El fiscal jefe de Catanzaro, Nicola Gratteri, molesta. Tanto molesta que la 'Ndrangheta estaba lista para atacar. No como en el 2020, cuando inmediatamente después del operativo "Rinascita-Scott" se supo que las pandillas habían contratado a un asesino para matar al magistrado con el uso de un rifle de alto poder. Esta vez las organizaciones criminales estarían listas para volar con una bomba al fiscal. La noticia la dio Il Fatto Quotidiano, que habla de una alarma lanzada por los servicios de seguridad.

El proyecto de muerte debería haber tenido lugar a lo largo de la ruta que conecta la casa del magistrado con su oficina.

Por este motivo, se ha elevado el nivel de la custodia de Gratteri. Los ojos más atentos habían notado recientemente que entre el equipamiento de los autos de su custodia estaba el "bomb jammer", el bloqueador de frecuencias utilizado para impedir que los sistemas de comunicación por radio reciban o transmitan señales.

Se aumentó el número de vehículos blindados escoltados con la participación de los agentes del NOCS, el Núcleo Operativo Central de Seguridad de la policía estatal, y al mismo tiempo también se elevó el nivel de seguridad cerca de las oficinas del fiscal.

La tutela también se asignó a los miembros de la familia de Gratteri.

Mientras tanto, la Fiscalía de Salerno, competente en las investigaciones que tienen como parte ofendida a los magistrados del distrito de Catanzaro, ha abierto un expediente.

Hasta donde se sabe, según informó el colega Lucio Musolino, la alarma fue dada hace ya unas semanas.

Una noticia llegada directamente desde Sudamérica, donde los servicios secretos de un país extranjero habrían interceptado una comunicación sospechosa, en la que se hablaría claramente del uso de un dispositivo conectado a un control remoto.

Durante años, en sus investigaciones, Gratteri se ocupó precisamente de los asuntos de la 'Ndrangheta en América del Sur y Estados Unidos, especialmente en lo que se refiere al narcotráfico y debido a eso la amenaza contra el magistrado debe ser considerara particularmente grave, por lo que el proyecto criminal puede estar ya en una etapa avanzada.

En los últimos días, Gratteri fue rechazado por el Consejo Superior de la Magistratura (CSM) para el cargo de titular de la Fiscalía Nacional Antimafia.

Durante el debate que precedió a la votación, el consejero Nino Di Matteo recordó a todos que Gratteri era "uno de los más expuestos y con riesgo de vida". Y no solo eso. También agregó: "Recientemente se ha adquirido múltiple información detallada de posibles atentados en su contra. Evidentemente el crimen organizado percibe su acción como un obstáculo y un peligro concreto e inmanente. Ante esta situación temo que" la opción de no nombrarlo en la Dirección Nacional Antimafia (DNA) "sonaría como una especie de rechazo a la obra del doctor Gratteri. No sería entendido por la opinión pública, todavía atenta y realmente sensible a la lucha contra la mafia. Y a los ojos de la mafia, y en el más alto contexto criminal en que se colocan”, resultaría como otro más, y muy peligroso "presagio de mayores riesgos", como una toma de "distancia institucional" hacia un "magistrado tan expuesto".

También por esta razón la elección del CSM se vuelve aún más incomprensible. Porque una vez más hay quienes prefieren menospreciar la situación y fingir que nada pasa, a pesar del evidente riesgo de un sistema criminal que, treinta años después de las masacres, puede volver a golpear de la forma más devastadora.

Estos también son juegos de poder. En Il Tempo, en los comentarios de un artículo, se destacó, citando fuentes internas no especificadas entre los togados del CSM, que la elección de Giovanni Melillo como director de la DNA pudo haber sido tomada con satisfacción incluso del otro lado del Canal, en el Palacio de Buckingham. Durante una reunión entre los magistrados, algunos se habrían preguntado: "¿Es apropiado que una silla tan importante recaiga en una persona que comparte su existencia en casa con un altísimo representante de un Estado extranjero? Sí, porque Jill Morris, la esposa de Melillo, es Embajadora del Reino Unido en Italia desde hace años, y es un peso fuerte de la administración británica". Y otros habrían pedido una intervención del CSM o del COPASIR (Comité Parlamentario para la Seguridad de la República) para garantizar la transparencia y aclarar si podría haber superposiciones. La razón es simple, porque "hay que garantizar la transparencia, cuando los papeles son tan delicados y atañen a la seguridad del Estado. Inglaterra es una nación amiga, y garante del derecho, pero si un alto magistrado convive con un representante de un país que es una dictadura ¿qué se hace?". Más allá de todo, lo cierto es que Gratteri es uno de los pocos magistrados que ha denunciado con contundencia que la City de Londres es uno de los centros de lavado de dinero. "El sistema regulatorio inglés es mucho más permeable -dijo respondiendo a las preguntas de nuestro director Giorgio Bongiovanni- el Reino Unido se ha convertido en una especie de refugio seguro para las inversiones del capital mafioso y, también, en un lugar donde encontrar servicios eficientes para la construcción de estructuras corporativas complejas creadas para el único propósito de fomentar el lavado de dinero sucio. Hay entidades y empresas de servicios que se especializan en montar empresas pantallas que se venden 'llave en mano'. Proporcionan escrituras de constitución, edificios, accionistas y administradores de fachada a través de los cuales se facilita la comisión de delitos financieros, fiscales y societarios. Y las mafias huelen todo esto".

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*Foto de portada: © Jacopo Bonfili