistencia

El diario argentino Página 12 se hizo eco periodísticamente de esta iniquidad de audiencia y de condena, y en una crónica a conciencia -de la colega Adriana Meyer- se dió a conocer el testimonio de la machi (sanadora y autoridad espiritual) Betiana Colhuan, antes de pronunciarse la sentencia, en una audiencia por Zoon.

"Decimos basta de violar nuestros derechos, que nuestras infancias puedan vivir en paz en el territorio, queremos poder existir con nuestra cosmovisión, somos la continuidad de la resistencia de mi pueblo exterminado, no me considero usurpadora, soy hija de la tierra"

En otro momento de la audiencia la machi Colhuan Nahuel puntualizó: "Para nosotros es muy injusto acusarnos de usurpación de un territorio que sí fue usurpado por el Estado cuando llevó a cabo una campaña genocida, ese territorio para nosotros es un espacio sagrado, por eso no voy a retroceder ni un paso, porque ese espacio es el que vio nacer a mis hijos y es el que hoy guarda la vida de Rafael Nahuel. A él lo asesinaron por la espalda por ese espacio. Tal vez quieran encerrarnos, desalojarnos y despojarnos de nuestro territorio, pero esta historia y esta lucha no va a terminar con nosotros. A nuestros cuerpos los van a poder encarcelar, pero nuestro espíritu va a seguir siendo libre. Aunque nos tiren con gas, nos asesinen, somos parte de la naturaleza y la vamos a respetar y vamos a seguir existiendo en nuestro territorio para proteger la vida".

Matías Santana -a quien conocí personalmente en la Lof Cushamen, a orillas del río Chubut, donde se produjo la desaparición forzada con resultado de muerte de Santiago Maldonado- igualmente aportó su valioso testimonio,en tono de cuestionamiento, siendo que él además fue testigo clave precisamente en el caso del joven artesano, quien no siendo mapuche igualmente y a conciencia se plegó a su causa y su lucha con el resultado conocido.

"La fiscalía y los querellantes en tanto tiempo de proceso investigativo no han podido encontrar ni una prueba concreta para acusarnos. Nos volvemos a encontrar en un proceso donde se da la vulneración de nuestros derechos. Nosotros tenemos que perder la libertad, dejar de lado todos nuestros derechos que deberíamos tener garantizados".

Abogado Eduardo Soarez : “Hablaron de ideología, no tienen ninguna prueba”

Eduardo Soarez , fiel no solo a su absoluta profesionalidad y ética humana, sino a su grado de conciencia que lo hace parte vital de la Gremial de Abogados, junto a otros colegas, tomó la palabra y en su alegato, además de denunciar que el juicio se basó en una “causa trucha creada por el ex ministro de Seguridad, Anibal Fernández, en complicidad con la justicia federal” sostuvo y subrayó enfática y enérgicamente, que “desde la instrucción venimos viendo racismo y desprecio. Y todo esto lo hicieron ustedes: la Fiscalía, Parques Nacionales y los sectores racistas y supremacistas, no hablaron de derecho, ni siquiera de su propia prueba, hablaron de ideología, no tienen nada, no tienen ninguna prueba".

Cabe consigar según lo informado por Página 12 declararon en el proceso como testigos las antropólogas Claudia Briones, Ana Ramos y Lorena Cañuqueo, responsables de los peritajes antropológicos y de un informe de salud ancestral mapuche; tambié la ex ministra de Seguridad de la Nación, Sabina Frederic; y la ex defensora del Público, Miriam Lewin, como así también la abogada del Serpaj, Mariana Katz.

*Foto de Portada: Agencia Presentes Org.