Por Giorgio Bongiovanni y Luca Grossi-07 de abril de 2021

"Hasta hace pocos días he escuchado reivindicaciones de pertenencia a algún grupo interno del Consejo. Esta es una práctica que a mi juicio debemos abandonar, porque puede condicionar efectivamente, incluso en apariencia, la regla según la cual cada miembro debe ejercer sus funciones con total imparcialidad e independencia". Así se expresó hoy el consejero togado Nino Di Matteo durante el Pleno del Consejo Superior de la Magistratura.

En el orden del día, una vez más, había varios puntos de discusión para la reforma dispuesta por el legislador y referida al ordenamiento judicial, a los criterios de elegibilidad y reubicación de tareas de los magistrados y al establecimiento y funcionamiento del Consejo Superior de la Magistratura. Dirigiéndose al resto de los consejeros Di Matteo, elegido como independiente, volvió a hablar de esos riesgos y peligros que se dan cada vez que resurge la lógica de las corrientes internas, en detrimento de la meritocracia y la independencia del magistrado individual.

"Si fuese cierto que un magistrado que no adhiere a ninguna corriente, por razones contingentes, nunca podrá aspirar a formar parte del Consejo Superior de la Magistratura, ello significaría una patología y una falta de implementación del Espíritu de la Constitución -dijo el consejero togado-. El tema de la discusión de hoy es una norma que establece que dentro del Consejo no se pueden formar grupos entre sus miembros y que cada miembro debe ejercer sus funciones con total imparcialidad e independencia, esta debe ser la base de lo que debemos hacer hoy aquí". Ciertamente, existe una diferencia entre aquellos grupos a los que se puede definir como 'pertenencia cultural' y las llamadas corrientes, pero, como reiteró el propio Di Matteo, "hay grupos que han constituido un condicionamiento inadecuado de la vida y del funcionamiento de la magistratura y del órgano de gobierno de la misma".

Además, el consejero togado recordó que la magistratura no tiene "responsabilidad política" por lo que hace, recordando que una vez que se ingresa al Consejo, cada togado "deja de pertenecer a un grupo cualquiera y se convierte en miembro del Consejo Superior de la Magistratura".

Consideraciones claras y precisas sobre el espíritu que debe ser propio de todo magistrado, dentro y fuera de la institución del CSM, que compartimos.

Porque, aunque todo magistrado tuviera el derecho a asociarse, está claro que cuando asume ciertos cargos no puede tener más vínculos internos que los de defender la Constitución.

Durante el debate también se plantearon diferentes opiniones y puntos de vista, entre ellos el del consejero Celentano, el cual reconoció la posibilidad de que en el caso de que el magistrado individual "no se separe de una agrupación cultural",eso lo volvería "dependiente de lo que los medios de comunicación, u otras entidades, decidan".

Antes de la discusión el vicepresidente David Ermini aseguró que a fines de abril el pleno del CSM votará los seis dictámenes presentados por la Sexta Comisión, sobre el proyecto de reforma del Ordenamiento Judicial y del CSM aprobada por el anterior Gobierno y actualmente bajo examen de la Comisión de Justicia de la Cámara. "El plazo para la presentación de enmiendas a los dictámenes se fijará en la próxima semana, para luego proceder, a partir de la semana siguiente, con las votaciones", recordó a los consejeros.

En cuanto a la invitación a regresar al Palazzo dei Marescialli (sede del CSM, ndt) ya dirigida a la ministra de Justicia Marta Cartabia el pasado 23 de marzo -cuando se celebró el pleno presidido por el Jefe de Estado Sergio Mattarella y dedicado a la Fiscalía Europea- Ermini recordó que no hay aún una fecha fija, pero "existe la voluntad de reiterar la invitación" a la Guardasellos.

También durante la jornada de hoy el Pleno votó por unanimidad el nombramiento de Carmelo Sgroi, actual fiscal general adjunto, para el cargo de Abogado General de la Corte de Casación. Miembro del poder judicial desde 1982, Sgroi fue juez en los Tribunales de Venecia; desde 1988 trabajó (fuera de función) en la Oficina Legislativa del Ministerio de Justicia y desde 1993 como asistente de estudios en la Corte Constitucional. Desde el 2005 es magistrado de apelación de la Fiscalía General de la Casación y desde el año siguiente fiscal general adjunto.

-----------------

*Foto de portada: de archivo © Imagoeconomica