"Existe el riesgo de que los procesos queden en la nada"
 
Por Giorgio Bongiovanni-23 de julio de 2021

"La aprobación de la reforma con el mecanismo de la imposibilidad de proceder por el transcurso del tiempo, en la Apelación y Casación, corre el riesgo de marcar una grave derrota para la justicia".

"La reforma corre incluso el riesgo de reforzar a los poderes criminales, que desde siempre se han propuesto actuar como reguladores de los conflictos en la sociedad: creo que los mafiosos intentarán resolver los temas que a partir de ahora no encuentren solución en tantos procesos que van a quedar en la nada".

Estas fueron las consideraciones del magistrado Nino Di Matteo, hoy miembro del Consejo Superior de la Magistratura (CSM) y exfiscal del proceso de la Tratativa Estado-mafia en Palermo, en una entrevista concedida a La Repubblica y realizada por el colega Salvo Palazzolo.

"En un sistema democrático -agregó- desestimar los juicios equivale a negarles justicia a todos: imputados, incluso inocentes, víctimas de delitos, ciudadanos que, respecto de ciertos hechos, tienen derecho a exigir que se llegue a una verdad procesal. La denegación de justicia alimentará también la sensación de impunidad de los delincuentes, y entre ellos y en primer lugar la de los funcionarios de cuello blanco; el prestigio de las organizaciones mafiosas aumentará dramáticamente. Los jefes, lamentablemente para nosotros, siempre logran dictar y ejecutar sus sentencias, a diferencia del Estado".

Sobre los efectos de la reforma en los juicios por hechos de la delincuencia organizada, según Di Matteo, "el contragolpe también será violento en lo que respecta a la lucha contra la mafia. La experiencia de más de 25 años transcurridos en los juzgados ocupándome de estos temas, me lleva a considerar que muchos juicios, por graves delitos mafiosos, se van a extinguir en la apelación, donde la regla es ahora la reapertura de la instrucción, precisamente por la especificidad del material probatorio. Estamos ante procesos donde el camino del esclarecimiento de la verdad es inevitablemente más largo y más complejo".

Según el consejero togado, con la reforma se corre el riesgo de que incluso los acusados ​​confesos puedan apelar las sentencias de primera instancia, implementando "peligrosas estrategias dilatorias".

Sobre la ministra Cartabia aseguró que los procesos sancionados con cadena perpetua no están sujetos a la imposibilidad de proceder y para los delitos más graves se otorgarán prórrogas; sin embargo, hay que tener en cuenta que "en la mayoría de los casos, los juicios a los mafiosos se refieren a hechos muy graves que no son punibles con cadena perpetua".

Pero lo que preocupa al exfiscal del proceso de la Tratativa Estado-mafia es toda la reforma. Respondiendo a las preguntas de Palazzolo, agregó: "Su aprobación marcará el final de los maxi procesos, los juicios que, a partir de la experiencia de los años ochenta en Palermo y luego en otras partes de Italia, representaron una piedra angular importante en la lucha contra la mafia. El miedo a no poder celebrar este tipo de juicios en el plazo previsto por la reforma llevará inevitablemente a los fiscales a quebrar los resultados de las maxi investigaciones, llevando a juicio, en varios procesos separados, a un número limitado de imputados y solo por algunos hechos delictivos".

Una suerte de multiplicación de procesos que podría comportar "el grave riesgo de perder ese panorama que es necesario para valorar adecuadamente el fenómeno mafioso. Otra pieza preocupante de un retroceso generalizado".

Pero también hay otro aspecto que es visto con alarma por Di Matteo: la abolición de la llamada cadena perpetua estricta, ordenada por la Corte Constitucional.

Junto con la reforma "de hecho, los delitos mafiosos se asimilan a todos los demás tipos de delitos, eliminándose el concepto mismo de doble sistema, que fue uno de los pilares de la legislación que quería Giovanni Falcone".

Finalmente, el magistrado reiteró su opinión sobre la Comisión de Justicia del Sur, ya expresada ayer durante el pleno: "La sola idea de este órgano es a mi juicio inaceptable y ofensiva. Se basa en una discriminación generalizada, y por lo tanto incomprensible, entre las oficinas del sur y las del resto del país. Los problemas de la justicia deben abordarse desde una perspectiva unitaria".

--------------------

*Foto de portada: © Imagoeconomica