Hoy se celebró en el Consejo Superior de la Magistratura (CSM) la primera sesión plenaria del 2022.

En la apertura del pleno tomó la palabra el consejero togado Nino Di Matteo, quien recordó que en unos días los magistrados Roberto Scarpinato (exfiscal general de Palermo) y Teresa Principato (actualmente fiscal adjunta de la fiscalía nacional Antimafia) se van a jubilar por haber alcanzado los límites de edad, y subrayó sus méritos y capacidades, pasando luego a destacar la delicadeza y profundidad de sus actividades investigativas y procesales. Son "dos magistrados que vivieron y representaron la historia de la mejor justicia italiana en las últimas décadas -dijo Di Matteo- especialmente desde aquel 1992 que ambos vivieron mientras, junto a Paolo Borsellino, en particular, desempeñaron las funciones de fiscales adjuntos de la Dirección Distrital Antimafia (DDA) de Palermo. Para mí y para muchos otros magistrados, el Dr. Scarpinato seguirá siendo un ejemplo, un punto de referencia insustituible por la claridad y la profundidad de sus análisis sobre los sistemas criminales, por la capacidad de captar los aspectos más ocultos y recónditos de su recíproca interdependencia, por la visión elevada y siempre orientada hacia la aplicación efectiva de los principios constitucionales en toda cuestión de justicia, por la independencia, la determinación y el coraje excepcional que ha demostrado Roberto Scarpinato en momentos y contextos particularmente delicados. Pienso, por ejemplo, en su reacción ante la masacre de via d'Amelio y la gestión opaca de la fiscalía de Palermo en ese momento, que resultó en una importante audiencia ante el Consejo Superior de la Magistratura en la que, entre otras cosas, reveló aspectos importantes y hasta entonces desconocidos de las actividades e intenciones de Giovanni Falcone y Paolo Borsellino antes de sus respectivos asesinatos. Sigo pensando en la instrucción y conducción de la audiencia de primera instancia del juicio Andreotti, así como en la investigación e identificación de posibles responsabilidades ajenas a Cosa Nostra en la larga teoría de masacres y crímenes excelentes. Actividad esta última que, quiero recalcar, el Dr. Scarpinato en forma personal, directa e incansablemente hasta estos últimos días, llevó adelante como fiscal general de Palermo, en cuanto titular de las investigaciones realizadas por esa oficina y, en un contexto más amplio, en coordinación con la Fiscalía Nacional Antimafia y otras Direcciones Distritales Antimafia. Las intuiciones e investigaciones de Roberto Scarpinato han dado el último impulso y concreción a esta coordinación. Debido a eso, la jubilación del Dr. Scarpinato representa, en mi opinión, una pérdida de memoria, de profundidad de análisis, de capacidad de volar alto y de ver lejos que no será fácil de llenar. Creo que la magistratura italiana debe también un agradecimiento especial a Teresa Principato, en el último tiempo fiscal sustituta de la Fiscalía Nacional Antimafia y antes, y durante mucho tiempo, fiscal sustituta en Palermo, adjunta en Trapani, y luego nuevamente en Palermo protagonista de importantes investigaciones, que culminaron en los maxi procesos que van desde las articulaciones de Cosa Nostra y Stidda en el área de Agrigento a los de la red de protección mafiosa de los fugitivos Bernardo Provenzano primero y Matteo Messina Denaro después. Roberto Scarpinato y Teresa Principato también pagaron precios muy altos en términos de compresión de su propia esfera de libertad por su meritoria actividad, por la fuerza y ​​consistencia de su acción. Me veo obligado a afirmar que el país deberá guardar sentimientos de profunda gratitud hacia ellos". Finalmente, el CSM también quiso recordar a David Sassoli, con las palabras del vicepresidente David Ermini y del consejero laico Filippo Donati, perteneciente al Movimiento 5 Estrellas y presidente de la Red Europea de Consejos de Justicia. Ermini, que estuvo ligado por una relación de amistad al presidente del Parlamento Europeo, destacó su capacidad humana ("era una persona de absoluta transparencia y claridad") y política ("ejercía su tarea de manera ejemplar, no ha sido nunca partidario, fue un gran europeísta"). "Un hombre de las instituciones, una gran persona que nos representó con valentía y determinación en el exterior - dijo Donati - Todos lo vamos a extrañar".

Ciertamente Roberto Scarpinato representa a esa magistratura que todavía es capaz de asumir el peso de buscar algunas verdades incómodas. Siempre capaz de hacer un amplio análisis social de las relaciones que caracterizan a la mafia y al sistema criminal, Scarpinato se ha centrado repetidamente en los "secretos inconfesables" que representan "el alma misma del poder, como decía Giovanni Falcone" y que "algunos de estos secretos ciertamente están en conocimiento de algunos de los líderes de Cosa Nostra condenados a cadena perpetua por las masacres".

Sigue siendo muy actual su discurso en la conferencia titulada "¿Qué mafia mató a Paolo Borsellino?", en el que abordó el tema del inevitable connubio entre el poder y los "sistemas criminales" ahondando en la relación entre el "cerebro burgués y la escopeta proletaria". Un magistrado de espaldas rectas que, junto a sus colegas Nino Di Matteo, Nicola Gratteri, Giuseppe Lombardo y otros como ellos han sufrido amenazas muy fuertes a lo largo de los años, incluso de muerte, y siempre han sido objeto de un "silencio culpable" por parte tanto de políticos como de algunos colegas magistrados.

Junto a él, como anticipó Di Matteo, también se retirará la doctora Teresa Principato, que ha llevado adelante la búsqueda del prófugo Matteo Messina Denaro, protegido, según la magistrada, por "una red masónica", de la 'Ndrangheta calabresa, apoyada por una red de "burguesía profesional", política y empresarial.

Obras extremadamente delicadas como las realizadas por Roberto Scarpino y Teresa Principato, son capaces de disipar el hedor de tantas mentiras que se cuentan y que aún hoy representan un material precioso para quien quiere buscar la verdad.

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*Imagen de portada: reelaboración gráfica de Paolo Bassani