Son ocho capítulos, cuyos detalles pueden ser estudiados en la página de internet http://www.consensus911.org y que arrojan una nueva e impresionante luz acerca de lo que, a distancia de ya casi 11 años, millones y millones de personas de todo el mundo (digamos la inmensa mayoría) no sabe nada. Comenzando por las mentiras oficiales que se han dicho para impedir que el público - en primer lugar americano - supiera donde se encontraban y qué estaban haciendo los cuatro personajes más importantes del momento: el presidente estadounidense George W. Bush, el vicepresidente Dick Cheney, el secretario de Defensa Donald Rumsfeld, el jefe del consejo de Estados Mayores de las Fuerzas Armadas estadounidenses Richard Myers.

11-s-torres-gemelas-fotolasmonedasdejudasLos ocho nuevos estudios fueron realizados por los veinte miembros del 9/11 Consensus Panel usando los resultados del  F.O.I.A. (Freedom of Information Act) basados en el análisis de todas las fuentes periodísticas disponibles. Y basándose en las mismas afirmaciones de la Comisión oficial de investigación.

La documentación es efectivamente impresionante y aparecen mentiras oficiales a borbotones. Comenzando por la comprobación del hecho, realmente espantoso, de que se concentraron un número sin precedentes de ejercicios militares precisamente en el día del 11 de septiembre del 2001. Fueron nada menos que 7. Pero la Comisión oficial de investigación recuerda, brevemente, sólo uno, el llamado “Vigilant Guardian”. Pero éste se realizaba todos los años en octubre. Únicamente en el 2001 fue adelantado a septiembre. En simultáneo también se desarrolló el “Global Guardian”, del NORAD, el cual también se había realizado siempre en octubre. Haciendo la lista fueron:  “Amalgam Warrior” (ejercicio de vuelo a gran escala en varias regiones NORAD, regularmente dos veces al año, en abril y en octubre). Esta vez éste también fue anticipado a Septiembre. El cuarto es interesante “Northern vigilance”, que esa mañana hizo movilizar a toda la fuerza aérea de la defensa estadounidense hacia Canadá y Alaska. A continuación venían, en realidad eran simultáneos, el “Vigilant Warrior” (ejercicios de entrenamiento de vuelo) y “Red Flight” (que determinó el traslado de los aviones a reacción desde la base de Langley, Virginia, a otro destino). Y finalmente el  “National Reconnaissance Office” (NRO) que – ¡oh, casualidad! - tenía programado para esa mañana, exactamente a las 09:10 horas el impacto de un pequeño avión contra una de las torres del aeropuerto Dulles de Washington.

Es imposible resumir aquí todos los aspectos clamorosos que emergen de estos ocho capítulos.
Algo es seguro: la Comisión oficial, presidida (ilegalmente) por Philip Zelikow, íntimo amigo y colaborador de la Condoleeza Rice, no solo se “olvidó” de seis de los siete ejercicios en curso, sino que además subestimó en forma increíble la confusión que todos esos ejercicios militares provocaron mientras se estaba desarrollando el secuestro de los cuatro aviones. Además resulta indiscutible que esa mañana las pantallas de radar de la defensa aérea estadounidense habían sido cegadas por imágenes falsas de lo que estaba ocurriendo realmente en los cielos de América del Norte. Esas imágenes falsas fueron eliminadas de las pantallas únicamente después de que la Torre Sur del World Trade Center fuera embestida.

¿Pero quién estaba al mando en esas horas? Las fuentes oficiales repitieron a ultranza que Bush, Cheney, Rumsfeld, Myers (que estaba reemplazando al general Hugh Shelton), Montague Winfield, general él también y jefe del war-room, se encontraban todos (algo realmente 11-s-torres-gemelas-fotopijamasurfcominexplicable) lejanos de sus puestos de responsabilidad. Es decir no estaban donde tendrían que haber estado. Y que llegaron solo después de que el Pentágono fuera embestido, a las 09:37 horas. Los documentos lo desmienten. Algunos de ellos no solo estaban en sus puestos, sino que además estaban bien informados de lo que estaba ocurriendo e incluso discutieron si era necesario derribar o no el cuarto avión secuestrado, el vuelo 93, cuyos fragmentos no fueron hallados en Shanksville (como testificó la Comisión oficial) sino en un radio de varios kilómetros. Otro hecho desmentido de la versión oficial. 

El Consensus Panel no es un tribunal, pero recoge elementos que podrán ser útiles para cualquier investigación posterior, no importa a cargo de quien esté, ya sea de entes públicos, de los medios de comunicación, de los centros académicos. Quien quiera abrir los ojos vaya a cerciorarse de ello. Son un aporte a la investigación que está realizando Ferdinando Imposimato para exponer los cargos de imputación en el Tribunal Penal internacional de la Haya para que examine la hipótesis de incriminar a importantes miembros de la administración americana de la época con la acusación de “atentado en concurso ideal”.

Fonte: http://www.ilfattoquotidiano.it/2012/06/07/11-settembre-nuovi-indizi-smentiscono-la-versione-ufficiale/255256/

http://www.megachip.info/finestre/zero-11-settembre/8349-11-settembre-nuovi-indizi-smentiscono-la-versione-ufficiale.html