Un hombre que portaba tobillera electrónica se encuentra a disposición de la justicia después de haber sido denunciado por realizar gestos obscenos y bajarse los pantalones en Piriápolis, departamento de Maldonado, en el marco de las movilizaciones del pasado viernes 28 de enero “contra la cultura de la violación”, en todo el Uruguay.

Un caso de violación grupal hizo saltar las alarmas de mujeres, disidencias y feministas que, autoconvocadas, se organizaron para tomar el país y manifestarse en contra de los abusos, que forman parte de una sociedad signada por la aceptación e impunidad de los abusadores, y por la complicidad de las instituciones.

Y quizás justamente por esa cultura es que ese mismo día, mientras la marcha transitaba por la Rambla de los argentinos en Piriápolis, un hombre de 31 años con antecedentes penales fue denunciado por una funcionaria municipal y llevado por la policía a la Seccional 11. El hombre fue acusado de bajarse los pantalones y realizar gestos obscenos frente a las mujeres que se manifestaban.

Según informó La Diaria, en la seccional policial, el hombre manifestó que realizaría una denuncia, ya que “participantes de la marcha lo habían agredido con una picana”.

Ese mismo hombre fue denunciado por varias participantes de haberse desnudado frente a ellas y exhibir orgullosamente la tobillera electrónica, que portan habitualmente personas que han cometido situaciones de violencia doméstica, y están vigilados por la policía para que no puedan acercarse a la persona que violentaron.

Ese hombre les gritaba y las provocaba, según las declaraciones de esas mujeres que lo denunciaron.

El caso está en manos de la fiscal Ana Carolina Dean, de la Fiscalía Letrada Departamental de cuarto turno.

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*Foto de portada: Revista Cero