Las autoridades, a instancias del recientemente electo presidente del Colombia, Gustavo Petro, pondrán especial atención en las investigaciones para aclarar el asesinato del diputado del Partido Liberal de Colombia, Carlos Hernández, este último jueves asesinado a balazos -prácticamente a quemarropa- por un grupo armado que lo emboscó en una vía de tránsito. 

Toda la cúpula del Partido Liberal vive horas de consternación, por este nuevo atentado cometido contra un militante de este movimiento político, tomando en cuenta que en el correr de esta semana, otro integrante de Pacto Histórico, el activista ambientalista Juan David Ochoa corrió igual suerte, pero en la región de Antioquía.

Se informó desde Colombia que es unánime el repudio a este “vil asesinato” según los calificativos direccionados a los responsables del atentado, tanto materiales como ideológicos.

El flamante presidente de Colombia dijo sobre este y los otros hechos: "Van varios casos de asesinatos de militantes que nos apoyaron. Las entidades de investigación están llamadas a determinar los autores de estos asesinatos sistemáticos contra un grupo civil con identidad política. Solidaridad a la familia del diputado Carlos Hernández”.

Los medios locales dieron a conocer que el atentado mortal tuvo lugar a las 7 horas de la mañana del jueves, en una vía de tránsito que comunica a los municipios de Fortul y Arauquita. En este punto, concretamente, los sicarios a cargo de le operación, interceptaron el vehículo en el cual se encontraba Hernández, a quien lograron bajarlo para finalmente abrir fuego sobre él, con armas automáticas de grueso calibre, que literalmente acabaron con su vida en forma instantánea dada la gravedad de las heridas. Se consignó que los tiradores accionaron sus armas a muy escasa distancia de su víctima: eso es a quemarropa, para cerciorarse de no fallar.

El mortal ataque contra Hernández, padre de dos hijos, se concretó no obstante habérsele asignado un esquema de seguridad, que poco pudo neutralizar el accionar criminal. Trascendió además que el diputado, quien era miembro del Consejo Directivo de la Confederación Nacional de Asambleas y Diputados de Colombia, había recibido amenazas de muerte, razón por la cual estaba bajo un programa de la Unidad Nacional de Protección, que de hecho en este caso no resultó eficiente.

En ese marco, ahora las autoridades trabajan para ubicar a los responsables materiales del atentado, y a los ideólogos, porque es evidente que este hecho se debe inscribir en un contexto de violencia orientada hacia militantes de Pacto Histórico, que hace parte del Partido Liberal, que apoya al presidente electo recientemente.

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*Foto de portada: Casanare Noticias